Print Page Options
Previous Prev Day Next DayNext

Chronological

Read the Bible in the chronological order in which its stories and events occurred.
Duration: 365 days
Palabra de Dios para Todos (PDT)
Version
Hechos 20:1-3

Pablo va a Macedonia y a Grecia

20 Terminado el alboroto, Pablo llamó a los seguidores del Señor y después de animarlos, se despidió de ellos. Se fue a la región de Macedonia y por el camino animaba a los creyentes. Después pasó a Grecia, donde se quedó tres meses. Estaba listo para ir en barco a Siria, pero como algunos judíos planeaban algo en su contra, decidió regresar por Macedonia.

Romanos 1-3

Esta carta la escribo yo, Pablo, siervo de Jesucristo, quien me designó para ser apóstol. Me designó para anunciar a todos las buenas noticias de Dios.

Las buenas noticias fueron prometidas hace mucho tiempo, por medio de los profetas en las Sagradas Escrituras. Las buenas noticias anuncian la venida del Hijo, nuestro Señor Jesucristo. Como ser humano, nació de la familia de David. Mas cuando fue resucitado de entre los muertos por el Espíritu Santo[a], se le dio plena autoridad para reinar como Hijo de Dios.

Por medio de Cristo, Dios me dio el privilegio de ser apóstol para que la gente de todas las naciones crea y obedezca; hago este trabajo para honrar a Cristo. A ustedes también Dios los ha llamado para pertenecer a Jesucristo.

Esta carta la escribo para toda la gente de Roma que Dios ama y ha llamado para ser su pueblo santo.

Que la paz y el generoso amor de Dios Padre y de nuestro Señor Jesucristo estén siempre con ustedes.

Oración de agradecimiento

Ante todo, le doy gracias a Dios por todos ustedes por medio de Jesucristo. Todo el mundo habla de la fe que ustedes tienen. Dios sabe que siempre los tengo presentes en mis oraciones. Le sirvo a él de todo corazón anunciando las buenas noticias sobre su Hijo. 10 Siempre le pido que pueda ir a verlos y esto será posible si Dios lo quiere. 11 Quiero verlos para poder darles un don espiritual que les ayudará a ser fuertes. 12 Mejor dicho, espero poder estar con ustedes para que juntos podamos apoyarnos con la fe que tenemos. Su fe me ayudará a mí y mi fe los ayudará a ustedes.

13 Hermanos, quiero que sepan que me he propuesto muchas veces ir a visitarlos, pero siempre se me ha presentado algo que me ha hecho cambiar de planes. He querido ir a visitarlos para conseguir de ustedes los mismos buenos frutos que he obtenido en mi trabajo con otros que no son judíos.

14 Tengo que servir a todos: a los cultos e incultos,[b] a los sabios y a los ignorantes. 15 De ahí mi gran deseo de ir a anunciarles las buenas noticias también a ustedes que están en Roma.

16 Pues no siento vergüenza de la buena noticia acerca de Cristo porque es el poder que Dios usa para salvar a todos los que creen en él. Se anunció primero a los judíos, pero ahora también se anuncia a los que no son judíos[c]. 17 (A)La buena noticia acerca de Cristo revela el plan de Dios para traer justicia al mundo entero.[d] Se está extendiendo de los que creen a los que van a creer,[e] como está escrito: «El aprobado por Dios,[f] por la fe vivirá».[g]

Toda la humanidad ha obrado mal

18 ¡Pues lo que se conoce Dios está revelando desde el cielo es su ira! Está en contra de los que se rebelan contra él y cometen injusticias contra otros. Ellos conocen la verdad pero la ocultan con la maldad que practican. 19 Lo que se conoce sobre Dios, ellos lo saben muy bien porque Dios mismo se lo ha mostrado. 20 Porque lo que de Dios es invisible, o sea su poder eterno y todo aquello que lo hace ser Dios, se ha hecho claramente visible desde la creación del mundo. El ser humano ha podido entender todo eso con facilidad al observar la creación de Dios. Así que la humanidad no tiene excusa alguna para hacer todo el mal que hace. 21 Aunque los seres humanos conocían a Dios, no lo respetaron como él merece ni le dieron gracias. Terminaron pensando bobadas y se cerraron al entendimiento. 22 Se creían sabios, pero sólo eran unos tontos, 23 y cambiaron la grandeza del Dios inmortal para adorar ídolos, hechos con forma de simples hombres mortales, aves, cuadrúpedos y serpientes.

24 La gente estaba llena de pecado y quería hacer solamente el mal, por eso Dios permitió que fueran esclavizados por los pecados sexuales que cometían y deshonraron su cuerpo unos con otros. 25 Cambiaron al verdadero Dios por uno de mentira. Adoraron y sirvieron a la creación en lugar de adorar y servir a Dios, el Creador, a quien sea la honra para siempre. Así sea.

26 Por eso Dios los dejó seguir sus pasiones vergonzosas. Sus mujeres dejaron de tener relaciones sexuales con los hombres, que es lo natural, y empezaron a tener relaciones sexuales con otras mujeres. 27 De la misma forma, los hombres dejaron de tener relaciones sexuales con las mujeres, que es lo natural, y empezaron a desearse entre ellos. Los hombres hicieron cosas vergonzosas con otros hombres, y recibieron en sí mismos el pago merecido por su desviación.

28 Ya que la gente creyó que no era importante conocer a Dios, él los dejó que siguieran pervirtiendo su mente y terminaron haciendo lo que no deben. 29 Esta gente se mantiene haciendo toda clase de injusticia, corrupción, codicia y maldad. Viven llenos de envidia, asesinatos, peleas y fraudes. Siempre están pensando mal de los demás. Son unos chismosos; 30 hablan mal de los demás. Odian a Dios, son insolentes, orgullosos, vanidosos, no obedecen a sus padres e inventan maldades. 31 Son insensatos, no cumplen sus promesas, son insensibles y no tienen piedad de nadie. 32 Aunque saben que la ley de Dios dice que quienes hacen esto merecen morir, no les importa y siguen haciéndolo. Además afirman que están en lo correcto los que hacen todo eso.

Dios hace bien al juzgar

Bueno pues, tú criticas a esa gente, pero sin razón. Cuando los condenas, te condenas a ti mismo, porque tú también haces lo que ellos hacen. Tú dices: «Ya se sabe que Dios juzga a los que hacen maldades ¡y que hace bien al juzgarlos!» Tú que juzgas a los que hacen esas cosas y haces lo mismo, ¿cómo crees que escaparás del juicio de Dios? Tienes que entender que Dios ha sido muy paciente y bondadoso contigo, esperando que cambies. Pero tú piensas que su paciencia nunca termina y no te das cuenta de que él es bueno contigo para que cambies tu vida.

Pero eres terco y no quieres cambiar, así que sigues acumulando la ira de Dios. El castigo te llegará el día en que Dios muestre toda su ira. Ese mismo día, claro que Dios mostrará que juzga correctamente y con justicia. (B)«Dios pagará a cada uno según lo que haya hecho».[h] Hay algunos que son constantes en hacer el bien. Buscan de Dios la grandeza, el honor y una vida que no puede ser destruida. A ellos Dios les dará vida eterna. Hay otros que son egoístas, se niegan a seguir la verdad y han decidido seguir la injusticia. Dios los castigará con toda su ira. Castigará con grandes sufrimientos a todos y cada uno de los que hacen lo malo, tanto a los judíos como a los que no son judíos. 10 Por el contrario, a todos los que hacen el bien Dios les dará grandeza, honor y paz, sean judíos o no. 11 Dios juzga a todos por igual y sin favoritismos.

12 Los que conocen la ley y los que no saben nada de ella son iguales cuando cometen pecados. Los que no conocen la ley y cometen pecados se condenarán. De la misma manera, los que conocen la ley y cometen pecados serán juzgados por la ley. 13 Dios dará su aprobación a los que obedecen su ley, no a los que sólo la escuchan. 14 Los que no son judíos no conocen la ley, pero cuando ellos por instinto hacen lo que ordena la ley, aun sin conocerla, entonces ellos son su propia ley. 15 Demuestran que en su mente está escrito lo que está bien y lo que está mal, así como dice la ley, y su conciencia les sirve de testigo. Sus razonamientos los condenan o los defienden porque cuando hacen lo malo tienen remordimientos y cuando hacen el bien saben que hacen bien y no se sienten culpables. 16 Todo esto sucederá el día en que Dios juzgue todos los secretos de la gente conforme dice la buena noticia de salvación que les anuncio, que Dios va a juzgar a la gente por medio de Jesucristo.

Los judíos y la ley

17 ¿Pero qué pasa contigo? Dices que eres judío, que confías en la ley y te sientes orgulloso de tu Dios. 18 Sabes lo que Dios quiere que hagas y también sabes distinguir lo que es realmente importante de lo que no lo es, porque has recibido instrucción religiosa de la ley. 19 Estás convencido de que eres como el guía para un ciego, o la luz para los que están en la oscuridad. 20 Crees que eres el instructor de los ignorantes y el maestro de los principiantes. Tienes la ley y por eso piensas que tienes toda la verdad y lo sabes todo. 21 Entonces, ¿por qué en lugar de enseñar a otros no te enseñas a ti mismo? Tú le dices a la gente que robar no está bien, pero robas. 22 Dices que no se debe cometer adulterio, pero cometes ese pecado. Dices que detestas a los ídolos, pero entras a los templos a robarte esos ídolos. 23 Te sientes muy orgulloso de decir que conoces la ley de Dios, pero deshonras a Dios cuando no la cumples. 24 (C)Por eso está escrito: «Los que no son judíos insultan a Dios por culpa de ustedes».[i]

25 Si tú cumples la ley, entonces la circuncisión tiene sentido, pero si no cumples con la ley es como si no estuvieras circuncidado. 26 Los que no son judíos no están circuncidados, pero si obedecen la ley, entonces es como si estuvieran circuncidados. 27 Ustedes los judíos tienen la ley escrita y la circuncisión, pero no obedecen la ley. Así que cuando los que en el cuerpo no están circuncidados obedecen la ley, están demostrando que ustedes son culpables.

28 Uno no es judío por tener una marca exterior en el cuerpo porque la verdadera circuncisión no es la del exterior del cuerpo. 29 Uno es verdaderamente judío cuando lo es en su interior. La verdadera circuncisión está en el corazón y se hace por el Espíritu, y no por lo que está escrito. El que tiene la circuncisión de corazón, por el Espíritu recibe la aprobación de Dios y no la de los demás.

Tal vez tú me dirás: «Entonces, ¿cuáles son las ventajas de ser judío?»

Ciertamente los judíos tienen muchos beneficios. El más importante es que Dios les dio el encargo de compartir sus promesas. Es verdad que algunos judíos no fueron fieles pues no hicieron lo que Dios quería, pero ¿su infidelidad impedirá que Dios sea fiel en hacer lo que prometió?

(D)¡De ninguna manera! Aunque todo el mundo falle en cumplir, Dios siempre cumple lo que promete. Así está escrito:

«Para que, por medio de tus palabras,
    se demuestre que tú eres justo
    y vencerás cuando te juzguen».[j]

Cuando hacemos lo que es injusto, demostramos lo justo que es Dios. ¿Será posible entonces decir que Dios es injusto cuando nos castiga? (Estoy hablando según la lógica humana). ¡Claro que no! Si Dios fuera injusto, no tendría derecho de juzgar al mundo.

Sería lo mismo decir: «Si comparados con la fidelidad de Dios mis engaños resultan en honra para Dios, entonces ¿por qué me condena como pecador?» También sería como decir: «Hagamos el mal para que venga el bien». Muchos nos critican y dicen que eso es lo que nosotros enseñamos, lo cual es falso. Con razón Dios los condenará.

«¿Estamos entonces en peores condiciones que los demás?» ¡Claro que no! Ya dijimos que tanto los judíos como los que no son judíos tienen tendencia al pecado.[k]

Todos son culpables

10 Pues como está escrito:

«No hay justo, ¡ni uno solo!
11 No hay quien tenga entendimiento.
    No hay quien de verdad quiera conocer a Dios.
12 (E)Todos han abandonado a Dios.
    Todos se hicieron inútiles.
No hay nadie que haga el bien.
    ¡Ni uno solo![l]
13 (F)(G) Su boca es un sepulcro abierto;
    usan la lengua para engañar.[m]
Lo que dicen es como el veneno de una serpiente.[n]
14     (H)Su boca está llena de maldición y amargura.[o]
15 Están siempre listos para herir o matar;
16     dondequiera que van causan destrucción y tristeza.
17 (I)No conocen el camino que lleva a la paz.[p]
18     (J)No les pasa por la mente tener respeto o temor de Dios».[q]

19 Ahora sabemos que lo que dice la ley es para los que tienen la ley. Se acabaron las excusas, todo el mundo está bajo el juicio de Dios 20 porque nadie consigue ser aprobado por actos de obediencia a una ley. La ley sólo nos muestra nuestro pecado.

Dios nos aprueba por medio de la fe

21 Pero ahora Dios nos muestra lo que anunciaban la ley y los profetas: la manera en que Dios nos aprueba no tiene nada que ver con la ley,[r] 22 sino que tiene que ver con la fe en Jesucristo.[s] Dios aprueba a todo el que tiene fe en Jesucristo, no importa quién sea. 23 Todos pecaron y por eso no pueden participar de la gloria de Dios. 24 Dios, por su generoso amor, aprueba a todos gratuitamente. Es un regalo de Dios hecho posible porque Jesucristo hizo lo necesario para liberarnos del pecado. 25-26 Dios ofreció a Jesucristo para hacer posible, por medio de su muerte, el perdón de los pecados. El perdón se recibe a través de la fe. Él ofreció a Jesucristo como sacrificio para demostrar que él siempre es justo en lo que hace. Lo demostró en el pasado cuando en su paciencia pasó por alto los pecados de muchos, y también ahora al aprobar a todo aquel que confía en Jesús.

27 Entonces, ¿Hay alguna razón para estar orgullosos de nosotros mismos? ¡No la hay! ¿Por qué razón? Por razón de fe y no por cumplir la ley. 28 Por eso decimos que uno es aprobado por la fe y no por cumplir la ley. 29 ¿Acaso Dios es sólo Dios de los judíos? ¿No lo es también de los que no son judíos? ¡Claro que sí! 30 Hay un solo Dios y él aprobará a los judíos[t] por la fe, pero también por la fe aprobará a los que no son judíos.[u] 31 Entonces, ¿con la fe eliminamos la ley? ¡De ninguna manera! Por el contrario, confirmamos lo que la ley enseña.

Palabra de Dios para Todos (PDT)

© 2005, 2008, 2012, 2015 Centro Mundial de Traducción de La Biblia © 2005, 2008, 2012, 2015 Bible League International