Print Page Options
Previous Prev Day Next DayNext

M’Cheyne Bible Reading Plan

The classic M'Cheyne plan--read the Old Testament, New Testament, and Psalms or Gospels every day.
Duration: 365 days
Palabra de Dios para Todos (PDT)
Version
Números 4

La labor de los levitas

El SEÑOR les dijo a Moisés y a Aarón: «Hagan un censo de los coatitas que hay entre los levitas por grupos familiares y familias; que tengan entre los 30 y 50 años de edad, y sean aptos para trabajar en la carpa del encuentro. El trabajo de los coatitas en lo que tiene que ver con la carpa del encuentro será el de hacerse cargo del transporte de las cosas más sagradas.

»Cuando se movilice el campamento, Aarón y sus hijos deberán entrar a la carpa y quitar la cortina de la entrada. Luego cubrirán el cofre del pacto con ella, y pondrán encima una cubierta de cuero de delfín. Después extenderán una tela morada sobre ella y le colocarán los palos para transportarla, y extenderán también una tela morada sobre la mesa de la presencia y pondrán en ella los platos, las cucharas, los tazones y las jarras para las ofrendas de vino. El pan de la ofrenda permanente estará también ahí. Extenderán una tela roja sobre esto, cubrirán la mesa con una cubierta de cuero de delfín y después le colocarán los palos para transportarla.

»Después tomarán una tela morada y cubrirán con ella el candelabro, sus lámparas, las tenazas, los platillos y todas las jarras de aceite utilizadas en la lámpara. 10 Luego pondrán esto y su equipo en una cubierta de cuero de delfín y colocarán todo eso sobre unos palos para cargarlo. 11 También extenderán una tela morada sobre el altar de oro, lo cubrirán con una cubierta de cuero de delfín y le pondrán sus palos para cargarlo.

12 »Después tendrán que tomar todas las piezas del equipo usado para servir en el lugar sagrado. Los pondrán en una tela morada, los cubrirán con cuero de delfín y después los colocarán sobre sus palos para cargarlo.

13 »Luego deberán limpiar las cenizas del altar y extender una tela morada sobre este. 14 Después pondrán sobre el altar todos los utensilios que se usan para el servicio, o sea las tenazas, los tenedores, las palas y los tazones, todo el equipo del altar. Sobre este deberán extender una cubierta de cuero de delfín y luego poner todo esto sobre sus palos para cargarlo.

15 »Aarón y sus hijos terminarán de cubrir todo el equipo sagrado y todos los objetos sagrados. Una vez el campamento esté listo para moverse, entonces los coatitas podrán venir a cargar todo esto. Pero ellos no deberán tocar las cosas sagradas para que no mueran. Los coatitas cargarán las cosas de la carpa del encuentro.

16 »Eleazar, hijo del sacerdote Aarón, estará a cargo del aceite para la lámpara, del incienso aromático, de la ofrenda diaria de cereal[a] y del aceite de consagrar. Él también será responsable del cuidado de toda la Carpa Sagrada y de todo lo que hay en ella. Responderá por las cosas sagradas y por sus utensilios».

17 Luego el SEÑOR les dijo a Moisés y a Aarón: 18 «No dejen que ninguno de los grupos familiares de los coatitas sea separado[b] de los levitas. 19 Ellos deberán hacer lo siguiente para que no mueran al tocar las cosas más sagradas: Aarón y sus hijos entrarán y le enseñarán a cada uno de ellos el trabajo que deben hacer y lo que tienen que cargar. 20 Los coatitas no deben intentar mirar las cosas sagradas ni siquiera por un instante porque si lo hacen morirán».

21 El SEÑOR le dijo a Moisés: 22 «Haz también un censo de los guersonitas por familias y por grupos familiares. 23 Cuenta a los que tengan entre los 30 y 50 años de edad, o sea todos los que sean aptos para trabajar en la carpa del encuentro.

24 »El trabajo de los guersonitas es empacar y mover. 25 Ellos transportarán las cortinas de la Carpa Sagrada, la carpa del encuentro y su cubierta y la cubierta de cuero de delfín que está encima de ella. También transportarán la cortina de la entrada de la carpa del encuentro. 26 Ellos deben transportar también las cortinas del patio, el armazón a la entrada de la puerta del patio que rodea la Carpa Sagrada y el altar, sus cuerdas y todos sus utensilios y accesorios necesarios para realizar su trabajo. 27 Aarón y sus hijos supervisarán todo el trabajo de los guersonitas, todo lo que muevan y empaquen. Tú deberás hacerlos responsables de cuidar todo lo que movilicen. 28 Ese es el trabajo de los guersonitas en la carpa del encuentro y lo que tienen a su cargo. Esto lo harán bajo la dirección de Itamar hijo del sacerdote Aarón.

29 »También haz un censo de los meraritas por grupos familiares y familias. 30 Cuenta a los que tengan entre los 30 y 50 años de edad, o sea todos los que sean aptos para trabajar en la carpa del encuentro. 31 En cuanto a su trabajo en la carpa del encuentro, ellos transportarán las tablas de la Carpa Sagrada, sus travesaños, postes y bases. 32 También los postes del patio alrededor, sus bases, estacas y cuerdas, todo su equipo. Haz una lista por nombre de todo lo que ellos tienen que cuidar y cargar. 33 Ese es el trabajo de los meraritas en lo que respecta a la carpa del encuentro. Esto lo harán bajo la dirección de Itamar, hijo del sacerdote Aarón».

34 Moisés, Aarón y los jefes de la comunidad hicieron el censo de los coatitas por sus grupos familiares y familias. 35 Contaron a todos los hombres entre 30 y 50 años de edad, o sea todos los aptos para trabajar en la carpa del encuentro. 36 El resultado del censo por grupos familiares fue de 2750 hombres. 37 Esos fueron los hombres contados de los grupos familiares coatitas para trabajar en la carpa del encuentro. Moisés y Aarón los contaron conforme a lo ordenado por el SEÑOR a Moisés.

38 Se hizo también el censo de los guersonitas por grupos familiares y familias. 39 Contaron a todos los hombres entre 30 y 50 años de edad, o sea todos los aptos para trabajar en la carpa del encuentro. 40 El resultado del censo por grupos familiares fue de 2630. 41 Esos fueron los hombres contados de los grupos familiares guersonitas para trabajar en la carpa del encuentro. Moisés y Aarón los contaron conforme a lo ordenado por el SEÑOR a Moisés.

42 Los meraritas también fueron censados por grupos familiares y familias. 43 Contaron a todos los hombres entre los 30 y 50 años de edad, o sea todos los aptos para trabajar en la carpa del encuentro. 44 El resultado del censo por grupos familiares fue de 3200. 45 Esos fueron los hombres contados de los grupos familiares meraritas. Moisés y Aarón los contaron conforme a lo ordenado por el SEÑOR a Moisés.

46 Así pues, Moisés, Aarón y los jefes de la comunidad hicieron el censo de todos los levitas por grupos familiares y familias. 47 Contaron a todos los hombres entre 30 y 50 años de edad, o sea todos los aptos para trabajar, manejar y transportar todo lo de la carpa del encuentro. 48 El total de este censo fue de 8580 hombres. 49 Ese censo se hizo conforme a lo ordenado por el SEÑOR a Moisés. A cada uno se le dijo lo que debía hacer y lo que debía transportar, todo tal como el SEÑOR le mandó a Moisés.

Salmos 38

No me castigues, Señor

Canción de David para el día de la conmemoración.

SEÑOR, no me reprendas con enojo.
    No me corrijas cuando estés muy molesto.
Me lanzas tus flechas
    y con tu mano me aplastas.
Debido a tu enojo obrando en mi cuerpo,
    no me siento bien.
Por causa de mi pecado,
    mis huesos ya no están sanos.
Mi culpa pesa sobre mi cabeza como una enorme carga.
    Me estoy hundiendo.

A causa de estupidez, mis heridas van de mal en peor.
    Se pudren y dan mal olor.
Me la paso retorciéndome de dolor
    y vivo lamentándome.
Siento por dentro la fiebre ocasionada por una pena terrible;
    estoy completamente descompuesto.
Estoy tan adolorido que ya no doy más
    y mi corazón abatido me hace gritar.

SEÑOR, tú sabes lo que deseo.
    Has escuchado mis lamentos.
10 Mi corazón late exageradamente.
    Se me ha acabado la fuerza
    y mis ojos han perdido su brillo.[a]
11 Mis amigos y quienes me querían no se acercan a mí por causa de mi enfermedad.
    Hasta mis familiares se han alejado de mí.
12 Mis enemigos me tienden trampas
    y amenazan con destruirme.
    Dicen mentiras de mí todo el tiempo.

13 Pero yo me hago el sordo y los ignoro.
    Me hago el mudo y no digo nada.
14 Soy como el que no oye;
    no puedo quejarme ni defenderme.
15 SEÑOR, yo espero en ti;
    tú, Señor y Dios mío, serás quien responda.
16 No permitas que mis enemigos se alegren con mi caída;
    no permitas que canten victoria.

17 Estoy a punto de rendirme;
    el dolor no me abandona.
18 Confieso mis culpas,
    me duele mi pecado.
19 Mis enemigos son fuertes;
    son muchos los que me odian sin causa.
20 Y esos que devuelven mal a cambio del bien siguen atacándome
    porque me esfuerzo en hacer el bien.

21 SEÑOR, no me abandones.
    Dios mío, no te quedes lejos de mí.
22 Apresúrate a ayudarme.
    ¡Señor mío, sálvame!

Cantares 2

Canta la amada

Yo soy tan sólo una flor de Sarón[a],
    un lirio de los valles[b].

Canta el amado

Amada mía, entre todas las mujeres,
    tú eres para mí como un lirio entre los cardos.

Canta la amada

Amor mío, entre todos los hombres,
    tú eres para mí como un manzano entre los árboles silvestres.

Me ha gustado descansar bajo su sombra
    y saborear su dulce fruto.
Con la intención de plantar su bandera de amor sobre mí,
    mi amado me llevó a la casa del vino.

Denme de comer pasas
    y aliméntenme con manzanas,
    que estoy débil de tanto amar.
Él coloca uno de sus brazos bajo mi cabeza
    y con el otro me abraza.

Canta el amado

Mujeres de Jerusalén, júrenme
    por las gacelas y por los ciervos del campo
que no molestarán ni despertarán al amor
    hasta que sea el momento indicado.

Canta la amada

¡Escuchen! ¡Es la voz de mi amado!
    ¡Mírenlo! Allá viene presuroso
saltando entre las montañas
    y brincando por los cerros.
Parece una gacela
    o un ciervo joven.

Mírenlo allí escondido tras la pared,
    mirando por la ventana
    y espiando por entre la reja.

10 Mi amado me dijo:
«Levántate, amada mía;
    ven conmigo, preciosa.
11 Mira que ya no hace frío
    y ha dejado de llover.
12 ¡Han nacido flores nuevas
    y los pájaros han vuelto a cantar[c]!
    El arrullo de la tórtola se escucha en nuestra tierra.
13 La higuera madura sus higos,
    y las viñas en flor esparcen su fragancia.
Levántate, amada mía;
    ven conmigo, preciosa.
14 Paloma mía, que anidas en las grietas de las rocas
    y en los riscos de las montañas,
déjame ver tu rostro, déjame oír tu voz;
    porque tu voz es dulce y hermoso es tu rostro».
15 Atrapen a los zorros,
    a esos zorros pequeños
que arrasan las viñas,
    porque nuestra viña está ahora en flor.

16 ¡Él es mío y yo soy suya!
    Él come entre las flores de primavera.
17 Mientras la brisa del día respira
    y las sombras se van alargando,[d]
vuelve, amado mío,
    como gacela, o cervatillo,
    por entre montañas bien perfumadas.[e]

Hebreos 2

La grandeza de nuestra salvación

Por eso debemos prestar más atención al mensaje que hemos escuchado para que no estemos a la deriva. Recuerden que Dios confirmó la enseñanza que dio por medio de los ángeles, y que la gente fue castigada cada vez que la desobedecía. Entonces, ¿cómo escaparemos del castigo si despreciamos ahora la gran salvación que hemos recibido? El Señor la anunció primero y luego los que la escucharon de él nos confirmaron que era verdad. Dios también la confirmó utilizando señales, maravillas, diferentes milagros y dones que distribuyó según su voluntad por medio del Espíritu Santo.

Cristo se hizo hombre para salvarnos

Además, Dios no sometió al control de los ángeles el mundo venidero del cual estamos hablando. Hay un lugar en la Escritura donde está escrito:

«Dios, ¿por qué te acuerdas de los seres humanos?
    ¿Por qué te preocupas por el hijo del hombre[a]?
    ¿Es él tan importante?
Durante breve tiempo lo hiciste un poco menos que los ángeles.
    Tú lo coronaste de gloria y honor.
(A)Pusiste todo bajo su poder[b]».[c]

Así que, aquí «todo» significa que no hay nada que él no gobierne; sin embargo, no vemos todavía que esto se haya cumplido, pero sí vemos que Jesús fue hecho «durante breve tiempo un poco menos que los ángeles». Y ahora ha sido «coronado de gloria y honor» porque sufrió y murió. Por el generoso amor que Dios tiene hacia nosotros, Jesús tuvo que sufrir la muerte para bien de todos.

10 Dios hizo todo lo que existe para su propia honra y quería compartir su grandeza con muchos hijos. Así que era conveniente perfeccionar a Jesús por medio del sufrimiento, porque él es quien los lleva a la salvación. 11 Tanto los que son purificados como Jesús, quien los purifica, tienen el mismo Padre. Por eso Jesús no se avergüenza de llamarlos sus hermanos 12 (B)cuando dice:

«Hablaré de ti a mis hermanos.
    Cantaré tus alabanzas cuando ellos estén reunidos».[d]

13 (C)(D) También dice:

«Pondré toda mi confianza en él».[e]

Y dice además:

«Aquí estoy, y conmigo están los hijos
    que Dios me dio».[f]

14 Los hijos de una familia son gente de carne y hueso, por eso Jesús se hizo de carne y hueso igual que ellos. Sólo así pudo morir y con su muerte derrotar al diablo, quien tenía el poder de la muerte. 15 Jesús se hizo hombre para liberar a los hombres, quienes habían estado esclavizados toda la vida por temor a la muerte. 16 Sabemos que Jesús vino a rescatar a los descendientes de Abraham, no a los ángeles. 17 Por lo tanto, era necesario que Jesús fuera igual a sus hermanos en todo sentido. Se hizo como nosotros para poder ser sumo sacerdote fiel y compasivo en su servicio a Dios. De esta manera Jesús pudo ofrecer un sacrificio que quita los pecados de la gente. 18 Jesús mismo sufrió y fue tentado, por eso puede ayudar a aquellos que son tentados.

Palabra de Dios para Todos (PDT)

© 2005, 2008, 2012, 2015 Centro Mundial de Traducción de La Biblia © 2005, 2008, 2012, 2015 Bible League International