Print Page Options
Previous Prev Day Next DayNext

Read the New Testament in 24 Weeks

A reading plan that walks through the entire New Testament in 24 weeks of daily readings.
Duration: 168 days
La Palabra (Hispanoamérica) (BLPH)
Version
2 Timoteo 3-4

Tiempos difíciles

No pierdas esto de vista: cuando se acerque el fin llegarán momentos difíciles. Los que vivan entonces se volverán egoístas, avaros, fanfarrones, soberbios, calumniadores, rebeldes a sus padres, desagradecidos, sacrílegos. Serán duros de corazón, desleales, difamadores, disolutos, inhumanos, malévolos, traidores, temerarios y engreídos; buscarán su propio placer en lugar de buscar a Dios y querrán aparentar una vida piadosa cuya autenticidad quedará desmentida por su conducta. ¡Apártate de esa clase de gente! A ella pertenecen los que se cuelan de rondón en las casas y sorben el seso de mujeres incautas cargadas de pecados y agitadas por toda suerte de pasiones; mujeres que andan siempre curioseando, pero son absolutamente incapaces de dar con la verdad. De la misma manera que Janés y Jambrés se enfrentaron a Moisés, estos de ahora se enfrentan a la verdad. Son personas de mente pervertida, sin garantía alguna en lo que atañe a la fe. Pero no podrán ir muy lejos porque todos se darán cuenta de su insensatez, como sucedió con Janés y Jambrés.

III.— NUEVA INVITACIÓN A LA FIDELIDAD, CON PABLO COMO EJEMPLO (3,10—4,8)

Invitación a la fidelidad

10 Tú, en cambio, has seguido de cerca mi enseñanza, mi estilo de vida y mis proyectos. Has imitado mi fe, mi mansedumbre, mi amor y mi paciencia. 11 Me has acompañado en las persecuciones y sufrimientos, como los que padecí en Antioquía, Iconio y Listra. ¡Cuántas persecuciones tuve que soportar! Pero de todas me libró el Señor. 12 Por lo demás, todos los que aspiren a llevar una vida cristiana auténticamente piadosa, sufrirán persecución. 13 En cuanto a los perversos y embaucadores, irán de mal en peor, engañando a los demás, pero siendo ellos los engañados.

14 Por tu parte, permanece fiel a lo que aprendiste y aceptaste. Sabes quiénes fueron tus maestros, 15 y que desde la cuna te han sido familiares las sagradas Escrituras como fuente de sabiduría en orden a la salvación mediante la fe en Cristo Jesús. 16 Toda Escritura está inspirada por Dios y es provechosa para enseñar, para argumentar, para corregir y para educar en la rectitud, 17 a fin de que el creyente esté perfectamente equipado para hacer toda clase de bien.

El deber de proclamar el mensaje

En presencia de Dios y de Cristo Jesús que ha de juzgar a vivos y muertos cuando se manifieste como rey, te suplico encarecidamente que proclames el mensaje e insistas tanto si parece oportuno como si no lo parece. Argumenta, reprende y exhorta echando mano de toda tu paciencia y competencia en enseñar. Porque vendrán tiempos en que no se soportará la auténtica enseñanza, sino que, para halagar el oído, quienes escuchan se rodearán de maestros a la medida de sus propios antojos, se apartarán de la verdad y darán crédito a los mitos. Pero tú permanece siempre alerta, proclama el mensaje de salvación, desempeña con esmero el ministerio.

En espera del premio

Mi vida está a punto de ser ofrecida en sacrificio; la hora de mi muerte está al caer. He luchado con valor, he corrido hasta llegar a la meta, he conservado la fe. Sólo me queda recibir la corona correspondiente a mi rectitud, que el Señor, justo juez, me entregará el día del juicio. Y no sólo a mí, sino a todos los que esperan con amor su manifestación.

IV.— ENCARGOS Y RECOMENDACIONES (4,9-18)

Recomendaciones personales

Procura venir pronto a verme, 10 pues Dimas me ha abandonado; se ha dejado seducir por las cosas de este mundo y se ha marchado a Tesalónica. Crescencio ha ido a Galacia y Tito a Dalmacia. 11 El único que está conmigo es Lucas. Trae contigo a Marcos, porque me es útil de veras para el ministerio apostólico. 12 A Tíquico lo envié a Éfeso. 13 Cuando vengas, tráeme el abrigo que dejé en Troas, en casa de Carpo. Trae también los libros, en especial los pergaminos.

14 Alejandro, el herrero, se ha portado muy mal conmigo. El Señor se lo pagará conforme a lo que ha hecho. 15 Ten cuidado con él también tú, pues se ha opuesto tenazmente a nuestro mensaje.

16 En la primera vista de mi causa ante el tribunal, ninguno me asistió; todos me desampararon. ¡Que Dios no se lo tenga en cuenta! 17 Pero el Señor estuvo conmigo y me dio fuerzas para llevar a buen término el anuncio del mensaje, de modo que todos los paganos pudieron escucharlo. El Señor, que me libró de la boca del león, 18 seguirá librándome de todo lo malo y me otorgará la salvación en su reino celestial. A él la gloria por siempre y para siempre. Amén.

Conclusión (4,19-23)

Saludos finales

19 Saluda a Prisca y a Áquila; también a la familia de Onesíforo. 20 Erasto se quedó en Corinto. Trófimo cayó enfermo y tuve que dejarlo en Mileto. 21 Date prisa y ven antes del invierno.

Saludos de Éubulo, Pudente, Lino, Claudia y de todos los hermanos. 22 Que el Señor esté contigo y que la gracia los acompañe a todos ustedes.

La Palabra (Hispanoamérica) (BLPH)

La Palabra, (versión hispanoamericana) © 2010 Texto y Edición, Sociedad Bíblica de España