-
Predicación de Juan el Bautista
(Mt. 3.1-12; Lc. 3.1-9,15-17; Jn. 1.19-28)
Principio del evangelio de Jesucristo, Hijo de Dios.
-
Jesús principia su ministerio
(Mt. 4.12-17; Lc. 4.14-15)
Después que Juan fue encarcelado, Jesús vino a Galilea predicando el evangelio del reino de Dios,
-
diciendo: El tiempo se ha cumplido, y el reino de Dios se ha acercado; arrepentíos, y creed en el evangelio.
-
diciendo: ¡Ah! ¿qué tienes con nosotros, Jesús nazareno? ¿Has venido para destruirnos? Sé quién eres, el Santo de Dios.
-
¿Por qué habla este así? Blasfemias dice. ¿Quién puede perdonar pecados, sino solo Dios?
-
Entonces él se levantó en seguida, y tomando su lecho, salió delante de todos, de manera que todos se asombraron, y glorificaron a Dios, diciendo: Nunca hemos visto tal cosa.
-
cómo entró en la casa de Dios, siendo Abiatar sumo sacerdote, y comió los panes de la proposición, de los cuales no es lícito comer sino a los sacerdotes, y aun dio a los que con él estaban?
-
Y los espíritus inmundos, al verle, se postraban delante de él, y daban voces, diciendo: Tú eres el Hijo de Dios.
-
Porque todo aquel que hace la voluntad de Dios, ese es mi hermano, y mi hermana, y mi madre.
-
Y les dijo: A vosotros os es dado saber el misterio del reino de Dios; mas a los que están fuera, por parábolas todas las cosas;
-
Parábola del crecimiento de la semilla
Decía además: Así es el reino de Dios, como cuando un hombre echa semilla en la tierra;
-
Parábola de la semilla de mostaza
(Mt. 13.31-32; Lc. 13.18-19)
Decía también: ¿A qué haremos semejante el reino de Dios, o con qué parábola lo compararemos?
-
Y clamando a gran voz, dijo: ¿Qué tienes conmigo, Jesús, Hijo del Dios Altísimo? Te conjuro por Dios que no me atormentes.
-
Porque dejando el mandamiento de Dios, os aferráis a la tradición de los hombres: los lavamientos de los jarros y de los vasos de beber; y hacéis otras muchas cosas semejantes.
-
Les decía también: Bien invalidáis el mandamiento de Dios para guardar vuestra tradición.
-
Pero vosotros decís: Basta que diga un hombre al padre o a la madre: Es Corbán (que quiere decir, mi ofrenda a Dios) todo aquello con que pudiera ayudarte,
-
invalidando la palabra de Dios con vuestra tradición que habéis transmitido. Y muchas cosas hacéis semejantes a estas.
-
Pero él, volviéndose y mirando a los discípulos, reprendió a Pedro, diciendo: ¡Quítate de delante de mí, Satanás! porque no pones la mira en las cosas de Dios, sino en las de los hombres.
-
También les dijo: De cierto os digo que hay algunos de los que están aquí, que no gustarán la muerte hasta que hayan visto el reino de Dios venido con poder.
-
Y si tu ojo te fuere ocasión de caer, sácalo; mejor te es entrar en el reino de Dios con un ojo, que teniendo dos ojos ser echado al infierno,
-
pero al principio de la creación, varón y hembra los hizo Dios.
-
Por tanto, lo que Dios juntó, no lo separe el hombre.
-
Viéndolo Jesús, se indignó, y les dijo: Dejad a los niños venir a mí, y no se lo impidáis; porque de los tales es el reino de Dios.
-
De cierto os digo, que el que no reciba el reino de Dios como un niño, no entrará en él.
-
Jesús le dijo: ¿Por qué me llamas bueno? Ninguno hay bueno, sino solo uno, Dios.