Chronological
Jesús y los niños
15 (A)Y le traían aun a los niños muy pequeños para que los tocara, pero al ver esto los discípulos, los reprendían. 16 Mas Jesús, llamándolos a su lado, dijo: Dejad que los niños vengan a mí, y no se lo impidáis, porque de los que son como estos[a] es el reino de Dios. 17 En verdad os digo: el que no recibe el reino de Dios como un niño, no entrará en él(B).
El joven rico
18 (C)Y cierto hombre prominente[b] le preguntó, diciendo: Maestro bueno, ¿qué haré para heredar la vida eterna? 19 Jesús le respondió: ¿Por qué me llamas bueno? Nadie es bueno, sino solo uno, Dios. 20 Tú sabes los mandamientos: «No cometas adulterio, No mates, No hurtes, No des falso testimonio, Honra a tu padre y a tu madre(D)». 21 Y él dijo: Todo esto lo he guardado desde mi juventud. 22 Cuando Jesús oyó esto, le dijo: Te falta todavía una cosa; vende todo lo que tienes y reparte entre los pobres, y tendrás tesoro en los cielos(E); y ven, sígueme(F). 23 Pero al oír esto, se puso muy triste, pues era sumamente rico. 24 Mirándolo Jesús, dijo: ¡Qué difícil es que entren en el reino de Dios los que tienen riquezas(G)! 25 Porque es más fácil que un camello pase[c] por el ojo de una aguja, que el que un rico entre en el reino de Dios(H). 26 Los que oyeron esto, dijeron: ¿Y quién podrá salvarse? 27 Y Él respondió: Lo imposible para los hombres, es posible para Dios(I). 28 Y Pedro dijo: He aquí, nosotros lo hemos dejado todo[d] y te hemos seguido(J). 29 Entonces Él les dijo: En verdad os digo: no hay nadie que haya dejado casa, o mujer, o hermanos, o padres o hijos por la causa del reino de Dios(K), 30 que no reciba muchas veces más en este tiempo, y en el siglo venidero(L), la vida eterna.
Jesús anuncia su muerte por tercera vez
31 (M)Tomando aparte a los doce, Jesús les dijo: Mirad, subimos a Jerusalén(N), y se cumplirán todas las cosas que están escritas por medio de los profetas acerca del Hijo del Hombre(O). 32 Pues será entregado a los gentiles, y será objeto de burla, afrentado y escupido(P); 33 y después de azotarle, le matarán, y al tercer día resucitará. 34 Pero ellos no comprendieron nada de esto; este dicho les estaba encubierto(Q), y no entendían lo que se les decía.
Curación de un ciego
35 (R)Y aconteció que al acercarse a Jericó, un ciego estaba sentado junto al camino mendigando(S). 36 Al oír que pasaba una multitud, preguntaba qué era aquello. 37 Y le informaron que pasaba Jesús de Nazaret. 38 Entonces gritó, diciendo: ¡Jesús, Hijo de David, ten misericordia de mí(T)! 39 Y los que iban delante lo reprendían para que se callara; pero él gritaba mucho más: ¡Hijo de David, ten misericordia de mí(U)! 40 Jesús se detuvo y[e] ordenó que se lo trajeran; y cuando estuvo cerca, le preguntó: 41 ¿Qué deseas que haga por ti? Y él dijo: Señor, que recobre la vista. 42 Jesús entonces le dijo: Recibe[f] la vista, tu fe te ha sanado[g](V). 43 Y al instante recobró la vista, y le seguía glorificando a Dios(W); cuando toda la gente vio aquello, dieron gloria a Dios(X).
Zaqueo
19 Habiendo entrado Jesús en Jericó, pasaba por la ciudad(Y). 2 Y[h] un hombre llamado[i] Zaqueo, que era jefe de los recaudadores de impuestos[j] y era rico, 3 trataba de ver quién era Jesús; pero no podía a causa de la multitud, ya que él era de pequeña estatura. 4 Y corriendo delante, se subió a un sicómoro para verle(Z), porque Jesús estaba a punto de pasar por allí. 5 Cuando Jesús llegó al lugar, miró hacia arriba y le dijo: Zaqueo, date prisa y desciende, porque hoy debo quedarme en tu casa. 6 Entonces él se apresuró a descender y le recibió con gozo[k]. 7 Y al ver esto, todos murmuraban, diciendo: Ha ido a hospedarse con[l] un hombre pecador. 8 Y Zaqueo, puesto en pie, dijo al Señor(AA): He aquí, Señor, la mitad de mis bienes daré a los pobres, y si en algo he defraudado(AB) a alguno, se lo restituiré cuadruplicado(AC). 9 Y Jesús le dijo: Hoy ha venido la salvación a esta casa, ya que él también es hijo de Abraham(AD); 10 porque el Hijo del Hombre ha venido a buscar y a salvar lo que se había perdido(AE).
Parábola de las minas
11 Estando ellos oyendo estas cosas, continuando Jesús, dijo una parábola, porque Él estaba cerca de Jerusalén(AF) y ellos pensaban que el reino de Dios iba a aparecer(AG) de un momento a otro. 12 Por eso dijo: (AH)Cierto hombre de familia noble fue a un país lejano a recibir un reino para sí y después volver. 13 Y llamando a diez de sus siervos, les dio diez minas[m] y les dijo: «Negociad con esto hasta que yo regrese[n]». 14 Pero sus ciudadanos lo odiaban, y enviaron una delegación tras él, diciendo: «No queremos que este reine sobre nosotros». 15 Y sucedió que al regresar él, después de haber recibido el reino, mandó llamar a su presencia a aquellos siervos a los cuales había dado el dinero, para saber lo que habían ganado negociando[o]. 16 Y se presentó el primero, diciendo: «Señor, tu mina ha producido diez minas más». 17 Y él le dijo: «Bien hecho, buen siervo, puesto que has sido fiel en lo muy poco(AI), ten autoridad sobre diez ciudades». 18 Entonces vino el segundo, diciendo: «Tu mina, señor, ha producido cinco minas». 19 Y dijo también a este: «Y tú vas a estar[p] sobre cinco ciudades». 20 Y vino otro, diciendo: «Señor, aquí está tu mina, que he tenido guardada en un pañuelo; 21 pues te tenía miedo, porque eres un hombre exigente, que recoges lo que no depositaste y siegas lo que no sembraste». 22 Él le contestó*: «Siervo inútil[q], por tus propias palabras[r] te voy a juzgar. ¿Sabías que yo soy un hombre exigente, que recojo lo que no deposité y siego lo que no sembré? 23 Entonces, ¿por qué no pusiste mi dinero en el banco, y al volver yo, lo hubiera recibido con los intereses?». 24 Y dijo a los que estaban presentes: «Quitadle la mina y dádsela al que tiene las diez minas». 25 Y ellos le dijeron: «Señor, él ya tiene diez minas». 26 Os digo, que a cualquiera que tiene, más le será dado, pero al que no tiene, aun lo que tiene se le quitará(AJ). 27 Pero a estos mis enemigos, que no querían que reinara sobre ellos(AK), traedlos acá y matadlos delante de mí(AL).
La entrada triunfal
28 Habiendo dicho esto, iba delante, subiendo hacia Jerusalén(AM).
29 Y aconteció que (AN)cuando se acercó a Betfagé y a Betania(AO), cerca del monte que se llama de los Olivos[s](AP), envió a dos de los discípulos, 30 diciendo: Id a la aldea que está enfrente, en la cual, al entrar, encontraréis un pollino atado sobre el cual nunca se ha montado nadie[t]; desatadlo y traedlo. 31 Y si alguien os pregunta: «¿Por qué lo desatáis?», de esta manera hablaréis: «Porque el Señor lo necesita». 32 Entonces los enviados fueron y lo encontraron como Él les había dicho. 33 Mientras desataban el pollino, sus dueños[u] les dijeron: ¿Por qué desatáis el pollino? 34 Y ellos respondieron: Porque el Señor lo necesita. 35 Y lo trajeron a Jesús, (AQ)y echando sus mantos sobre el pollino, pusieron a Jesús sobre él. 36 Y mientras Él iba avanzando, tendían sus mantos por el camino. 37 Cuando ya se acercaba, junto a la bajada del monte de los Olivos(AR), toda la multitud de los discípulos, regocijándose, comenzó a alabar a Dios(AS) a gran voz por todas las maravillas[v] que habían visto, 38 diciendo:
¡Bendito(AT) el Rey que viene en el nombre del Señor(AU)!
¡Paz en el cielo y gloria en las alturas(AV)!
39 Entonces algunos de los fariseos de entre la multitud le dijeron(AW): Maestro, reprende a tus discípulos. 40 Respondiendo Él, dijo: Os digo que si estos callan, las piedras clamarán(AX).
Jesús llora sobre Jerusalén
41 Cuando se acercó, al ver la ciudad, lloró sobre ella(AY), 42 diciendo: ¡Si tú también hubieras sabido en este día lo que conduce a la paz! Pero ahora está oculto a tus ojos. 43 Porque sobre ti vendrán días, cuando[w] tus enemigos echarán terraplén delante de ti(AZ), te sitiarán y te acosarán por todas partes(BA). 44 Y te derribarán a tierra, y a tus hijos dentro de ti, y no dejarán en ti piedra sobre piedra(BB), porque no conociste el tiempo de tu visitación(BC).
Jesús echa a los mercaderes del templo
45 (BD)Y entrando en el templo, comenzó a echar fuera a los que vendían, 46 diciéndoles: Escrito está: «Y mi casa será casa de oración(BE)», pero vosotros la habéis hecho cueva de ladrones(BF).
Jesús enseña en el templo
47 Y enseñaba diariamente en el templo(BG), pero los principales sacerdotes, los escribas y los más prominentes del pueblo procuraban matarle(BH); 48 y no encontraban la manera de hacerlo[x], porque todo el pueblo estaba pendiente de Él, escuchándole.
Copyright © 1986, 1995, 1997 by The Lockman Foundation