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M’Cheyne Bible Reading Plan

The classic M'Cheyne plan--read the Old Testament, New Testament, and Psalms or Gospels every day.
Duration: 365 days
Reina-Valera 1995 (RVR1995)
Version
Levítico 16

El día de la expiación

16 Habló Jehová a Moisés después de la muerte de los dos hijos de Aarón, que murieron cuando se acercaron a la presencia de Jehová. Y Jehová dijo a Moisés: «Di a Aarón, tu hermano, que no entre en todo tiempo en el santuario detrás del velo, delante del propiciatorio que está sobre el Arca, para que no muera, pues yo apareceré en la nube sobre el propiciatorio. Aarón entrará en el santuario con esto: un becerro para la expiación y un carnero para el holocausto. Se vestirá con la túnica santa de lino, se pondrá los calzoncillos de lino, se ceñirá el cinto de lino y con la mitra de lino se cubrirá. Éstas son las santas vestiduras; con ellas se ha de vestir después de lavar su cuerpo con agua.

»De la congregación de los hijos de Israel tomará dos machos cabríos para la expiación y un carnero para el holocausto. Aarón hará traer su becerro de la expiación, y hará la reconciliación por sí y por su casa. Después tomará los dos machos cabríos y los presentará delante de Jehová, a la puerta del Tabernáculo de reunión. Luego echará suertes Aarón sobre los dos machos cabríos, una suerte por Jehová y otra suerte por Azazel. Y hará traer Aarón el macho cabrío sobre el cual caiga la suerte por Jehová, y lo ofrecerá como expiación. 10 Pero el macho cabrío sobre el cual caiga la suerte por Azazel, lo presentará vivo delante de Jehová para hacer la reconciliación sobre él y enviarlo al desierto para Azazel.

11 »Hará traer Aarón el becerro destinado a su propia expiación, hará la reconciliación por sí y por su casa, y lo degollará como sacrificio de expiación. 12 Después tomará un incensario lleno de brasas de fuego del altar que está delante de Jehová, y dos puñados del perfume aromático molido, y lo llevará detrás del velo. 13 Pondrá el perfume sobre el fuego delante de Jehová, y la nube del perfume cubrirá el propiciatorio que está sobre el Testimonio, para que no muera. 14 Tomará luego de la sangre del becerro y la rociará con su dedo en el lado oriental del propiciatorio, y delante del propiciatorio esparcirá con su dedo siete veces de aquella sangre. 15 Después degollará el macho cabrío como expiación por el pecado del pueblo, llevará la sangre detrás del velo adentro y hará con su sangre como hizo con la sangre del becerro: la esparcirá sobre el propiciatorio y delante del propiciatorio. 16 Así purificará el santuario, a causa de las impurezas de los hijos de Israel, de sus rebeliones y de todos sus pecados. De la misma manera hará también con el Tabernáculo de reunión, que está entre ellos en medio de sus impurezas.

17 »Ningún hombre estará en el Tabernáculo de reunión cuando él entre a hacer la expiación en el santuario, hasta que él salga. Cuando haya hecho expiación por sí mismo, por su casa y por toda la comunidad de Israel 18 saldrá hacia el altar que está delante de Jehová, y lo expiará: tomará de la sangre del becerro y de la sangre del macho cabrío, y la pondrá sobre los cuernos alrededor del altar. 19 Esparcirá sobre él de la sangre con su dedo siete veces. Así lo limpiará y lo santificará de las impurezas de los hijos de Israel.

20 »Cuando haya acabado de expiar el santuario, el Tabernáculo de reunión y el altar, hará traer el macho cabrío vivo. 21 Pondrá Aarón sus dos manos sobre la cabeza del macho cabrío vivo y confesará sobre él todas las iniquidades de los hijos de Israel, todas sus rebeliones y todos sus pecados. Así los pondrá sobre la cabeza del macho cabrío, y lo enviará al desierto por medio de un hombre destinado para esto. 22 Aquel macho cabrío llevará sobre sí todas sus iniquidades a tierra inhabitada; y dejará ir el macho cabrío por el desierto. 23 Después vendrá Aarón al Tabernáculo de reunión y se quitará las vestiduras de lino que había vestido para entrar en el santuario, y las pondrá allí. 24 Lavará luego su cuerpo con agua allí mismo en el santuario y, después de ponerse sus vestidos, saldrá a ofrecer su holocausto y el holocausto del pueblo; hará la expiación por sí mismo y por el pueblo, 25 y quemará en el altar la grasa del sacrificio por el pecado. 26 El que haya llevado el macho cabrío a Azazel, lavará sus vestidos, lavará también con agua su cuerpo y después entrará en el campamento.

27 »Después sacarán fuera del campamento el becerro y el macho cabrío inmolados por el pecado, cuya sangre fue llevada al santuario para hacer la expiación, y quemarán en el fuego su piel, su carne y su estiércol. 28 El que los queme lavará sus vestidos y lavará también su cuerpo con agua, y después podrá entrar en el campamento.

29 »Esto tendréis por estatuto perpetuo: En el mes séptimo, a los diez días del mes, afligiréis vuestras almas, y ninguna obra haréis, ni el natural ni el extranjero que habita entre vosotros, 30 porque en este día se hará expiación por vosotros, y seréis limpios de todos vuestros pecados delante de Jehová. 31 Día de reposo es para vosotros, y afligiréis vuestras almas. Es un estatuto perpetuo. 32 Hará la expiación el sacerdote que sea ungido y consagrado para ser sacerdote en lugar de su padre; se vestirá con las vestiduras de lino, las vestiduras sagradas, 33 y hará la expiación por el santuario santo y el Tabernáculo de reunión; también hará expiación por el altar, por los sacerdotes y por todo el pueblo de la congregación.

34 »Esto tendréis como estatuto perpetuo, para hacer expiación una vez al año por todos los pecados de Israel.»

Y Moisés lo hizo como Jehová le mandó.

Salmos 19

Las obras y la palabra de Dios

Al músico principal. Salmo de David

19 Los cielos cuentan la gloria de Dios
y el firmamento anuncia la obra de sus manos.
Un día emite palabra a otro día
y una noche a otra noche declara sabiduría.
No hay lenguaje ni palabras
ni es oída su voz.
Por toda la tierra salió su voz
y hasta el extremo del mundo sus palabras.

En ellos puso tabernáculo para el sol;
y éste, como esposo que sale de su alcoba,
se alegra cual gigante para correr el camino.
De un extremo de los cielos es su salida
y su curso hasta el término de ellos.
Nada hay que se esconda de su calor.

La ley de Jehová es perfecta:
convierte el alma;
el testimonio de Jehová es fiel:
hace sabio al sencillo.
Los mandamientos de Jehová son rectos:
alegran el corazón;
el precepto de Jehová es puro:
alumbra los ojos.
El temor de Jehová es limpio:
permanece para siempre;
los juicios de Jehová son verdad:
todos justos.
10 Deseables son más que el oro,
más que mucho oro refinado;
y dulces más que la miel,
la que destila del panal.
11 Tu siervo es, además, amonestado con ellos;
en guardarlos hay gran recompensa.

12 ¿Quién puede discernir sus propios errores?
Líbrame de los que me son ocultos.
13 Preserva también a tu siervo de las soberbias,
que no se enseñoreen de mí.
Entonces seré íntegro
y estaré libre de gran rebelión.

14 ¡Sean gratos los dichos de mi boca
y la meditación de mi corazón delante de ti,
Jehová, roca mía y redentor mío!

Proverbios 30

30 Palabras de Agur hijo de Jaqué. La profecía que dijo el varón a Itiel, a Itiel y a Ucal.

Ciertamente yo soy más rudo que nadie:
no tengo entendimiento humano.
No aprendí sabiduría
ni conozco la ciencia del Santo.
¿Quién subió al cielo y descendió?
¿Quién encerró los vientos en sus puños?
¿Quién recogió las aguas en un paño?
¿Quién afirmó todos los confines de la tierra?
¿Cuál es su nombre y, si lo sabes, el nombre de su hijo?

Toda palabra de Dios es limpia;
él es escudo para los que en él esperan.
No añadas a sus palabras, para que no te reprenda
y seas hallado mentiroso.

Dos cosas te he pedido,
no me las niegues antes que muera:
Vanidad y mentira aparta de mí,
y no me des pobreza ni riquezas,
sino susténtame con el pan necesario,
no sea que, una vez saciado, te niegue y diga: «¿Quién es Jehová?»,
o que, siendo pobre, robe
y blasfeme contra el nombre de mi Dios.

10 No acuses al siervo ante su señor,
no sea que te maldiga y lleves el castigo.

11 Hay generación que maldice a su padre
y que a su madre no bendice.
12 Hay generación limpia en su propia opinión,
si bien no se ha limpiado de su inmundicia.
13 Hay generación de ojos altivos
y párpados altaneros.
14 Hay generación cuyos dientes son espadas y cuyas muelas son cuchillos,
para devorar de entre los hombres a los pobres de la tierra y a los menesterosos.

15 La sanguijuela tiene dos hijas que dicen: «¡Dame! ¡dame!»
Tres cosas hay que nunca están hartas,
y aun la cuarta nunca dice: «¡Basta!»:
16 el seol, la matriz estéril,
la tierra, que no se sacia de agua,
y el fuego, que jamás dice: «¡Basta!»

17 El ojo que se burla de su padre
y menosprecia la enseñanza de la madre,
sáquenlo los cuervos de la cañada
y devórenlo las crías del águila.
18 Tres cosas me son ocultas,
y una cuarta tampoco conozco:
19 el rastro del águila en el aire,
el rastro de la culebra sobre la peña,
el rastro de la nave en medio del mar
y el rastro del hombre en la muchacha.

20 La mujer adúltera procede así:
come, se limpia la boca
y dice: «No he hecho ningún mal.»

21 Por tres cosas tiembla la tierra,
y por una cuarta que no puede sufrir:
22 por el siervo llegado a rey,
por el necio saciado de pan,
23 por la mujer aborrecida, cuando se casa,
y por la sierva cuando hereda a su señora.

24 Cuatro de las cosas más pequeñas de la tierra
son más sabias que los sabios:
25 las hormigas, pueblo que no es fuerte,
pero en verano preparan su comida;
26 los conejos, pueblo que no es vigoroso,
pero hacen su casa en la piedra;
27 las langostas, que no tienen rey,
pero salen todas por cuadrillas;
28 la araña, que la atrapas con la mano,
pero está en los palacios reales.

29 Tres cosas hay de hermoso andar,
y una cuarta que pasea con elegancia:
30 El león, fuerte entre todos los animales,
que no retrocede ante nada;
31 el gallo altivo, y también el macho cabrío,
y el rey, a quien nadie resiste.

32 Si neciamente te has enaltecido
y te has propuesto hacer mal,
ponte la mano sobre la boca.
33 Ciertamente el que bate la leche saca mantequilla,
el que con fuerza se suena la nariz saca sangre
y el que provoca la ira causa contienda.

1 Timoteo 1

Salutación

Pablo, apóstol de Jesucristo por mandato de Dios nuestro Salvador, y del Señor Jesucristo nuestra esperanza, a Timoteo, verdadero hijo en la fe: Gracia, misericordia y paz, de Dios nuestro Padre y de Cristo Jesús, nuestro Señor.

Advertencia contra falsas doctrinas

Como te rogué que te quedaras en Éfeso cuando fui a Macedonia, para que mandaras a algunos que no enseñen diferente doctrina ni presten atención a fábulas y genealogías interminables (que acarrean discusiones más bien que edificación de Dios, que es por fe), así te encargo ahora.

El propósito de este mandamiento es el amor nacido de corazón limpio, de buena conciencia y fe no fingida. Algunos, desviándose de esto, se perdieron en vana palabrería. Pretenden ser doctores de la Ley, cuando no entienden ni lo que hablan ni lo que afirman.

Pero sabemos que la Ley es buena, si uno la usa legítimamente, conociendo esto: que la Ley no fue dada para el justo, sino para los transgresores y desobedientes, para los impíos y pecadores, para los irreverentes y profanos, para los parricidas y matricidas, para los homicidas, 10 para los fornicarios, para los sodomitas, para los secuestradores, para los mentirosos y perjuros, y para cuanto se oponga a la sana doctrina, 11 según el glorioso evangelio del Dios bienaventurado, que a mí me ha sido encomendado.

El ministerio de Pablo

12 Doy gracias al que me fortaleció, a Cristo Jesús, nuestro Señor, porque, teniéndome por fiel, me puso en el ministerio, 13 habiendo yo sido antes blasfemo, perseguidor e injuriador; pero fui recibido a misericordia porque lo hice por ignorancia, en incredulidad. 14 Y la gracia de nuestro Señor fue más abundante con la fe y el amor que es en Cristo Jesús.

15 Palabra fiel y digna de ser recibida por todos: que Cristo Jesús vino al mundo para salvar a los pecadores, de los cuales yo soy el primero. 16 Pero por esto fui recibido a misericordia, para que Jesucristo mostrara en mí el primero toda su clemencia, para ejemplo de los que habrían de creer en él para vida eterna. 17 Por tanto, al Rey de los siglos, inmortal, invisible, al único y sabio Dios, sea honor y gloria por los siglos de los siglos. Amén.

18 Este mandamiento, hijo Timoteo, te encargo, para que, conforme a las profecías que se hicieron antes en cuanto a ti, milites por ellas la buena milicia, 19 manteniendo la fe y buena conciencia. Por desecharla, algunos naufragaron en cuanto a la fe. 20 Entre ellos están Himeneo y Alejandro, a quienes entregué a Satanás para que aprendan a no blasfemar.

Reina-Valera 1995 (RVR1995)

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