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M’Cheyne Bible Reading Plan

The classic M'Cheyne plan--read the Old Testament, New Testament, and Psalms or Gospels every day.
Duration: 365 days
La Biblia de las Américas (LBLA)
Version
Génesis 43

Los hermanos de José regresan a Egipto

43 Y el hambre iba agravándose en la tierra(A). Y sucedió que cuando acabaron de comer el grano que habían traído de Egipto, su padre les dijo: Volved allá y compradnos un poco de alimento. Pero Judá le respondió, diciendo: Aquel[a] hombre claramente nos advirtió[b]: «No veréis mi rostro si vuestro hermano no está con vosotros(B)». Si envías a nuestro hermano con nosotros, descenderemos y compraremos alimento; pero si no lo envías, no descenderemos; porque el hombre nos dijo: «No veréis mi rostro si vuestro hermano no está con vosotros». Entonces Israel respondió: ¿Por qué me habéis tratado tan mal, informando[c] al hombre que teníais un hermano más? Pero ellos dijeron: El hombre nos preguntó específicamente acerca de nosotros y nuestros familiares, diciendo: «¿Vive aún vuestro padre? ¿Tenéis otro hermano?». Y nosotros contestamos sus preguntas[d](C). ¿Acaso podíamos nosotros saber que él diría: «Traed[e] a vuestro hermano»? Y Judá dijo a su padre Israel: Envía al muchacho conmigo, y nos levantaremos e iremos, para que vivamos y no perezcamos(D), tanto nosotros como tú y nuestros pequeños. Yo me haré responsable[f] de él; de mi mano lo demandarás. Si yo no te lo vuelvo a traer[g](E) y lo pongo delante de ti, que lleve yo la culpa para siempre delante de ti[h]; 10 porque si no hubiéramos perdido tiempo, sin duda ya habríamos vuelto dos veces.

11 Entonces su padre Israel les dijo: Si así tiene que ser, haced esto: tomad de los mejores productos de la tierra en vuestras vasijas, y llevad a aquel[i] hombre como presente(F) un poco de bálsamo y un poco de miel, resina aromática(G), mirra, nueces y almendras. 12 Y tomad doble cantidad de dinero en vuestra mano, y llevad de nuevo en vuestra mano el dinero que fue devuelto en la boca de vuestros costales(H); tal vez fue un error. 13 Tomad también a vuestro hermano, levantaos y volved a aquel[j] hombre; 14 y que el Dios Todopoderoso[k](I) os conceda misericordia ante aquel[l] hombre(J) para que ponga en libertad al otro hermano vuestro(K) y a Benjamín. En cuanto a mí, si he de ser privado de mis hijos(L), que así sea[m]. 15 Tomaron, pues, los hombres este presente(M), y tomaron doble cantidad de dinero en su mano y a Benjamín, y se levantaron y descendieron a Egipto y se presentaron delante de José.

José y Benjamín

16 Cuando José vio a Benjamín con ellos, dijo al mayordomo de su casa(N): Haz entrar a estos[n] hombres a casa, y mata un animal y prepáralo, porque estos[o] hombres comerán conmigo al mediodía. 17 El hombre hizo como José le dijo, y llevó[p] a los hombres a casa de José. 18 Y los hombres tenían miedo porque eran llevados a casa de José y dijeron: Por causa del dinero que fue devuelto en nuestros costales la primera vez hemos sido traídos aquí, para tener pretexto contra[q] nosotros y caer sobre nosotros y tomarnos por esclavos con nuestros asnos. 19 Entonces se acercaron al mayordomo de la casa de José, y le hablaron a la entrada de la casa, 20 y dijeron: Oh señor mío, ciertamente descendimos la primera vez para comprar alimentos; 21 y sucedió que cuando llegamos a la posada, abrimos nuestros costales, y he aquí, el dinero de cada uno estaba en la boca de su costal(O), todo nuestro dinero[r]. Así que lo hemos vuelto a traer en nuestra mano(P). 22 También hemos traído otro dinero en nuestra mano para comprar alimentos; no sabemos quién puso nuestro dinero en nuestros costales. 23 Y él dijo: No os preocupéis[s], no temáis. Vuestro Dios y el Dios de vuestro padre os ha dado ese tesoro en vuestros costales(Q); yo recibí vuestro dinero[t]. Entonces les sacó a Simeón(R). 24 Después el hombre llevó a los hombres a casa de José, y les dio agua y se lavaron los pies(S); y dio forraje a sus asnos. 25 Entonces prepararon el presente(T) para[u] la venida de José al mediodía; pues habían oído que iban a comer[v] allí.

26 Cuando José regresó a casa, le trajeron el presente que tenían en su mano a la casa y se postraron ante él en tierra(U). 27 Entonces él les preguntó cómo se encontraban, y dijo: ¿Cómo está vuestro anciano padre de quien me hablasteis? ¿Vive todavía(V)? 28 Y ellos dijeron: Tu siervo nuestro padre está bien; todavía vive. Y ellos se inclinaron en reverencia[w](W). 29 Al alzar él sus ojos y ver a su hermano Benjamín, hijo de su madre, dijo: ¿Es este vuestro hermano menor de quien me hablasteis(X)? Y dijo: Dios te imparta su favor(Y), hijo mío. 30 Y José se apresuró a salir, pues se sintió profundamente conmovido[x](Z) a causa de su hermano y buscó donde llorar; y entró en su aposento y lloró(AA) allí. 31 Después se lavó la cara y salió, y controlándose(AB), dijo: Servid la comida[y]. 32 Y le sirvieron a él aparte, y a ellos aparte, y a los egipcios que comían con él, también aparte; porque los egipcios no podían comer[z] con los hebreos, pues esto es abominación para los egipcios(AC). 33 Y los sentaron[aa] delante de él, el primogénito conforme a su primogenitura, y el más joven conforme a su juventud, y los hombres se miraban(AD) unos a otros con asombro. 34 Él les llevó porciones de su propia mesa[ab], pero la porción de Benjamín(AE) era cinco veces mayor que la de cualquiera de ellos. Bebieron, pues, y se alegraron con él.

Marcos 13

Profecía sobre la destrucción del templo

13 (A)Cuando salía del templo, uno de sus discípulos le dijo*: Maestro, ¡mira qué[a] piedras y qué[b] edificios! Y Jesús le dijo: ¿Ves estos grandes edificios? No quedará piedra sobre piedra(B) que no sea derribada.

Señales antes del fin

Y estando Él sentado en el monte de los Olivos(C), frente al templo, Pedro, Jacobo[c], Juan(D) y Andrés le preguntaban en privado: Dinos, ¿cuándo sucederá[d] esto, y qué señal[e] habrá cuando todas estas cosas se hayan de cumplir? Y Jesús comenzó a decirles: Mirad que nadie os engañe. Muchos vendrán en mi nombre diciendo: «Yo soy(E) el Cristo», y engañarán a muchos. Y cuando oigáis de guerras y de rumores de guerras, no os alarméis; es necesario que todo esto suceda, pero todavía no es el fin. Porque se levantará nación contra nación, y reino contra reino; y habrá terremotos en diversos lugares; y habrá hambres. Esto solo es el comienzo de dolores[f].

Pero estad alerta[g]; porque os entregarán a los tribunales[h] y seréis azotados en las sinagogas(F), y compareceréis delante de gobernadores y reyes por mi causa, para testimonio a ellos. 10 Pero primero el evangelio debe ser predicado a todas las naciones(G). 11 (H)Y cuando os lleven y os entreguen, no os preocupéis de antemano por lo que vais a decir, sino que lo que os sea dado en aquella hora, eso hablad; porque no sois vosotros los que habláis, sino el Espíritu Santo. 12 Y el hermano entregará a la muerte al hermano, y el padre al hijo; y los hijos se levantarán contra los padres, y les causarán la muerte[i]. 13 Y seréis odiados de todos por causa de mi nombre(I), pero el que persevere hasta el fin, ese será salvo.

La abominación de la desolación

14 Mas cuando veáis la abominación de la desolación(J) puesta donde no debe estar (el que lea, que entienda), entonces los que estén en Judea huyan a los montes(K); 15 y el que esté en la azotea, no baje ni entre a sacar nada de su casa(L); 16 y el que esté en el campo, no vuelva atrás a tomar su capa. 17 Pero, ¡ay de las que estén encinta y de las que estén criando en aquellos días! 18 Orad para que esto no suceda en el invierno. 19 Porque aquellos días serán de tribulación, tal como no ha acontecido desde el principio de la creación(M) que hizo[j] Dios hasta ahora, ni acontecerá jamás. 20 Y si el Señor no hubiera acortado aquellos[k] días, nadie[l] se salvaría; pero por causa de los escogidos[m] que Él eligió[n], acortó los días. 21 Entonces, si alguno os dice: «Mirad, aquí está el Cristo[o]», o: «Mirad, allí está», no le creáis. 22 Porque se levantarán falsos Cristos y falsos profetas(N), y mostrarán señales[p] y prodigios(O) a fin de extraviar, de ser posible, a los escogidos[q]. 23 Mas vosotros, estad alerta; ved que os lo he dicho todo de antemano.

La venida del Hijo del Hombre

24 Pero en aquellos días, después de esa tribulación, el sol se oscurecerá y la luna no dará su luz(P), 25 las estrellas irán cayendo del cielo y las potencias que están en los cielos serán sacudidas(Q). 26 Entonces verán al Hijo del Hombre(R) que viene en las nubes con gran poder y gloria(S). 27 Y entonces enviará a los ángeles, y reunirá a sus escogidos[r] de los cuatro vientos(T), desde el extremo de la tierra hasta el extremo del cielo(U).

Parábola de la higuera

28 De la higuera aprended la parábola: cuando su rama ya se pone tierna y echa las hojas, sabéis que el verano está cerca. 29 Así también vosotros, cuando veáis que suceden estas cosas, sabed que Él está cerca[s], a las puertas. 30 En verdad os digo que no pasará esta generación hasta que todo esto suceda. 31 El cielo y la tierra pasarán, mas mis palabras no pasarán. 32 Pero de aquel día o de aquella hora nadie sabe, ni siquiera los ángeles en el cielo, ni el Hijo, sino solo el Padre(V).

Exhortación a velar

33 Estad alerta, velad(W); porque no sabéis cuándo es el tiempo señalado. 34 Es como un hombre que se fue de viaje, y al salir de su casa dejó a sus siervos encargados[t], asignándole a cada uno su tarea, y ordenó al portero que estuviera alerta(X). 35 Por tanto, velad(Y), porque no sabéis cuándo viene el señor de la casa, si al atardecer, o a la medianoche, o al canto del gallo(Z), o al amanecer(AA); 36 no sea que venga de repente y os halle dormidos(AB). 37 Y lo que a vosotros digo, a todos lo digo: ¡Velad(AC)!

Job 9

Respuesta de Job a Bildad

Entonces respondió Job y dijo:

En verdad yo sé que es así,
pero ¿cómo puede un hombre ser justo delante de[a] Dios(A)?
Si alguno quisiera contender con Él(B),
no podría contestarle ni una vez entre mil.
Sabio de corazón(C) y robusto de fuerzas(D),
¿quién le ha desafiado[b] sin sufrir daño[c](E)?
Él es el que remueve los montes, y estos no saben cómo
cuando los vuelca en su furor(F);
el que sacude la tierra de su lugar(G),
y sus columnas tiemblan(H);
el que manda al sol que no brille[d],
y pone sello a las estrellas(I);
el que solo extiende los cielos(J),
y holla[e] las olas del mar(K);
el que hace la Osa, el Orión y las Pléyades(L),
y las cámaras del sur(M);
10 el que hace grandes cosas, inescrutables[f],
y maravillas sin número(N).
11 Si Él pasara junto a mí, no le vería;
si me pasara adelante, no le percibiría(O).
12 Si Él arrebatara algo, ¿quién le estorbaría(P)?
Quién podrá decirle: «¿Qué haces(Q)?».

13 Dios no retirará su ira;
bajo Él quedan humillados los que ayudan a Rahab(R).
14 ¿Cómo puedo yo responderle[g](S),
y escoger mis palabras delante de[h] Él?
15 Porque aunque yo tuviera razón(T), no podría responder[i];
tendría que implorar la misericordia de mi juez(U).
16 Si yo llamara y Él me respondiera,
no podría creer que escuchara mi voz.
17 Porque Él me quebranta con tempestad,
y sin causa multiplica mis heridas(V).
18 No me permite cobrar aliento(W),
sino que me llena de amarguras(X).
19 Si es cuestión de poder, he aquí, Él es poderoso(Y);
y si es cuestión de justicia, ¿quién le[j] citará?
20 Aunque soy justo(Z), mi boca me condenará(AA);
aunque soy inocente[k], Él me declarará culpable.
21 Inocente soy(AB),
no hago caso de mí mismo,
desprecio mi vida(AC).
22 Todo es lo mismo, por tanto digo:
«El destruye al inocente y al malvado(AD)».
23 Si el azote mata de repente,
Él se burla de la desesperación del inocente(AE).
24 La tierra es entregada en manos de los impíos(AF);
Él cubre el rostro de sus jueces(AG);
si no es Él, ¿quién será?

25 Mis días son más ligeros que un corredor[l](AH);
huyen, no ven el bien(AI).
26 Se deslizan como barcos de juncos(AJ),
como águila que se arroja sobre su presa[m](AK).
27 Aunque yo diga: «Olvidaré mi queja(AL),
cambiaré mi triste semblante y me alegraré»,
28 temeroso(AM) estoy de todos mis dolores,
sé que tú no me absolverás(AN).
29 Si soy impío(AO),
¿para qué, pues, esforzarme en vano?
30 Si me lavara con nieve
y limpiara mis manos[n](AP) con lejía(AQ),
31 aun así me hundirías en la fosa,
y mis propios vestidos me aborrecerían.
32 Porque Él no es hombre(AR) como yo, para que le responda(AS),
para que juntos vengamos a juicio.
33 No hay árbitro entre nosotros(AT),
que ponga su mano sobre ambos.
34 Que Él quite de mí su vara,
y no me espante su terror(AU).
35 Entonces yo hablaré y no le temeré(AV);
porque en mi opinión[o] yo no soy así.

Romanos 13

Actitud hacia las autoridades

13 Sométase toda persona[a](A) a las autoridades que gobiernan(B); porque no hay autoridad(C) sino de[b] Dios, y las que existen, por Dios son constituidas. Por consiguiente, el que resiste a la autoridad, a lo ordenado por Dios se ha opuesto; y los que se han opuesto, sobre sí recibirán condenación. Porque los gobernantes no son motivo de temor para los de buena conducta[c], sino para el que hace el mal[d]. ¿Deseas, pues, no temer a la autoridad? Haz lo bueno y tendrás elogios de ella(D), pues es para ti un ministro[e] de Dios para bien. Pero si haces lo malo, teme; porque no en vano lleva la espada, pues ministro es de Dios, un vengador(E) que castiga[f] al que practica lo malo. Por tanto, es necesario someterse, no solo por razón del castigo[g], sino también por causa de la conciencia(F). Pues por esto también pagáis impuestos, porque los gobernantes son servidores de Dios, dedicados precisamente a esto. Pagad a todos lo que debáis(G): al que impuesto(H), impuesto; al que tributo(I), tributo; al que temor, temor; al que honor, honor.

El amor, cumplimiento de la ley

No debáis a nadie nada, sino el amaros unos a otros; porque el que ama a su prójimo[h], ha cumplido la ley(J). Porque esto: No cometerás adulterio, no matarás, no hurtarás, no codiciarás(K), y cualquier[i] otro mandamiento, en estas palabras se resume: Amarás a tu prójimo como a ti mismo(L). 10 El amor no hace mal[j] al prójimo; por tanto, el amor es el cumplimiento de la ley(M).

Se acerca el amanecer

11 Y haced todo esto, conociendo el tiempo, que ya es hora(N) de despertaros del sueño(O); porque ahora la salvación está más cerca de nosotros[k] que cuando creímos. 12 La noche está muy avanzada(P), y el día está cerca(Q). Por tanto, desechemos[l] las obras de las tinieblas(R) y vistámonos con las armas de la luz(S). 13 Andemos decentemente(T), como de día, no en orgías y borracheras, no en promiscuidad sexual y lujurias, no en pleitos y envidias(U); 14 antes bien, vestíos del Señor Jesucristo(V), y no penséis en proveer para las lujurias de la carne(W).

La Biblia de las Américas (LBLA)

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