Add parallel Print Page Options

Llegaré entonces al altar de Dios,
    del Dios de mi alegría y mi deleite,
y allí, oh Dios, mi Dios,
    te alabaré al son del arpa.

¿Por qué voy a inquietarme?
    ¿Por qué me voy a angustiar?
En Dios pondré mi esperanza,
    y todavía lo alabaré.
    ¡Él es mi Salvador y mi Dios!

Read full chapter