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Bible in 90 Days

An intensive Bible reading plan that walks through the entire Bible in 90 days.
Duration: 88 days
Palabra de Dios para Todos (PDT)
Version
Ezequiel 23:40-35:15

40 »Cuando los hombres vinieron a ti, te encontraron bañada, maquillada y adornada con joyas. 41 Te encontrabas en un sofá muy decorado, frente a una mesa llena de comida, junto con mi incienso y mis perfumes aromáticos. 42 Podía escucharse el ruido de una multitud. Eran los sabeos, que venían del desierto y venían a la fiesta[a] donde había gente de muchas naciones. Se les vistió con ropa de fiesta, brazaletes y preciosas coronas. 43 Luego le pregunté a la mujer desgastada por sus adulterios: ¿Seguirán tú y ellos con los adulterios? 44 Y se acostaron con ellas como quien se acuesta con una prostituta. Así fue como se acostaron con esas mujeres promiscuas llamadas Aholá y Aholibá. 45 Los hombres justos les harán juicio en su contra, las declararán culpables de adulterio y derrame de sangre inocente, porque esas mujeres eran adúlteras y sus manos estaban cubiertas de sangre».

46 Así dice el Señor DIOS: «Que se convoque a una multitud contra ellas para humillarlas y burlarse de ellas. 47 Que la multitud las apedree y las hagan pedazos con sus espadas. Que quemen a sus hijos e hijas, al igual que sus casas. 48 De esa manera, detendré la conducta vergonzosa de esta tierra y el resto de las mujeres aprenderán la lección y no cometerán las mismas inmoralidades que ustedes. 49 Recibirán el castigo que merecen por su conducta vergonzosa, y serán culpables de adorar a sus repugnantes ídolos. Así aprenderán que yo soy el Señor DIOS».

La olla y la carne

24 El día diez del mes décimo del año noveno[b], el SEÑOR me habló: «Hijo de hombre, escribe la fecha de hoy y la siguiente nota: El día de hoy el rey de Babilonia atacó a Jerusalén. Dile al pueblo rebelde que el Señor DIOS les envía la siguiente parábola:

»Coloca la olla sobre el fuego
    y ponle agua.
Agrégale pedazos de carne,
    los mejores cortes de pierna y lomo,
    y lo mejor de los huesos de la mejor oveja del rebaño.
Amontona leña debajo de ella
    para que hierva bien el agua
    y los huesos queden bien cocidos.

»Por lo tanto el Señor DIOS dice:
¡Ay de Jerusalén, ciudad sanguinaria!
    ¡Ay de esa olla oxidada cuyas manchas no se pueden quitar!
Saca todos los pedazos de carne,
    pero no se los des a nadie.
Todavía tenía sangre en ella.
    Derramaron la sangre en la piedra del altar
en vez de derramarla en el suelo
    y cubrirla con polvo,[c]
    como lo indica la ley.
Yo la coloqué sobre la piedra
    para que el polvo no la cubriera,
y así se encendiera mi ira
    e incitara a la venganza
    del derrame de sangre inocente.

»Por lo tanto, dice el Señor DIOS:
¡Ay de la ciudad sanguinaria!
    Yo mismo echaré más leña al fuego.
10 ¡Echa más leña y enciende el fuego!
    Cocina bien la carne hasta que quede bien cocida y prepara las especias.[d]
    Que se quemen bien los huesos.
11 Pon la olla vacía sobre el carbón
    para que el cobre[e] esté al rojo vivo.
Que se acaben sus impurezas
    y se consuma su óxido.

12 »Está tan oxidada que es imposible limpiarla.
    Ni el fuego la purifica.

13 »He tratado de purificarte de tu repugnante libertinaje, pero como no has querido ser pura, ya no trataré de purificarte más, hasta que mi ira te consuma. Yo, el SEÑOR, he dicho. 14 Ha llegado la hora de hacer lo que les dije. No me detendré ni pasaré por alto nada. No tendré compasión. Recibirás el castigo por tu conducta y todas tus malas acciones. Es la decisión del Señor DIOS».

Muerte de la esposa de Ezequiel

15 Luego el SEÑOR me dijo: 16 «Mira, hijo de hombre, en un abrir y cerrar de ojos te arrebataré la luz de tu vida, pero no te lamentes ni llores. Que no te salgan lágrimas. 17 Gime en silencio, como si estuvieras muerto. No guardes el luto acostumbrado. Ponte tu turbante y tus zapatos, como siempre. No te cubras con velo el bigote ni comas la comida que te traen para consolarte».

18 Mi esposa murió en la noche, y en la mañana le avisé al pueblo. A la mañana siguiente hice lo que se me había ordenado. 19 El pueblo me preguntó si le iba a decir lo que significaba todo esto. 20 Les dije: «El SEÑOR me dijo 21 que le dijera al pueblo de Israel: Mira, voy a destruir mi lugar sagrado, el orgullo de sus cantos, el templo que les da alegría, el centro de sus afectos. Sus hijos e hijas abandonados morirán a filo de espada. 22 Y ustedes harán lo mismo que yo. No cubrirán con velo su bigote ni comerán la comida que se trae para consolar a los deudos. 23 Sino que, como de costumbre, se pondrán su turbante y sus zapatos. No harán duelo ni llorarán, sino que se pudrirán de culpa gimiendo unos con otros. 24 Ezequiel les servirá de señal. Cuando eso suceda, ustedes harán todo lo que él ha hecho, y entonces aprenderán que yo soy el Señor DIOS.

25 »En cuanto a ti, hijo de hombre, el día en que les quite su fortaleza, su gozo maravilloso, el templo que les da alegría y el centro de sus afectos, y sus hijos e hijas, 26 vendrá un fugitivo a avisarte. 27 Ese mismo día se te soltará la lengua, igual que al fugitivo, y podrás hablar. Servirás de señal, y entonces aprenderán que yo soy el SEÑOR».

Profecía contra Amón

25 Entonces el SEÑOR me dijo: «Hijo de hombre, profetiza en contra de los amonitas. Diles que escuchen el mensaje del Señor DIOS. Dice el Señor DIOS: Ya que ustedes se burlaron cuando mi santuario estaba siendo profanado, el pueblo estaba siendo destruido y la gente de Judá estaba siendo llevada al exilio, yo haré herederos míos a los pueblos del oriente. Armarán las carpas militares entre ustedes y se comerán la fruta y se tomarán la leche de ustedes. Convertiré a Rabá, la ciudad de los amonitas, en un pastizal de camellos y ovejas. Así aprenderán que yo soy el SEÑOR.

»Pues el Señor DIOS dice: Ya que se divirtieron burlándose del pueblo de Israel con tanto desprecio, hasta aplaudiendo y pisando fuerte para celebrar, yo voy a extender mi mano contra ustedes y los entregaré a las naciones como despojo. Los arrancaré de las demás naciones. Los destruiré y los borraré del mapa. Así aprenderán que yo soy el SEÑOR».

Profecía contra Moab y Seír

Así dice el Señor DIOS: «Moab y Seír[f] han dicho que el pueblo de Judá sea como cualquier otra nación. Por lo tanto, voy a quitar todas las ciudades de las montañas de Moab, incluyendo las ciudades a lo largo de la frontera con Israel, desde Bet Yesimot hasta Baal Megón y Quiriatayin. 10 Los entregaré a los pueblos del oriente para que las naciones se olviden de los amonitas. 11 Dictaré sentencia contra Moab, y así aprenderán que yo soy el SEÑOR».

Profecía contra Edom

12 Así dice el Señor DIOS: «Edom se volvió contra Judá y se vengó, resultando así más grave su culpa. 13 Por lo tanto, dice el Señor DIOS, extenderé mi mano contra Edom para arrebatarle sus habitantes y sus animales y convertirlo en un desierto árido y vacío. El pueblo morirá a filo de espada desde Temán hasta Dedán. 14 Entonces me vengaré de Edom con mi pueblo Israel, quien mostrará mi ira y furor contra Edom. Así que Edom sabrá de mi venganza. El Señor DIOS lo ha dicho».

Profecía contra los filisteos

15 Así dice el Señor DIOS: «Los filisteos se vengaron, dejaron que su odio de mucho tiempo los hiciera vengarse con profundo desprecio. 16 Por eso, dice el Señor DIOS, extenderé mi mano contra los filisteos, arrebatando a los habitantes de Creta y destruyendo al resto a lo largo de la costa. 17 Me vengaré con poder contra ellos, los castigaré con mi ira, y así aprenderán que yo soy el SEÑOR».

Profecía contra Tiro

26 El primer día del mes del año undécimo[g], el SEÑOR me dijo: «Hijo de hombre, Tiro se burló de Jerusalén, diciendo:

»“Las puertas que protegen
    a los habitantes de Jerusalén
    han sido derrumbadas.
Saquearé la ciudad
    y me rodearé de su riqueza”.

»Por lo tanto, dice el Señor DIOS:
    Tiro, estoy contra ti,
y así como el mar levanta sus olas,
    haré que se levante mucha gente contra ti.
Derrumbarán las murallas que rodean Tiro
    y destruiré sus torres.
Barreré los escombros
    y dejaré a Tiro como roca desnuda.
Quedará en medio del mar
    para que los pescadores tiendan sus redes.
El Señor DIOS lo ha dicho.
    Tiro será el hazmerreír de las naciones.
Los habitantes de las poblaciones de la costa morirán a filo de espada.
    Así aprenderán que yo soy el SEÑOR.

»Porque el Señor DIOS dice:
Mira, voy a traer a Nabucodonosor,
    rey de Babilonia, desde el norte.
El rey de reyes vendrá con caballería,
    carros de combate y un gran ejército.
Los habitantes de las otras poblaciones tirias
    que viven en la costa morirán a filo de espada.
Él construirá lugares para sitiarte,
    levantará muros a tu alrededor
    y construirá rampas sobre dichos muros.
Atacará tus muros a golpes de arietes
    y derrumbará tus torres con herramientas de filo.
10 Quedarás cubierto del polvo levantado
    por el galope de los caballos y de sus carros.
Tus muros retumbarán
    cuando el Rey de Babilonia entre por tus puertas
    como quien pasa por muros rotos.
11 Tus calles temblarán con el galope de los caballos.
    Matará a filo de espada.
Derribará los monumentos
    que conmemoran tu fortaleza.
12 Saquearán tu riqueza
    y se llevarán el botín.
Destruirán tus muros
    y derribarán tus lujosas casas.
Luego echarán al agua las piedras,
    las vigas y los escombros.
13 Entonces silenciaré el sonido de tus canciones
    y no se oirá más el sonido de tus arpas.
14 Te convertiré en una roca desnuda,
    un lugar donde los pescadores tienden sus redes a secar.
No serás reconstruida.
    Es la decisión del SEÑOR.
    Así lo afirma el Señor DIOS».

15 El Señor DIOS le dice a Tiro: «Las poblaciones de la costa temblarán con el sonido de tu destrucción, con los gemidos de los que caen mientras los asesinos matan a tus habitantes dentro de tus muros. 16 Entonces todos los gobernantes del mar descenderán de su trono, se quitarán su capa y ropa elegante y se vestirán de luto. Se sentarán en el suelo y temblarán de miedo por el desastre repentino, sorprendidos de lo que te pasó. 17 Entonces cantarán el siguiente canto fúnebre sobre ti:

»¡Cómo desapareciste del mar, ciudad famosa!
    Eras una potencia del mar.
Vivías ahí aterrorizando
    a todos los que habitaban en la costa.
18 Ahora tiemblan en la costa
    porque es el día de tu destrucción,
y las islas sentirán terror
    cuando seas destruida.

19 »Porque así dice el Señor DIOS: Te convertiré en ruinas como una ciudad deshabitada cuando levante contra ti el océano y te cubra el mar profundo. 20 Te echaré con tus antepasados que ya están en la fosa. Te quedarás en las partes más bajas de la tierra como las ruinas antiguas, con los que terminan en la fosa. Así nunca recuperarás ni aparecerás en vida con tu belleza. 21 Te convertiré en algo espantoso; no existirás más. Cuando alguien te busque, jamás te volverá a encontrar. El Señor DIOS lo ha dicho».

Canto fúnebre por la ciudad de Tiro

27 El SEÑOR me dijo: «Hijo de hombre, canta un canto fúnebre a Tiro, ciudad que domina el comercio con muchos pueblos de la costa a lo largo del mar. Dile que el Señor DIOS dice:

»Tiro, tú has dicho
    que eres la más hermosa embarcación,
tus fronteras se extienden a través de los mares.
    Los que te construyeron te coronaron de belleza.
Construyeron tu cubierta con encinas del monte Hermón.
    Armaron el mástil con cedros del Líbano.
Hicieron tus remos
    con roble de Basán.
Cubrieron las paredes
    con paneles de cipreses de Chipre
    con incrustaciones de marfil.
Hicieron tus velas con lino bordado de Egipto,
    las cuales sirvieron de bandera.
Tu toldo lo hicieron con tela azul
    y roja de la costa de Elisá.
Los habitantes de Sidón y de Arvad sirvieron de remeros.
    Tus hombres expertos sirvieron de marineros.
Hombres expertos de Biblos[h]
    repararon las brechas de tu nave.
Gente de todas partes y marineros
    hacían negocios en tu puerto.
10 Hombres de Persia, Lidia y Put
    han servido en tu ejército.
Te han embellecido con sus escudos
    y cascos colgados en tus muros.

11 »Los hombres de Arvad, así como tus propios soldados hacían guardia a lo largo de tus muros y colgaban sus escudos en los muros que rodean la ciudad. Los hombres de Gamad estaban apostados con sus flecheros en tus torres, embelleciéndote así aun más. 12 Los hombres de Tarsis eran tus mercaderes. A cambio de tus mercaderías intercambiaban todo tipo de riquezas, como plata, hierro, estaño y plomo. 13 Grecia, Turquía y Mésec también negociaban contigo y a cambio de tu mercancía te ofrecían esclavos y bronce. 14 Intercambiaban tu mercancía por caballos, equipos de caballos para carros de combate y mulas de la familia real de Bet Togarma. 15 Los habitantes de Rodas[i] también comerciaban contigo. Te proporcionaban ingreso vendiendo ébano y colmillos de marfil. 16 Siria comerciaba contigo e intercambiaba tus artículos hechos a mano por turquesas, telas teñidas de púrpura, telas bordadas, lino fino, coral y perlas. 17 Judá e Israel intercambiaban tu mercancía por trigo de Minit, resina, miel, aceite y bálsamo. 18 Damasco intercambiaba la gran variedad de tus artículos hechos a mano por vino de Jelbón y lana de Sajar. 19 También los danitas y los griegos cambiaban tu mercancía por hierro forjado, canela y caña. 20 Dedán negociaba con artículos para montar, 21 pues Arabia y todos los gobernantes de Cedar hacían negocios contigo con corderos, carneros y chivos. 22 Sabá y Ragama negociaban con las mejores especias, piedras preciosas y oro. 23 También Jarán, Cané, Edén, Asiria y Quilmad negociaban contigo, 24 intercambiando tu mercancía por telas caras, túnicas de púrpura, telas bordadas, tapetes coloridos y cuerdas muy bien trenzadas. 25 Empleabas grandes naves de Tarsis para transportar tus mercancías.

»Cargada de bienes de gran manera
    se te rendía honor en alta mar.
26 Los remeros te llevaron a mar abierto,
    pero los poderosos vientos de un ciclón que soplaban del oriente
    te hicieron naufragar en alta mar.
27 En el día de tu naufragio,
    caerán al mar tu riqueza,
tu mercancía, tus productos,
    igual que tus marineros y timoneles.
Tanto los reparadores de brechas y los comerciantes,
    los guerreros y toda la tripulación
    se irán juntos al fondo del mar.
28 Tus marineros gritarán al mar
    mientras las poblaciones de la costa temblarán de miedo.
29 Todos los remeros abandonarán el barco
    y los marineros se quedarán en tierra.
30 Llorarán y se lamentarán por ti,
    se echarán polvo en la cabeza
    y se revolcarán en las cenizas.
31 Como muestra de su tristeza,
    se raparán la cabeza
    y se vestirán de luto.
Con amargura llorarán
    y se lamentarán por ti.
32 Compondrán canciones tristes sobre ti
    y cantarán sus cantos fúnebres.
Dirán que no hubo ninguna otra
    como Tiro en medio de los mares.
33 Con tu comercio marítimo
    mantuviste a muchos.
La riqueza de tus productos enriqueció
    a reyes de todo el mundo.
34 Pero al naufragar en alta mar,
    en lo profundo del océano,
perecieron tu mercancía
    y todos tus pasajeros.
35 Todos los habitantes de las costas estaban deshechos por ti,
    sus reyes están atónitos y horrorizados.
36 Los comerciantes de todas las naciones
    se lamentan por ti.
Tu destrucción ha sido horrible
    y nunca jamás te recuperarás».

Profecía contra el rey de Tiro

28 Entonces el SEÑOR me dijo: «Hijo de hombre, dile al rey de Tiro que el Señor DIOS dice:

»Te has llenado de arrogancia
    y has dicho que eres un dios,
que has llegado a ocupar el trono
    de los dioses en alta mar.
Pero no eres dios, sino tan sólo un ser humano,
    aunque te consideres tan inteligente como un dios.
¿Es que eres más sabio que Daniel[j]?
    ¿No desconoces ningún secreto?
Has ganado poder con tu sabiduría y entendimiento,
    y has guardado plata y oro entre tus tesoros.
Con tu gran sabiduría has hecho negocios
    para aumentar tu riqueza y poder.
Pero tu poder
    te ha hecho arrogante.

»Por lo tanto, el SEÑOR Dios dice:
Como te consideras
    tan inteligente como un dios,
haré que vengan extranjeros contra ti,
    naciones crueles
que sacarán sus espadas
    y destruirán los magníficos edificios
    que has construido con tu sabiduría.
Te enviarán al sepulcro en alta mar,
    y morirás como todos los demás que han matado.
¿Podrás seguir insistiendo en que eres un dios
    aun ante aquellos que te van a matar?
¿Qué harás cuando ellos te ejecuten
    y resulte que eres tan sólo un ser humano?
10 Morirás como en la miseria,
    como un incircunciso en manos de extraños,
porque yo así lo he ordenado.
    Es la decisión del Señor DIOS».

11 Entonces el SEÑOR me dijo: 12 «Hijo de hombre, canta un canto fúnebre sobre el rey de Tiro y dile que así dice el Señor DIOS:

»Eres la misma imagen de la perfección,
    lleno de sabiduría y belleza.
13 Estabas en Edén, en el jardín de Dios.
    Estabas adornado con piedras preciosas:
rubí, crisólito, esmeralda,
    topacio, ónice, jaspe,
    zafiro, turquesa y berilo.
Estaban colocadas en tus hermosos tambores
    y encajes de oro que fueron diseñados para ti
    el día en que fuiste creado.
14 Fuiste elegido querubín protector,
    caminabas sobre carbones ardientes.
Yo te puse como un dios de dioses
    en el monte sagrado.
15 Desde el día en que fuiste creado,
    fuiste puro en todos aspectos,
    hasta que hiciste el mal.
16 Todos tus negocios se llenaron de violencia
    y pecaste.
Así que te hice salir del monte de Dios
    como algo profano,
y el querubín que te protegía
    te quitó de entre las estrellas.
17 Tu belleza te hizo llenarte de arrogancia.
    Tu esplendor corrompió tu sabiduría.
Por eso te eché ante otros reyes,
    para dejarte en ridículo.
18 Profanaste tu lugar sagrado
    por culpa de tus malos negocios.
Por eso hice salir de ti
    un fuego que te consumió
y así te hice polvo
    a la vista de todos.
19 Todos tus amigos extranjeros
    quedaron atónitos por lo que te pasó.
Haz quedado hecho un horror,
    has dejado de existir».

Mensaje contra Sidón

20 El SEÑOR me dijo: 21 «Hijo de hombre, presta atención a Sidón y profetiza contra ella. 22 Dile que así dice el Señor DIOS:

»Sidón, estoy en tu contra;
    en ti recibiré honor.
Cuando anuncie mi juicio en esa ciudad,
    el pueblo aprenderá que yo soy el SEÑOR.
    Entonces se me tratará con respeto.
23 Enviaré plagas y sangre a sus calles
    y muchos morirán en esa ciudad rodeada de ejércitos.
¡Así aprenderán que yo soy el SEÑOR!

24 »Las naciones vecinas que desprecian a Israel ya no serán como púas ni espinas punzantes para la familia real de Israel. Habrán aprendido que yo soy el Señor DIOS».

25 Así dice el Señor DIOS: «El pueblo de Israel ha sido esparcido entre las naciones, pero yo lo reuniré de nuevo, y cuando lo haga, los separaré como un pueblo consagrado ante dichas naciones, y regresarán a la tierra que le di a mi siervo Jacob. 26 Allí vivirán seguros, construirán sus casas y plantarán viñedos en paz. Esto sucederá cuando asigne jueces sobre todos aquellos que los trataron tan mal. Entonces Israel aprenderá que yo soy el SEÑOR su Dios».

Mensaje contra Egipto

29 A los doce días del mes décimo del año décimo[k], el SEÑOR me dijo: «Hijo de hombre, mira hacia el faraón, rey de Egipto. Dile que el Señor DIOS dice:

»Faraón, rey de Egipto, estoy en tu contra,
    gran monstruo[l] que yaces en el río
y dices: “El Nilo es mío,
    es mi creación”.
Te pondré garfios en las mandíbulas.
    Haré que los peces se peguen a tus escamas.
Te arrastraré fuera del río,
    con todos los peces pegados a tus escamas.
Luego te echaré al desierto a ti
    y a todos los peces del río.
Caerán en tierra árida
    y tus huesos no serán sepultados.
Serás alimento para los animales salvajes
    y los buitres.
Entonces todos los habitantes de Egipto aprenderán que yo soy el SEÑOR.
    Sólo has sido un bastón endeble para Israel.
Cuando se agarraron de ti, te quebraste,
    y les desgarraste la mano y hasta el brazo.
Cuando se apoyaron en ti, te quebraste,
    los dejaste caer y lastimarse la espalda.

»Por lo tanto, dice el Señor DIOS, traeré contra ti la espada y destruiré tanto a los seres humanos como a los animales. Entonces Egipto quedará desolado y arruinado. Los egipcios aprenderán que yo soy el SEÑOR. Es porque el faraón dijo: El Nilo es mío, es mi creación. 10 Por eso estoy contra ti y contra tu río. Dejaré a todo el país de Egipto en ruinas y desolado, desde Migdol hasta Asuán. 11 Nadie viajará por allí, ni los seres humanos ni animales. Nadie lo habitará durante 40 años. 12 Entonces convertiré a Egipto en una de las tierras más desoladas. Sus ciudades estarán en ruinas por 40 años, y esparciré a los egipcios entre las otras naciones.

13 »Porque el Señor DIOS dice: Al término de 40 años, reuniré a los egipcios de entre las naciones en las que han sido esparcidos. 14 Devolveré a los egipcios cautivos a Patros, su tierra de origen, y allí serán una nación insignificante. 15 Sí, serán una más de las naciones insignificantes y no serán ninguna amenaza para otras naciones. Los rebajaré tanto que no podrán gobernar a otras naciones. 16 Egipto dejará de ser un apoyo para Israel, no será sino un recordatorio del error que cometió Israel al ir a buscar apoyo en él. Entonces Israel aprenderá que yo soy el Señor DIOS».

17 El primero del primer mes del año 27[m], el SEÑOR me dijo: 18 «Hijo de hombre, Nabucodonosor el rey de Babilonia, obligó a su ejército a pelear muy duro contra Tiro. Todos tuvieron que llevar cargas pesadas, quedaron con la cabeza rapada y los hombros raspados. Nunca recibieron recompensa y ni siquiera recibieron recompensa por toda su lucha contra Tiro. 19 Por eso, el Señor DIOS dice: Ahora le doy a Nabucodonosor, rey de Babilonia, la tierra de Egipto. Él sacará al gran pueblo de Egipto, saqueará riquezas y despojos como recompensa para su ejército. 20 Le entregaré a Egipto por todo el esfuerzo que hizo por mí. Es la decisión del Señor DIOS.

21 »En aquel momento, aumentaré la fuerza del pueblo de Israel, y a ti, Ezequiel te daré la oportunidad de hablarles con libertad. Entonces aprenderán que yo soy el SEÑOR».

Castigo que recibirá Egipto

30 El SEÑOR me dijo: «Hijo de hombre, profetiza diciendo: Así dice el Señor DIOS:

»Giman: “¡Ay de ese día!”
El día del SEÑOR se acerca.
    Sí, ya se acerca el día del juicio.
Será un día gris
    para todas las naciones.
La espada entrará en Egipto
    y la angustia se apoderará de Etiopía.
Caerán muchos en Egipto
    cuando se capture al pueblo,
    y los cimientos de la sociedad egipcia sean destruidos.
Los soldados de Etiopía, Libia, Fut y Kub
    que pelearon como aliados de Egipto,
incluso los del pueblo de Dios,
    caerán a filo de espada en la guerra.

»Así dice el SEÑOR:
Caerán todos los países que apoyan a Egipto.
    La espada caerá sobre todas sus ciudades arrogantes,
desde Migdol hasta Asuán.
    Es la decisión del Señor DIOS.
Serán los países más devastados de todos los países.
    Sus ciudades serán las más destrozadas.
Entonces, cuando encienda a Egipto en llamas
    y destruya a todos sus aliados,
    ¡aprenderán que yo soy el SEÑOR!

»En ese momento, enviaré mensajeros en barcos para que lleven las malas noticias que atemorizarán a la confiada Etiopía. Entonces la angustia se apoderará de ellos en el día del juicio contra Egipto, porque ese día está cerca.

10 »Así dice el Señor DIOS:
Por medio de Nabucodonosor, rey de Babilonia,
    destruiré a las multitudes de Egipto.
11 Él y su ejército de soldados violentos,
    serán llevados a Egipto para destruirlo.
A filo de espada derramaran la sangre de muchos egipcios
    y el país se llenará de cadáveres.
12 Secaré los ríos.
    Como esclavos venderé al pueblo a amos crueles.
Por medio de extranjeros desolaré el país
    y todo lo que está en él.
    Yo, el SEÑOR, lo he decidido.

13 »Así dice el Señor DIOS:
Destruiré sus ídolos abominables
    y todos los dioses falsos de Menfis.
Egipto ya no tendrá un líder egipcio,
    y yo haré que tengan temor de Dios.
14 Destruiré a Patros, le prenderé fuego a Zoán
    y dictaré juicio contra Tebas.

15 »Desataré mi ira sobre Sin,
    la fortaleza de Egipto.
    Destruiré a las multitudes de Tebas.
16 Le prenderé fuego a Egipto,
    la ciudad de Sin temblará de miedo.
Tebas será partida en dos como con un hacha,
    y Menfis será atacada a diario.
17 Los mejores soldados de On y de Bubastis[n] caerán a filo de espada
    y las mujeres serán hechas prisioneras.
18 El día se oscurecerá en Tafnes cuando rompa el poderío de Egipto.
    Entonces sus arrogantes habitantes estarán acabados.
Una nube gris los cubrirá
    y sus ciudades quedarán cautivas.
19 Así castigaré a Egipto,
    declararé juicio contra Egipto,
    y así aprenderán que yo soy el SEÑOR».

20 El séptimo día del primer mes del año undécimo[o] de mi exilio, el SEÑOR me habló: 21 «Hijo de hombre, le he quebrado el brazo al faraón, rey de Egipto. No se le ha vendado ni curado. Nadie lo vendó para fortalecerlo y que así pudiera sostener su espada.

22 »Por lo tanto el Señor DIOS dice: Estoy en contra del faraón, rey de Egipto. Le quebraré los dos brazos, el sano y el que ya está fracturado, para hacer que la espada se le caiga de la mano. 23 Entonces esparciré a los egipcios entre las naciones y entre los países extranjeros. 24 Fortaleceré el brazo del rey de Babilonia y pondré la espada en su mano. Luego quebraré los brazos del faraón y gemirá como si estuviera herido de muerte. 25 Así fortaleceré los brazos del rey de Babilonia y los brazos del faraón quedarán inservibles. De este modo, cuando ponga mi espada en manos del rey de Babilonia y él la extienda contra Egipto, aprenderán que yo soy el SEÑOR.

26 »Sí, cuando disperse a Egipto entre las naciones y los países extranjeros, entonces aprenderán que yo soy el SEÑOR».

El cedro derribado

31 El primer día del tercer mes del año undécimo, el SEÑOR me dijo: «Hijo de hombre, dile al faraón, rey de Egipto, y a toda su corte:

»¿Con quién te comparas en grandeza?
Seguramente con Asiria,
    el Cedro del Líbano.
Con su hermoso ramaje,
    su sombra es como la de todo un bosque.
    Su copa llega hasta las nubes.
Las aguas lo hicieron crecer
    y las corrientes subterráneas lo hicieron crecer aun más.
Los ríos bañan la tierra donde está plantado.
    Sus canales riegan a todos los demás árboles del campo.
Con toda el agua de los canales,
    el cedro creció más que todos
los demás árboles del bosque
    y sus ramas se extendieron.
Todas las aves del cielo
    construyeron nidos en sus ramas
y todos los animales
    daban a luz bajo su follaje.
Gente de muchas naciones
    descansaba bajo su sombra.
Se hacía más hermoso
    por su gran altura y largas ramas
porque sus raíces tenían suficiente agua
    en lo profundo.
Los cedros del jardín de Dios
    no pueden compararse con él.
El ramaje de los demás árboles
    no puede compararse con el del cedro,
    ni siquiera el del plátano.
Ningún árbol del jardín de Dios
    se le compara en belleza.
Lo hice hermoso
    con su gran ramaje.
Todos los demás árboles
    en el Edén, jardín de Dios,
    lo envidian.

10 »Por lo tanto, dice el Señor DIOS: Puesto que creció tan alto, su copa llegaba hasta las nubes y se enorgullecía de su gran altura, 11 lo entregué a un gobernante extranjero para que lo tratara como se merecía. 12 Las naciones extranjeras, las más violentas lo cortaron y lo dejaron tirado en las montañas. Sus ramas han caído a los valles y a los ríos secos. Toda la gente abandonó su sombra, lo dejaron solo. 13 Las aves del cielo anidaron en su tronco caído, y los animales del bosque habitaron en sus ramas más altas. 14 Esto sucedió para que ningún otro árbol bien regado creciera tan alto, para que la copa de ninguno llegara hasta las nubes y para que ninguno de los árboles que se nutren de la misma agua esté junto a él. Porque todos han sido destinados a muerte y enviados al mundo subterráneo como todos los seres humanos.

15 »Así dice el Señor DIOS: El día que descendió al lugar de los muertos[p], lo encerré en lo profundo y detuve las aguas debajo de la tierra. Paré todos los ríos y detuve las fuertes corrientes. Vestí de luto al Líbano y todos los árboles se marchitaron. 16 Hice temblar a las naciones con el ruido de su caída. Cuando lo envié al lugar de los muertos con los demás mortales, todos los árboles hermosos del Edén, los mejores, los árboles del Líbano bien bañados en agua, encontraron alivio en el mundo subterráneo. 17 Porque aun ellos han descendido al lugar de los muertos para estar con los que su brazo mató a filo de espada. Los demás árboles se sentaron bajo la sombra de las naciones. 18 ¿Con qué árboles del Edén puedes compararte en tamaño y gloria? Serás enviado al mundo subterráneo con los árboles del Edén, donde morarás entre los que no están circuncidados que cayeron a filo de espada.

»Esto se refiere al faraón y a su gente. Es la decisión del Señor DIOS».

Canto fúnebre sobre el faraón

32 El primer día del mes doce del año doce,[q] el SEÑOR me habló: «Hijo de hombre, canta un canto fúnebre sobre el faraón, rey de Egipto, que diga:

»Te has comparado con un león de las naciones,
    pero en realidad eres un monstruo marino[r].
Saltas del río enturbiando el agua,
    pisoteas el agua con los pies.

»Así dice el Señor DIOS:
Cuando reúna a muchas naciones,
    echaré mi red sobre ti y te atraparé.
Te dejaré en tierra tirado en el campo abierto.
    Entonces haré que las aves y los animales salvajes
    se alimenten de ti hasta quedar satisfechos.
Derramaré tu carne en las montañas
    y llenaré de ella los valles.
Empaparé la tierra seca con tu sangre,
    con ella llenaré los valles
    hasta las cimas de las montañas.
Y cuando estés acabado,
    cubriré el cielo y apagaré las estrellas.
Cubriré el sol con nubes
    y la luna no iluminará el cielo.
Por ti apagaré los astros celestes
    y esparciré oscuridad sobre tu tierra.
    Es la decisión del Señor DIOS.

»Cuando lleguen a las naciones las noticias de tu destrucción, a tierras que nunca conociste, 10 le inspiraré miedo a muchas naciones. Sus reyes estarán horrorizados cuando vean lo que voy a hacer contigo. ¡Se les pondrán los pelos de punta cuando esgrima mi espada en su cara! Todos temblarán cuando sepan de tu destrucción.

11 »Porque así dice el Señor DIOS: La espada del rey de Babilonia vendrá contra ti. 12 Cortaré a tus poderosos hombres con las espadas de los guerreros. Llevarán todo el orgullo de Egipto y toda su multitud será destruida. 13 Destruiré también todo su ganado al lado de las abundantes aguas. El pie de ningún humano ni la pezuña del ganado revolverá las aguas de nuevo. 14 Dejaré que las aguas se asienten y haré que los ríos fluyan tranquilos, como el aceite. El Señor DIOS lo ha dicho. 15 Cuando entregue a Egipto para ser destruido, cuando destruya a sus habitantes, la tierra perderá su abundancia. ¡Así aprenderán que yo soy el SEÑOR!

16 »Este es un canto fúnebre que las mujeres de otras naciones cantarán sobre toda su multitud. Es la decisión del Señor DIOS».

Destrucción de Egipto

17 El día quince del mismo mes en el año doce el SEÑOR me habló: 18 «Hijo de hombre, canta un canto fúnebre a las multitudes de Egipto. Envíalo al mundo subterráneo para que llegue a los que descendieron a la fosa.

19 “¿Acaso crees que eres más privilegiado que los otros?
    Baja a la tumba y yace con los no circuncidados[s]”.

20 Egipto y sus multitudes caerán en medio de los muertos a filo de espada, quienes los atraen hacia la fosa. 21 Los jefes y sus ayudantes les hablarán desde el lugar de los muertos, donde ellos, los que no están circuncidados, descendieron y se tendieron entre los muertos a filo de espada.

22 »Asiria y todas sus multitudes lo rodearon a él y a sus sepulcros. Todos ellos murieron a filo de espada. 23 Todos los que sembraban el terror en la tierra de los vivos, yacen muertos en lo más profundo de la fosa. Es la multitud que rodea su tumba, todos muertos, a filo de espada.

24 »Elam y todas sus multitudes rodean su tumba. Todos los no circuncidados muertos a filo de espada que descendieron al mundo subterráneo, que sembraron miedo en la tierra de los vivos. Llevaron su vergüenza con los que descendieron a la fosa. 25 Tendieron una cama para él entre los muertos a espada, con la multitud rodeando su tumba, todos los no circuncidados. Ya que habían sembrado miedo en la tierra de los vivos, llevaron su vergüenza con los que descendieron a la fosa, siendo colocado entre los muertos a filo de espada.

26 »Mésec y Tubal y sus multitudes rodean su tumba. Todos ellos, los no circuncidados, heridos por la espada, porque habían sembrado miedo en la tierra de los vivos. 27 No yacen con los guerreros que caen de las multitudes de los no circuncidados que descendieron al lugar de los muertos con sus armas de guerra, cuyas espadas están bajo la cabeza. En sus huesos llevarán su culpa porque habían sembrado miedo en la tierra de los vivos.

28 »En cuanto a ti, serás quebrantado entre los no circuncidados y yacerás entre los muertos a filo de espada. 29 Allí está Edom, con sus reyes y todos sus príncipes que a pesar de su poder fueron enviados con los muertos a filo de espada. Yacen entre los no circuncidados que descendieron a la fosa. 30 Allí yacen todos los líderes del norte y todos los de Sidón que descendieron con los muertos a espada en su terror, humillados a pesar de su poderío. Los paganos yacen con los muertos a filo de espada y llevan su vergüenza con los que descendieron a la fosa.

31 »El faraón los verá y será consolado sobre sus multitudes de muertos a filo de espada. El faraón y su ejército serán destruidos. Es la decisión del Señor DIOS.

32 »Porque yo sembré miedo en la tierra de los vivos, y el faraón y sus multitudes yacerán entre los paganos, con los muertos a filo de espada», dice el Señor DIOS.

Dios nombra a Ezequiel como guardia

(Ez 3:16-21)

33 El SEÑOR me dijo: «Hijo de hombre, háblale a tu pueblo y dile: “Cuando traigo al enemigo contra una nación, el pueblo nombra a uno de los suyos para que haga guardia. Si este ve que el enemigo se acerca, toca la trompeta para advertir al pueblo. Si alguien oye la advertencia de la trompeta y la ignora, entonces será responsable de su propia muerte cuando venga el enemigo porque oyó el sonido de advertencia de la trompeta pero la ignoró, así que es su culpa. Si un guardia ve al enemigo que se acerca pero no toca la trompeta para advertir al pueblo, entonces el enemigo vendrá y los matará. Ellos morirán por sus pecados, pero el guardia será responsable de que hayan muerto”.

»Pues a ti, hombre, te he puesto como guardián del pueblo de Israel. Así que cuando oigas un mensaje de parte mía, debes advertirles. Es posible que te diga que le avises al perverso: Perverso, ciertamente morirás. Si no hablas con él y le adviertes que cambie su conducta, entonces morirá por su pecado, pero a ti te haré responsable de su muerte. En cambio, si le adviertes que cambie su conducta y que se vuelva a Dios, y no lo hace, entonces morirá por su pecado, pero tú te habrás salvado.

Dios no quiere destruir a nadie

(Ez 18:21-32)

10 »Así que, hijo de hombre, dile al pueblo de Israel: “Ustedes han dicho: Somos culpables de crímenes y pecados. Nos estamos pudriendo en ellos. ¿Cómo viviremos?”

11 »Diles que el Señor DIOS afirma: “No quiero que muera el que hace el mal, sino que se vuelva a mí y así tenga vida. Pueblo de Israel, vuélvete a Dios. Aléjate del camino de maldad para que no mueras”.

12 »Hijo de hombre, dile al pueblo: La honestidad del bueno no lo salvará cuando cometa una falta. Asimismo, la maldad del perverso no hará que caiga si cambia su mala conducta. El bueno no escapará del castigo cuando peque. 13 Imagina que le digo al bueno: “¡Vivirás!” Tal vez el bueno pensará que la justicia que antes practicaba lo salvará, así que empieza a hacer el mal. Si eso sucede, no se tomará en cuenta su justicia y morirá por el mal que hizo. 14 Ahora, imaginen que le digo al perverso: “¡Ciertamente morirás!”, pero él cambia su conducta y empieza a hacer el bien. 15 Puede ser que devuelva lo que le robó a los pobres. Tal vez pague todas sus multas. Tal vez deje de hacer el mal y empiece a vivir de acuerdo a las leyes que dan vida. ¡Entonces ese vivirá! ¡No morirá! 16 No se tomará en contra suya ninguno de sus pecados. Debido a que empezó a hacer el bien, ciertamente vivirá.

17 »Tal vez tu pueblo dirá: “¡La forma de actuar del Señor no es justa!” Pero es la forma de actuar de ellos que tampoco es justa. Así que se empezarán a comportar mal. 18 Si el bueno deja de hacer el bien y empieza a hacer el mal, morirá por sus malas acciones. 19 Y si el malo se avergüenza de sus maldades y empieza a hacer el bien, entonces vivirá por sus buenas acciones. 20 Así que, pueblo de Israel, la forma de actuar de Dios es justa porque él juzgará a cada uno por sus acciones».

La caída de Jerusalén

21 El quinto día del décimo mes del año doce[t] de nuestro exilio, un fugitivo de Jerusalén vino a verme y me dijo: «Jerusalén ha sido capturada». 22 La noche antes de que el fugitivo viniera a verme, el poder del SEÑOR me dio la habilidad de hablar de nuevo. Mi lengua se soltó y ya no estaba mudo. Esto sucedió antes de que el fugitivo llegara en la mañana.

23 Entonces el SEÑOR me dijo: 24 «Hijo de hombre, la gente que vive entre las ruinas de Israel dice: “Abraham era sólo un hombre y heredó la tierra. Nosotros somos muchos, así que recibiremos la tierra como herencia”. 25 Por tanto diles que así dice el Señor DIOS: “¿Realmente creen que pueden comer sangre, adorar sus repugnantes ídolos, asesinar gente y aun así recibir la tierra? 26 Dependen de la violencia, hacen cosas horribles, cada uno de ustedes se deshonra con la esposa de otro, ¿y todavía creen que recibirán la tierra?”

27 »Ezequiel, diles que el Señor DIOS dice: “Prometo por mí mismo que morirán a filo de espada en esas ruinas. A los que dejen moribundos en los campos se los daré de alimento a los animales salvajes. Los que se esconden en su fortaleza y en sus cuevas morirán por la plaga. 28 Desolaré y destruiré la tierra. Se acabará su maravillosa fuerza y nadie pasará por las montañas. 29 Entonces, cuando convierta la tierra en un desierto desolado y destruido por sus acciones horribles, ¡aprenderán que yo soy el SEÑOR!”

30 »Así que en cuanto a ti, hijo de hombre, tu mismo pueblo está hablando sobre ti cerca de los muros y en todas las entradas. Se dicen unos a otros: “¡Vamos, escuchemos el siguiente mensaje del SEÑOR!” 31 Mi pueblo acude a ti cuando es la hora de reunión, se sienta ante ti y escucha tus palabras, pero no ponen en práctica lo que dices porque hacen comentarios eróticos y buscan lo que es de provecho propio. 32 Para ellos no eres más que un cantante de canciones eróticas. Tienes una voz melodiosa y haces música dulce; ellos te escuchan, pero no te hacen caso. 33 Pero cuando vengan los problemas, y sí que vendrán, ¡entonces sabrán que realmente eres un profeta!»

Los malos pastores de Israel

34 El SEÑOR me dijo: «Hijo de hombre, profetiza sobre los pastores de Israel. Profetiza y dales este mensaje a los pastores. Así dice el Señor DIOS: ¡Oigan, pastores de Israel, que sólo se han estado cuidando a sí mismos! ¿No se supone que los pastores cuidan el rebaño? ¡Ustedes se comen el queso, usan la lana y matan a las ovejas más gordas, pero no cuidan el rebaño! No fortalecen a la oveja débil, no cuidan de la enferma, ni curan a la que está herida. No van a traer a la que se descarría ni buscan a las perdidas, ¡y hasta a los fuertes[u] los abusaron y los trataron con crueldad! Las han dispersado sin pastor, así que ellas se han convertido en presa de los animales salvajes. Mis ovejas andan descarriadas por los montes y colinas. Han sido dispersadas por toda la faz de la tierra, y nadie las ha ido a buscar.

»Así que, pastores, escuchen este mensaje del SEÑOR: Prometo por mí mismo, dice el Señor DIOS, que ustedes, pastores, serán castigados por haber tomado mis ovejas como un botín, por dejarlas sin pastor a merced de los animales salvajes, por ni siquiera haber tratado de ir a buscarlas, por ignorarlas y por cuidarse sólo a sí mismos. Por lo tanto, pastores, escuchen este mensaje del SEÑOR. 10 Así dice el Señor DIOS: ¡Miren, estoy contra esos pastores y les demandaré mis ovejas! ¡Los echaré, no los dejaré pastorear mis ovejas nunca más! Rescataré mis ovejas de sus fauces, y los pastores ya no se alimentarán de ellas.

El buen pastor

11 »Porque así dice el Señor DIOS: ¡Yo mismo iré a buscar a mis ovejas! 12 Las pastorearé como un pastor pastorea a su rebaño cuando anda entre sus ovejas que se han dispersado. Así las pastorearé. Las rescataré de todos los lugares donde se dispersen en el día oscuro y lleno de nubarrones. 13 Las traeré de las naciones y las reuniré de otros países para traerlas de nuevo a su tierra. Entonces las pastorearé en los montes de Israel, por los valles y todos los pueblos del país. 14 Las pastorearé en los mejores pastos y su prado se extenderá hasta los montes más altos de Israel. Descansarán en buenos pastos y se alimentarán en los mejores pastos en los montes de Israel. 15 ¡Yo mismo cuidaré a mis ovejas! Las haré reposar. El Señor DIOS lo ha dicho así. 16 Buscaré a la perdida, iré por la descarriada, cuidaré de la herida, fortaleceré a la enferma, vigilaré[v] a la gorda y fuerte. Las pastorearé con justicia.

17 »Así dice el Señor DIOS: Rebaño mío, yo impartiré justicia cuando tengan diferencias entre ustedes, entre una oveja y otra, entre los carneros y los chivos. 18 ¿No les es suficiente alimentarse de buenos pastos? ¿Por qué tienen que pisotear lo que queda? ¿Cuando bebes de aguas cristalinas, debes enturbiar el agua que queda para los demás?

19 »Mis ovejas se alimentan de los campos que pisotean y beben del estanque que enturbian con sus patas. 20 Por lo tanto, dice el Señor DIOS: Yo seré quien juzgue entre las ovejas gordas y las flacas. 21 Porque ustedes se han empujado con el costado y la espalda, y han atacado a cornadas a las débiles, hasta dispersarlas. 22 Pero yo rescataré a mis ovejas y ya no serán su presa. Yo impartiré justicia entre una oveja y otra. 23 Entonces asignaré a mi siervo como su pastor y él las apacentará. Un descendiente de David las pastoreará. ¡Él será su pastor! 24 Entonces yo, el SEÑOR, seré su Dios, y mi siervo David las guiará. El SEÑOR lo ha dicho. 25 Entonces haré un pacto de paz contigo. Haré desaparecer del país a las fieras para que descanses segura en el desierto y duermas en paz en el bosque.

26 »Entonces mi pueblo será una bendición alrededor de mi monte. Enviaré lluvias en el momento oportuno y estas serán una bendición. 27 Hasta los árboles silvestres producirán fruto, la tierra producirá sus cosechas y ellas vivirán seguras en su tierra. Cuando yo quiebre su yugo y las libere de los que las esclavizan, entonces sabrán que yo soy el SEÑOR. 28 Ya no serán presa de las naciones y los animales salvajes no se las comerán. Vivirán seguras y nadie las espantará. 29 Les daré una tierra fértil y nunca más tendrán hambre. Ya no tendrán que soportar más los insultos de las naciones. 30 Entonces sabrán que yo, el SEÑOR su Dios, estoy con ellas, y que ellas son mi pueblo, Israel. El Señor DIOS lo ha dicho. 31 ¡Ustedes son mis ovejas, mi rebaño de seres humanos en mi prado, y yo soy su Dios!, dice el Señor DIOS».

Mensaje contra Edom

35 El SEÑOR me habló: «Hijo de hombre, vuélvete a Seír y profetiza contra ella. Dile que así dice el Señor DIOS:

»Estoy contra ti, montaña de Seír,
    he levantado mi brazo contra ti
    y destruiré completamente tu país.
Dejaré tus ciudades en ruinas,
    y tú serás destruida.
Así aprenderás que yo soy el SEÑOR.

»Porque siempre has sido enemigo de Israel, y entregaste al pueblo para morir a filo de espada en el momento de su destrucción, el momento de su castigo final. Así lo afirma el Señor DIOS: Prometo por mí mismo que me vengaré, y la venganza te perseguirá. ¡Juro que odiarás la venganza, pero la venganza te perseguirá! Dejaré a la montaña de Seír totalmente desolada y ya no tendrá tráfico. Cubriré de víctimas asesinadas a filo de espada tus montes y colinas, tus valles y los cauces de tus ríos. Tu país será destruido para siempre y tus ciudades no podrán volver a habitarse. ¡Así aprenderán que yo soy el SEÑOR!

10 »Porque ustedes dijeron: “El SEÑOR vivía en esta tierra que pertenecía a dos naciones y dos pueblos,[w] ¡pero ahora será nuestra!” 11 El Señor DIOS afirma: “¡Prometo por mí mismo que te trataré con tu misma ira! ¡Te castigaré con tu mismo celo y odio! ¡Tomaré como base lo que les sucedió a ellos para decirte cómo te juzgaré a ti! 12 ¡Entonces sabrás que yo soy el SEÑOR! Te oí insultar a los montes de Israel, diciendo: ¡Han sido destruidos! ¡Son nuestra presa! 13 ¡Me desafiaban presumiendo de sí mismos! ¡Yo los oí!”

14 »Así que, dice el Señor DIOS: Te voy a destruir y toda la tierra va a festejarlo. 15 Así como se regocijaron con la destrucción de la tierra que pertenecía al pueblo de Israel, así me regocijaré yo. ¡No sólo el monte Seír, sino todo Edom será destruido! Así aprenderán que yo soy el SEÑOR.

Palabra de Dios para Todos (PDT)

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