Aun los cautivos logran tranquilidad en la muerte, donde no hay guardias que los maldigan.

Ellos desean la muerte, pero no llega; buscan la muerte con más fervor que a tesoro escondido.

Te salvará de la muerte en tiempo de hambre y del poder de la espada en tiempo de guerra.

Cuando azota la plaga, él se ríe de la muerte del inocente.

Pero los malos serán cegados; no tendrán escapatoria; su única esperanza es la muerte».

¿Por qué debería ponerme en peligro de muerte y tomar mi vida en mis manos?

¿Pueden los muertos volver a vivir? De ser así, esto me daría esperanza durante todos mis años de lucha y con anhelo esperaría la liberación de la muerte.

La enfermedad les carcome la piel; la muerte devora sus miembros.

Quedé reducido a piel y huesos y he escapado de la muerte por un pelo.

Cuando les arranquen la flecha de la espalda, la punta brillará con sangre. El terror de la muerte los invade.

Jamás admitiré que ustedes tengan la razón; defenderé mi integridad hasta la muerte.

La Destrucción y la Muerte dicen: “Solo hemos oído rumores acerca de dónde encontrarla”.

Y sé que me envías a la muerte, el destino de todos los que viven.

Él las protege de la tumba, de cruzar el río de la muerte.

Están a las puertas de la muerte; los ángeles de la muerte los esperan.

Pero si se niegan a escucharlo, cruzarán el río de la muerte; morirán por falta de entendimiento.

¿Sabes dónde se encuentran las puertas de la muerte? ¿Has visto las puertas de la absoluta penumbra?