Libro I(A)

Dichoso es quien
    no sigue el consejo de los malvados,
ni se detiene en la senda de los pecadores,
    ni se sienta en la reunión de los burladores,
sino que en la Ley del Señor se deleita
    y día y noche medita en ella.
Es como el árbol plantado a la orilla de un río
    que, cuando llega su tiempo, da fruto
y sus hojas jamás se marchitan.
    Todo cuanto hace prospera.

En cambio, los malvados
    son como paja arrastrada por el viento.
Por eso no se sostendrán los malvados en el juicio
    ni los pecadores en la asamblea de los justos.

Porque el Señor cuida el camino de los justos,
    mas la senda de los malvados lleva a la perdición.

LIBRO PRIMERO

Contraste entre el justo y los impíos

¡Cuán bienaventurado es el hombre que no anda(A) en el consejo de los impíos(B),
ni se detiene en el camino de los pecadores(C),
ni se sienta en la silla de los escarnecedores(D),
sino que en la ley del Señor está su deleite(E),
y en su ley medita de día(F) y de noche(G)!
Será como árbol firmemente plantado junto a corrientes[a] de agua(H),
que da su fruto a su tiempo,
y su hoja[b] no se marchita;
en todo lo que hace, prospera[c](I).

No así los impíos,
que son como paja que se lleva el viento(J).
Por tanto, no se sostendrán[d] los impíos(K) en el juicio(L),
ni los pecadores en la congregación de los justos(M).
Porque el Señor conoce[e] el camino de los justos(N),
mas el camino de los impíos perecerá(O).

Footnotes

  1. Salmos 1:3 O, canales
  2. Salmos 1:3 O, follaje
  3. Salmos 1:3 O, y todo lo que hace prospera
  4. Salmos 1:5 O, se levantarán
  5. Salmos 1:6 O, aprueba

LIBRO PRIMERO

Contraste entre el justo y los impíos

¡Cuán bienaventurado es el hombre que no anda(A) en el consejo de los impíos(B),
Ni se detiene en el camino de los pecadores(C),
Ni se sienta en la silla de los escarnecedores(D),
Sino que en la ley del Señor está su deleite(E),
Y en Su ley medita de día(F) y de noche(G)!
Será como árbol plantado junto a corrientes de agua(H),
Que da su fruto a su tiempo
Y su hoja no se marchita;
En todo lo que hace, prospera(I).

No así los impíos,
Que son como paja que se lleva el viento(J).
Por tanto, no se sostendrán los impíos(K) en el juicio(L),
Ni los pecadores en la congregación de los justos(M).
Porque el Señor conoce el camino de los justos(N),
Pero el camino de los impíos perecerá(O).

LIBRO I

El justo y los pecadores

Bienaventurado el varón que no anduvo en consejo de malos,

Ni estuvo en camino de pecadores,

Ni en silla de escarnecedores se ha sentado;

Sino que en la ley de Jehová está su delicia,

Y en su ley medita de día y de noche.

Será como árbol plantado junto a corrientes de aguas,(A)

Que da su fruto en su tiempo,

Y su hoja no cae;

Y todo lo que hace, prosperará.

No así los malos,

Que son como el tamo que arrebata el viento.

Por tanto, no se levantarán los malos en el juicio,

Ni los pecadores en la congregación de los justos.

Porque Jehová conoce el camino de los justos;

Mas la senda de los malos perecerá.

(A)Al director musical. Salmo de David.

31 En ti, Señor, busco refugio;
    jamás permitas que me avergüencen.
    Por tu justicia, líbrame.
Inclina a mí tu oído
    y acude pronto a socorrerme.
Sé tú mi roca de refugio,
    la fortaleza de mi salvación.
Guíame, pues eres mi roca y mi fortaleza,
    dirígeme por amor a tu nombre.
Líbrame de la trampa que me han tendido,
    porque tú eres mi refugio.
En tus manos encomiendo mi espíritu;
    líbrame, Señor, Dios de la verdad.

Odio a los que adoran ídolos vanos;
    yo, por mi parte, confío en ti, Señor.
Me alegro y me regocijo en tu amor,
    porque tú has visto mi aflicción
    y conoces las angustias de mi alma.
No me entregaste al enemigo,
    sino que me pusiste en lugar espacioso.

Tenme compasión, Señor, que estoy angustiado;
    el dolor debilita mis ojos,
    mi alma y mi cuerpo.
10 La vida se me va en angustias
    y los años en lamentos;
la aflicción está acabando con mis fuerzas
    y mis huesos se van debilitando.
11 Por causa de todos mis enemigos,
    soy motivo de desprecio para mis vecinos;
soy un espanto para mis amigos;
    de mí huyen los que me encuentran en la calle.
12 Me han olvidado, como si hubiera muerto;
    soy como una vasija hecha pedazos.
13 Son muchos a los que oigo murmurar:
    «Hay terror por todas partes».
Se han confabulado contra mí
    y traman quitarme la vida.

14 Pero yo, Señor, en ti confío,
    y digo: «Tú eres mi Dios».
15 Mi vida entera está en tus manos;
    líbrame de mis enemigos y perseguidores.
16 Haz resplandecer tu rostro sobre tu siervo;
    por tu gran amor, sálvame.
17 Señor, no permitas que me avergüencen,
    porque a ti he clamado.
Que sean avergonzados los malvados
    y silenciados en el sepulcro.[a]
18 Que sean silenciados sus labios mentirosos,
    porque hablan contra los justos
    con orgullo, desdén e insolencia.

19 ¡Cuán grande es tu bondad!
    La reservas para los que te temen,
y a la vista de la gente la derramas
    sobre los que en ti se refugian.
20 Al amparo de tu presencia los proteges
    de las intrigas humanas;
en tu morada los resguardas
    de las lenguas contenciosas.

21 Bendito sea el Señor,
    pues mostró su gran amor por mí
    cuando me hallaba en una ciudad sitiada.
22 En mi angustia llegué a decir:
    «¡He sido arrojado de tu presencia!».
Pero tú oíste mi voz suplicante
    cuando te pedí que me ayudaras.

23 Amen al Señor, todos sus fieles;
    él protege a los dignos de confianza,
    pero a los orgullosos les da su merecido.
24 Cobren ánimo y ármense de valor,
    todos los que en el Señor esperan.

Footnotes

  1. 31:17 sepulcro. Lit. Seol.

Salmo de súplica y alabanza

Para el director del coro. Salmo de David.

31 (A)En ti, oh Señor, me refugio;
jamás sea yo avergonzado(B);
líbrame en tu justicia(C).
Inclina a mí tu oído, rescátame pronto(D);
sé para mí roca fuerte[a](E),
fortaleza para salvarme.
Porque tú eres mi roca[b] y mi fortaleza(F),
y por amor de tu nombre me conducirás y me guiarás(G).
Me sacarás de la red que en secreto me han tendido(H);
porque tú eres mi refugio[c](I).
En tu mano encomiendo mi espíritu(J);
tú me has redimido(K), oh Señor, Dios de verdad[d](L).

Aborrezco[e] a los que confían en ídolos vanos[f](M);
mas yo confío en el Señor(N).
Me gozaré y me alegraré en tu misericordia(O),
porque tú has visto mi aflicción(P);
has conocido las angustias de mi alma,
y no me has entregado en manos del enemigo(Q);
tú has puesto mis pies en lugar espacioso.

Ten piedad de mí, oh Señor, porque estoy en angustia(R);
se consumen de sufrir mis ojos(S), mi alma y mis entrañas(T).
10 Pues mi vida se gasta en tristeza(U),
y mis años en suspiros;
mis fuerzas se agotan a causa de mi iniquidad(V),
y se ha consumido mi cuerpo[g](W).
11 A causa de todos mis adversarios, he llegado a ser objeto de oprobio(X),
especialmente para mis vecinos(Y),
y causa de espanto para mis conocidos;
los que me ven en la calle huyen de mí.
12 Como un muerto soy olvidado, sin ser recordado[h](Z),
soy semejante a un vaso roto.
13 Porque he oído la calumnia[i] de muchos(AA),
el terror está por todas partes(AB);
mientras traman juntos contra mí(AC),
planean quitarme la vida(AD).

14 Pero yo, oh Señor, en ti confío;
digo: Tú eres mi Dios(AE).
15 En tu mano están mis años[j](AF);
líbrame de la mano de mis enemigos, y de los que me persiguen(AG).
16 Haz resplandecer tu rostro sobre tu siervo(AH);
sálvame en tu misericordia(AI).
17 Oh Señor, no sea yo avergonzado(AJ), porque a ti clamo;
sean avergonzados los impíos(AK); que desciendan en silencio al Seol[k](AL).
18 Enmudezcan los labios mentirosos(AM),
que arrogantes hablan contra el justo(AN)
con soberbia y desprecio(AO).

19 ¡Cuán grande es tu bondad(AP),
que has guardado para los que te temen,
que has obrado para los que en ti se refugian(AQ),
delante de los hijos de los hombres(AR)!
20 De las conspiraciones(AS) de los hombres tú los escondes en lo secreto de tu presencia(AT);
en un refugio[l] los pondrás a cubierto de los enredos[m] de las lenguas(AU).
21 Bendito sea el Señor(AV),
porque ha hecho maravillosa su misericordia para mí(AW) en ciudad asediada[n](AX).
22 Y yo alarmado[o], decía(AY):
¡Cortado soy de delante de tus ojos(AZ)!
Empero tú oíste la voz de mis súplicas
cuando a ti clamaba(BA).

23 ¡Amad al Señor, todos sus santos(BB)!
El Señor preserva a los fieles(BC),
y retribuye plenamente a los que obran con soberbia(BD).
24 Esforzaos, y aliéntese vuestro corazón(BE),
todos vosotros que esperáis en el[p] Señor.

Footnotes

  1. Salmos 31:2 O, roca de refugio
  2. Salmos 31:3 O, peñón
  3. Salmos 31:4 O, fortaleza
  4. Salmos 31:5 O, fidelidad
  5. Salmos 31:6 Algunas versiones antiguas dicen: Tú aborreces
  6. Salmos 31:6 O, vanidades huecas
  7. Salmos 31:10 O, mis huesos
  8. Salmos 31:12 Lit., del corazón
  9. Salmos 31:13 Lit., murmuración
  10. Salmos 31:15 Lit., tiempos
  11. Salmos 31:17 I.e., región de los muertos
  12. Salmos 31:20 O, pabellón
  13. Salmos 31:20 O, las contiendas
  14. Salmos 31:21 O, fortificada
  15. Salmos 31:22 O, Y en mi premura
  16. Salmos 31:24 O, esperáis al

Salmo de súplica y alabanza

Para el director del coro. Salmo de David.

31 (A)En Ti, oh Señor, me refugio;
Jamás sea yo avergonzado(B);
Líbrame en Tu justicia(C).
Inclina a mí Tu oído, rescátame pronto(D);
Sé para mí roca fuerte(E),
Fortaleza para salvarme.
Porque Tú eres mi roca y mi fortaleza(F),
Y por amor de Tu nombre me conducirás y me guiarás(G).
Me sacarás de la red que en secreto me han tendido(H);
Porque Tú eres mi refugio(I).
En Tu mano encomiendo mi espíritu(J);
Tú me has redimido(K), oh Señor, Dios de verdad(L).

Aborrezco a los que confían en ídolos vanos(M);
Pero yo confío en el Señor(N).
Me gozaré y me alegraré en Tu misericordia(O),
Porque Tú has visto mi aflicción(P);
Has conocido las angustias de mi alma,
Y no me has entregado en manos del enemigo(Q);
Tú has puesto mis pies en lugar espacioso.

Ten piedad de mí, oh Señor, porque estoy en angustia(R);
Se consumen de sufrir mis ojos(S), mi alma y mis entrañas(T).
10 Pues mi vida se gasta en tristeza(U)
Y mis años en suspiros;
Mis fuerzas se agotan a causa de mi iniquidad(V),
Y se ha consumido mi cuerpo(W).
11 A causa de todos mis adversarios, he llegado a ser objeto de oprobio(X),
Especialmente para mis vecinos(Y),
Y causa de espanto para mis conocidos;
Los que me ven en la calle huyen de mí.
12 Como un muerto soy olvidado, sin ser recordado(Z),
Soy semejante a un vaso roto.
13 Porque he oído la calumnia de muchos(AA),
El terror está por todas partes(AB);
Mientras traman juntos contra mí(AC),
Planean quitarme la vida(AD).

14 Pero yo, oh Señor, en Ti confío;
Digo: «Tú eres mi Dios(AE)».
15 En Tu mano están mis años(AF);
Líbrame de la mano de mis enemigos, y de los que me persiguen(AG).
16 Haz resplandecer Tu rostro sobre Tu siervo(AH);
Sálvame en Tu misericordia(AI).
17 Oh Señor, no sea yo avergonzado(AJ), porque a Ti clamo;
Sean avergonzados los impíos(AK); que desciendan en silencio al Seol(AL).
18 Enmudezcan los labios mentirosos(AM),
Porque hablan arrogantes contra el justo(AN)
Con soberbia y desprecio(AO).

19 ¡Cuán grande es Tu bondad(AP),
Que has reservado para los que te temen,
Que has manifestado para los que en Ti se refugian(AQ),
Delante de los hijos de los hombres(AR)!
20 De las conspiraciones(AS) de los hombres Tú los escondes en lo secreto de Tu presencia(AT);
En un refugio los pondrás a cubierto de los enredos de las lenguas(AU).
21 Bendito sea el Señor(AV),
Porque ha hecho maravillosa Su misericordia para mí(AW) en ciudad asediada(AX).
22 Y yo alarmado, decía(AY):
«¡Cortado soy de delante de Tus ojos(AZ)!».
Sin embargo, Tú oíste la voz de mis súplicas
Cuando a Ti clamaba(BA).

23 ¡Amen al Señor, todos Sus santos(BB)!
El Señor preserva a los fieles(BC),
Pero les da su merecido a los que obran con soberbia(BD).
24 Esfuércense, y aliéntese su corazón(BE),
Todos ustedes que esperan en el Señor.

Declaración de confianza

Al músico principal. Salmo de David.

31 En ti, oh Jehová, he confiado; no sea yo confundido jamás;

Líbrame en tu justicia.

Inclina a mí tu oído, líbrame pronto;

Sé tú mi roca fuerte, y fortaleza para salvarme.

Porque tú eres mi roca y mi castillo;

Por tu nombre me guiarás y me encaminarás.

Sácame de la red que han escondido para mí,

Pues tú eres mi refugio.

En tu mano encomiendo mi espíritu;(A)

Tú me has redimido, oh Jehová, Dios de verdad.

Aborrezco a los que esperan en vanidades ilusorias;

Mas yo en Jehová he esperado.

Me gozaré y alegraré en tu misericordia,

Porque has visto mi aflicción;

Has conocido mi alma en las angustias.

No me entregaste en mano del enemigo;

Pusiste mis pies en lugar espacioso.

Ten misericordia de mí, oh Jehová, porque estoy en angustia;

Se han consumido de tristeza mis ojos, mi alma también y mi cuerpo.

10 Porque mi vida se va gastando de dolor, y mis años de suspirar;

Se agotan mis fuerzas a causa de mi iniquidad, y mis huesos se han consumido.

11 De todos mis enemigos soy objeto de oprobio,

Y de mis vecinos mucho más, y el horror de mis conocidos;

Los que me ven fuera huyen de mí.

12 He sido olvidado de su corazón como un muerto;

He venido a ser como un vaso quebrado.

13 Porque oigo la calumnia de muchos;

El miedo me asalta por todas partes,

Mientras consultan juntos contra mí

E idean quitarme la vida.

14 Mas yo en ti confío, oh Jehová;

Digo: Tú eres mi Dios.

15 En tu mano están mis tiempos;

Líbrame de la mano de mis enemigos y de mis perseguidores.

16 Haz resplandecer tu rostro sobre tu siervo;

Sálvame por tu misericordia.

17 No sea yo avergonzado, oh Jehová, ya que te he invocado;

Sean avergonzados los impíos, estén mudos en el Seol.

18 Enmudezcan los labios mentirosos,

Que hablan contra el justo cosas duras

Con soberbia y menosprecio.

19 ¡Cuán grande es tu bondad, que has guardado para los que te temen,

Que has mostrado a los que esperan en ti, delante de los hijos de los hombres!

20 En lo secreto de tu presencia los esconderás de la conspiración del hombre;

Los pondrás en un tabernáculo a cubierto de contención de lenguas.

21 Bendito sea Jehová,

Porque ha hecho maravillosa su misericordia para conmigo en ciudad fortificada.

22 Decía yo en mi premura: Cortado soy de delante de tus ojos;

Pero tú oíste la voz de mis ruegos cuando a ti clamaba.

23 Amad a Jehová, todos vosotros sus santos;

A los fieles guarda Jehová,

Y paga abundantemente al que procede con soberbia.

24 Esforzaos todos vosotros los que esperáis en Jehová,

Y tome aliento vuestro corazón.

Al director musical. Acompáñese con instrumentos de cuerda. De David.

61 Oh Dios, escucha mi clamor
    y atiende a mi oración.

Desde los confines de la tierra te invoco,
    pues mi corazón desfallece;
    llévame a una roca que es más alta que yo.
Porque tú eres mi refugio,
    mi torre fuerte contra el enemigo.

Anhelo habitar en tu santuario para siempre
    y refugiarme debajo de tus alas. Selah
Tú, oh Dios, has aceptado mis promesas
    y me has dado la herencia de quienes honran tu nombre.

Concédele al rey más años de vida;
    que sus años duren por generaciones.
Que reine siempre en tu presencia,
    y que tu gran amor y tu verdad lo protejan.

Así cantaré siempre salmos a tu nombre
    y cumpliré mis promesas día tras día.

Confianza en la protección de Dios

Para el director del coro. Sobre instrumentos de cuerdas. Salmo de David.

61 Oye, oh Dios, mi clamor(A);
atiende a mi oración(B).
Desde los confines de la tierra te invoco(C), cuando mi corazón desmaya(D).
Condúceme a la roca(E) que es más alta que yo.
Porque tú has sido refugio para mí(F),
torre fuerte frente al enemigo(G).
Que more yo[a] en tu tienda para siempre(H);
y me abrigue en el refugio de tus alas(I). (Selah[b])

Porque tú, oh Dios, has escuchado mis votos(J);
me has dado la heredad[c] de los que temen tu nombre(K).
Tú añadirás días[d] a los días del rey(L);
sus años serán como muchas generaciones.
Él reinará[e] para siempre delante de Dios(M);
concédele misericordia y fidelidad[f] para que lo guarden(N).
Así cantaré alabanzas a tu nombre(O) para siempre,
cumpliendo mis votos(P) día tras día.

Footnotes

  1. Salmos 61:4 O, peregrine
  2. Salmos 61:4 Posiblemente, Pausa, Crescendo, o Interludio
  3. Salmos 61:5 O, herencia
  4. Salmos 61:6 O, prolongarás
  5. Salmos 61:7 O, se sentará
  6. Salmos 61:7 O, verdad

Confianza en la protección de Dios

Para el director del coro. Sobre instrumentos de cuerdas. Salmo de David.

61 Oye, oh Dios, mi clamor(A);
Atiende a mi oración(B).
Desde los confines de la tierra te invoco(C), cuando mi corazón desmaya(D).
Condúceme a la roca(E) que es más alta que yo.
Porque Tú has sido refugio para mí(F),
Torre fuerte frente al enemigo(G).
Que more yo en Tu tienda para siempre(H);
Y me abrigue bajo el refugio de Tus alas(I). (Selah)

Porque Tú, oh Dios, has escuchado mis votos(J);
me has dado la heredad de los que temen Tu nombre(K).
Tú añadirás días a los días del rey(L);
Sus años serán como muchas generaciones.
Él reinará para siempre delante de Dios(M);
Concédele misericordia y fidelidad[a] para que lo guarden(N).
Así cantaré alabanzas a Tu nombre(O) para siempre,
Cumpliendo mis votos(P) día tras día.

Footnotes

  1. Salmos 61:7 O verdad.

Confianza en la protección de Dios

Al músico principal; sobre Neginot. Salmo de David.

61 Oye, oh Dios, mi clamor;

A mi oración atiende.

Desde el cabo de la tierra clamaré a ti, cuando mi corazón desmayare.

Llévame a la roca que es más alta que yo,

Porque tú has sido mi refugio,

Y torre fuerte delante del enemigo.

Yo habitaré en tu tabernáculo para siempre;

Estaré seguro bajo la cubierta de tus alas. Selah

Porque tú, oh Dios, has oído mis votos;

Me has dado la heredad de los que temen tu nombre.

Días sobre días añadirás al rey;

Sus años serán como generación y generación.

Estará para siempre delante de Dios;

Prepara misericordia y verdad para que lo conserven.

Así cantaré tu nombre para siempre,

Pagando mis votos cada día.

91 El que habita al abrigo del Altísimo
    descansará a la sombra del Todopoderoso.
Yo digo al Señor: «Tú eres mi refugio,
    mi fortaleza, el Dios en quien confío».

Solo él puede librarte
    de las trampas del cazador
    y de mortíferas plagas,
pues te cubrirá con sus plumas
    y bajo sus alas hallarás refugio.
    Su verdad será tu escudo y tu baluarte.
No temerás el terror de la noche
    ni la flecha que vuela de día
ni la plaga que acecha en las sombras
    ni la peste que destruye a mediodía.
Podrán caer a tu lado mil
    y diez mil a tu derecha,
    pero a ti no te afectará.
No tendrás más que abrir bien los ojos
    para ver a los impíos recibir su merecido.

Ya que has puesto al Señor por tu[a] refugio,
    al Altísimo por tu protección,
10 ningún mal habrá de sobrevenirte,
    ningún desastre llegará a tu hogar.
11 Porque él ordenará que sus ángeles
    te protejan en todos tus caminos.
12 Con sus propias manos te sostendrán
    para que no tropieces con piedra alguna.
13 Aplastarás al león y a la víbora;
    hollarás al cachorro de león y a la serpiente.

14 «Yo lo libraré, porque él me ama;
    lo protegeré, porque conoce mi nombre.
15 Él me invocará y yo le responderé;
    estaré con él en momentos de angustia,
    lo libraré y lo llenaré de honores.
16 Lo colmaré con muchos años de vida
    y le haré gozar de mi salvación».

Footnotes

  1. 91:9 tu. Lit. mi.

Seguridad del que confía en el Señor

91 El que habita al abrigo del Altísimo(A)
morará a la sombra del Omnipotente[a](B).
Diré yo al Señor: Refugio mío(C) y fortaleza mía(D),
mi Dios, en quien confío(E).
Porque Él te libra del lazo del cazador(F)
y de la pestilencia mortal(G).
Con sus plumas te cubre(H),
y bajo sus alas hallas refugio(I);
escudo y baluarte(J) es su fidelidad[b](K).

No temerás(L) el terror de la noche(M),
ni la flecha que vuela de día(N),
ni la pestilencia(O) que anda en tinieblas,
ni la destrucción(P) que hace estragos en medio del día.
Aunque caigan mil a tu lado
y diez mil a tu diestra,
a ti no se acercará(Q).
Con[c] tus ojos mirarás
y verás la paga de los impíos(R).
Porque has puesto al Señor, que es mi refugio[d](S),
al Altísimo, por tu habitación(T).
10 No te sucederá ningún mal(U),
ni plaga se acercará a tu morada[e].

11 Pues Él dará órdenes a sus ángeles acerca de ti(V),
para que te guarden en todos tus caminos.
12 En sus manos[f] te llevarán,
para que tu pie no tropiece en piedra(W).
13 Sobre el león y la cobra[g] pisarás(X);
hollarás al cachorro de león y a la serpiente[h].

14 Porque en mí ha puesto su amor(Y), yo entonces lo libraré;
lo exaltaré(Z), porque ha conocido mi nombre(AA).
15 Me invocará(AB), y le responderé;
yo estaré con él en la angustia;
lo rescataré y lo honraré(AC);
16 lo saciaré de larga vida[i](AD),
y le haré ver[j] mi salvación(AE).

Footnotes

  1. Salmos 91:1 Heb., Shaddai
  2. Salmos 91:4 O, verdad
  3. Salmos 91:8 Lit., solo con
  4. Salmos 91:9 O, Porque tú, oh Señor, eres mi refugio; tú has puesto
  5. Salmos 91:10 Lit., tienda
  6. Salmos 91:12 Lit., palmas
  7. Salmos 91:13 O, el áspid
  8. Salmos 91:13 O, al dragón
  9. Salmos 91:16 Lit., con largura de días
  10. Salmos 91:16 O, haré que se deleite en

Seguridad del que confía en el Señor

91 El que habita al amparo del Altísimo[a](A)
Morará a la sombra del Omnipotente(B).
Diré yo al Señor: «Refugio mío(C) y fortaleza mía(D),
Mi Dios, en quien confío(E)».
Porque Él te libra del lazo del cazador(F)
Y de la pestilencia mortal(G).
Con Sus plumas te cubre(H),
Y bajo Sus alas hallas refugio(I);
Escudo y baluarte(J) es Su fidelidad[b](K).

No temerás(L) el terror de la noche(M),
Ni la flecha que vuela de día(N),
Ni la pestilencia(O) que anda en tinieblas,
Ni la destrucción(P) que hace estragos en medio del día.
Aunque caigan mil a tu lado
Y diez mil a tu diestra,
A ti no se acercará(Q).
Con tus ojos mirarás
Y verás la paga de los impíos(R).
Porque has puesto al Señor, que es mi refugio(S),
Al Altísimo, por tu habitación(T).
10 No te sucederá ningún mal(U),
Ni plaga se acercará a tu morada.

11 Pues Él dará órdenes a Sus ángeles acerca de ti(V),
Para que te guarden en todos tus caminos.
12 En sus manos te llevarán,
Para que tu pie no tropiece en piedra(W).
13 Sobre el león y la cobra pisarás(X);
Pisotearás al cachorro de león y a la serpiente.

14 «Porque en Mí ha puesto su amor(Y), Yo entonces lo libraré;
Lo exaltaré(Z), porque ha conocido Mi nombre(AA).
15 Me invocará(AB), y le responderé;
Yo estaré con él en la angustia;
Lo rescataré y lo honraré(AC);
16 Lo saciaré de larga vida(AD),
Y le haré ver Mi salvación(AE)».

Footnotes

  1. Salmos 91:1 Heb. Shaddai.
  2. Salmos 91:4 O verdad.

Morando bajo la sombra del Omnipotente

91 El que habita al abrigo del Altísimo

Morará bajo la sombra del Omnipotente.

Diré yo a Jehová: Esperanza mía, y castillo mío;

Mi Dios, en quien confiaré.

Él te librará del lazo del cazador,

De la peste destructora.

Con sus plumas te cubrirá,

Y debajo de sus alas estarás seguro;

Escudo y adarga es su verdad.

No temerás el terror nocturno,

Ni saeta que vuele de día,

Ni pestilencia que ande en oscuridad,

Ni mortandad que en medio del día destruya.

Caerán a tu lado mil,

Y diez mil a tu diestra;

Mas a ti no llegará.

Ciertamente con tus ojos mirarás

Y verás la recompensa de los impíos.

Porque has puesto a Jehová, que es mi esperanza,

Al Altísimo por tu habitación,

10 No te sobrevendrá mal,

Ni plaga tocará tu morada.

11 Pues a sus ángeles mandará acerca de ti,(A)

Que te guarden en todos tus caminos.

12 En las manos te llevarán,

Para que tu pie no tropiece en piedra.(B)

13 Sobre el león y el áspid pisarás;

Hollarás al cachorro del león y al dragón.(C)

14 Por cuanto en mí ha puesto su amor, yo también lo libraré;

Le pondré en alto, por cuanto ha conocido mi nombre.

15 Me invocará, y yo le responderé;

Con él estaré yo en la angustia;

Lo libraré y le glorificaré.

16 Lo saciaré de larga vida,

Y le mostraré mi salvación.

Cántico de los peregrinos.

121 A las montañas levanto mis ojos;
    ¿de dónde ha de venir mi ayuda?
Mi ayuda proviene del Señor,
    que hizo el cielo y la tierra.

No permitirá que tu pie resbale;
    jamás duerme el que te cuida.
Jamás duerme ni se adormece
    el que cuida de Israel.

El Señor es quien te cuida;
    el Señor es tu sombra a tu mano derecha.
De día el sol no te hará daño
    ni la luna de noche.

El Señor te cuidará;
    de todo mal guardará tu vida.
El Señor cuidará tu salida y tu entrada,
    desde ahora y para siempre.

El Señor, guardador de Israel

Cántico de ascenso gradual[a].

121 Levantaré mis ojos(A) a los montes(B);
¿de dónde vendrá mi socorro?
Mi socorro viene del Señor(C),
que hizo los cielos y la tierra(D).
No permitirá que tu pie resbale(E);
no se adormecerá el que te guarda(F).
He aquí, no se adormecerá ni dormirá
el que guarda a Israel.

El Señor es tu guardador(G);
el Señor es tu sombra a tu mano derecha(H).
El sol no te herirá[b](I) de día,
ni la luna de noche.

El Señor te protegerá[c] de todo mal(J);
El guardará tu alma.
El Señor guardará tu salida y tu entrada
desde ahora y para siempre(K).

Footnotes

  1. Salmos 121:1 Véase la nota al subtítulo del Salmo 120
  2. Salmos 121:6 O, abrumará
  3. Salmos 121:7 O, guardará

El Señor, guardador de Israel

Cántico de ascenso gradual.

121 Levantaré mis ojos(A) a los montes(B);
¿De dónde vendrá mi ayuda?
Mi ayuda viene del Señor(C),
Que hizo los cielos y la tierra(D).
No permitirá que tu pie resbale(E);
No se adormecerá el que te guarda(F).
Jamás se adormecerá ni dormirá
El que guarda a Israel.

El Señor es tu guardador(G);
El Señor es tu sombra a tu mano derecha(H).
El sol no te herirá(I) de día,
Ni la luna de noche.

El Señor te protegerá de todo mal(J);
Él guardará tu alma.
El Señor guardará tu salida y tu entrada
Desde ahora y para siempre(K).

Jehová es tu guardador

Cántico gradual.

121 Alzaré mis ojos a los montes;

¿De dónde vendrá mi socorro?

Mi socorro viene de Jehová,

Que hizo los cielos y la tierra.

No dará tu pie al resbaladero,

Ni se dormirá el que te guarda.

He aquí, no se adormecerá ni dormirá

El que guarda a Israel.

Jehová es tu guardador;

Jehová es tu sombra a tu mano derecha.

El sol no te fatigará de día,

Ni la luna de noche.

Jehová te guardará de todo mal;

Él guardará tu alma.

Jehová guardará tu salida y tu entrada

Desde ahora y para siempre.

Prólogo: Propósito y tema

Proverbios de Salomón, hijo de David, rey de Israel:

para adquirir sabiduría y disciplina;
    para discernir palabras de inteligencia;
para recibir la corrección que dan la prudencia,
    la rectitud, la justicia y la equidad;
para infundir prudencia en los inexpertos,
    conocimiento y discreción en los jóvenes.
Escuche esto el sabio y aumente su saber;
    reciba dirección el entendido,
para discernir el proverbio y la parábola,
    los dichos de los sabios y sus enigmas.

El temor del Señor es el principio del conocimiento;
    los necios desprecian la sabiduría y la disciplina.

Exhortaciones a buscar la sabiduría

Advertencia contra el engaño

Hijo mío, escucha las correcciones de tu padre
    y no abandones las enseñanzas de tu madre.
Adornarán tu cabeza como una hermosa diadema;
    adornarán tu cuello como un collar.

10 Hijo mío, si los pecadores quieren engañarte,
    no vayas con ellos.
11 Estos te dirán:
    «¡Ven con nosotros!
Acechemos a algún inocente
    y démonos el gusto de matar a algún incauto;
12 traguémonos a alguien vivo,
    como se traga la muerte[a] a la gente;
devorémoslo entero,
    como devora la tumba a los muertos.
13 Obtendremos toda clase de riquezas;
    con el botín llenaremos nuestras casas.
14 Echa tu suerte con nosotros
    y compartiremos contigo lo que obtengamos».
15 ¡Pero no te dejes llevar por ellos,[b] hijo mío!
    ¡Apártate de sus senderos!
16 Pues corren presurosos a hacer lo malo;
    ¡tienen prisa por derramar sangre!
17 De nada sirve tender la red
    a la vista de todos los pájaros,
18 pero aquellos acechan su propia vida[c]
    y acabarán por destruirse a sí mismos.
19 Así terminan los que van tras ganancias mal habidas;
    por estas perderán la vida.

Advertencia contra el rechazo a la sabiduría

20 Clama la sabiduría en las calles;
    en los lugares públicos levanta su voz.
21 Clama en las esquinas de calles transitadas;
    a la entrada de la ciudad razona:

22 «¿Hasta cuándo, muchachos inexpertos,
    seguirán aferrados a su inexperiencia?
¿Hasta cuándo, ustedes los insolentes,
    se complacerán en su insolencia?
¿Hasta cuándo, ustedes los necios,
    aborrecerán el conocimiento?
23 ¡Respondan a mis reprensiones!
    Yo les compartiré mis pensamientos[d]
    y les daré a conocer mis enseñanzas.
24 Como ustedes no me escucharon cuando los llamé
    ni me hicieron caso cuando les tendí la mano,
25 sino que rechazaron todos mis consejos
    y no acataron mis reprensiones,
26 ahora yo voy a reírme de ustedes
    cuando caigan en desgracia.
Yo seré quien se ría de ustedes
    cuando les sobrevenga el miedo,
27 cuando el miedo les sobrevenga como una tormenta
    y la desgracia los arrastre como un torbellino.

28 »Entonces me llamarán, pero no les responderé;
    me buscarán, pero no me encontrarán.
29 Por cuanto aborrecieron el conocimiento
    y no quisieron temer al Señor;
30 por cuanto no siguieron mis consejos,
    sino que rechazaron mis reprensiones,
31 cosecharán el fruto de su conducta,
    se hartarán con sus propias intrigas;
32 su desobediencia e inexperiencia los destruirán,
    su complacencia y necedad los aniquilarán.
33 Pero el que me obedezca vivirá tranquilo,
    sosegado y sin temor del mal».

Footnotes

  1. 1:12 la muerte. Lit. el Seol.
  2. 1:15 no … por ellos. Lit. no vayas por sus caminos.
  3. 1:18 vida. Lit. sangre.
  4. 1:23 compartiré mis pensamientos. Lit. derramaré mi espíritu.

Propósito de los proverbios

Los proverbios de Salomón(A), hijo de David(B), rey de Israel:

para aprender[a] sabiduría(C) e instrucción,
para discernir dichos profundos[b](D),
para recibir instrucción en sabia conducta(E),
justicia, juicio y equidad(F);
para dar a los simples prudencia(G),
y a los jóvenes conocimiento y discreción(H).
El sabio oirá y crecerá en conocimiento(I),
y el inteligente(J) adquirirá habilidad,
para entender proverbio y metáfora[c],
las palabras de los sabios y sus enigmas(K).

El temor[d] del Señor es el principio de la sabiduría(L);
los necios desprecian la sabiduría y la instrucción.

Peligro de las malas compañías

Oye, hijo mío, la instrucción de tu padre(M),
y no abandones la enseñanza de tu madre(N);
porque guirnalda de gracia son para tu cabeza(O),
y collares para tu cuello(P).
10 Hijo mío, si los pecadores te quieren seducir[e](Q),
no consientas(R).
11 Si dicen: Ven con nosotros,
pongámonos al asecho para derramar sangre(S),
sin causa asechemos al inocente(T),
12 devorémoslos vivos(U) como el Seol,
enteros, como los que descienden al abismo(V);
13 hallaremos toda clase de preciadas riquezas,
llenaremos nuestras casas de botín;
14 echa tu suerte con[f] nosotros,
todos tendremos una bolsa;
15 hijo mío, no andes en el camino con ellos(W),
aparta tu pie de su senda(X),
16 porque sus pies corren hacia el mal,
y a derramar sangre se apresuran(Y).
17 Porque es en vano tender la red
ante los ojos de cualquier ave[g];
18 pero ellos a su propia sangre asechan,
tienden lazo a sus propias vidas(Z).
19 Tales son los caminos de todo el que se beneficia por la violencia:
que quita la vida de sus poseedores(AA).

Habla la sabiduría

20 (AB)La sabiduría clama en la calle,
en las plazas alza[h] su voz;
21 clama en las esquinas de las calles concurridas;
a la entrada de las puertas de la ciudad pronuncia sus discursos:
22 ¿Hasta cuándo, oh simples(AC), amaréis la simpleza,
y los burladores(AD) se deleitarán en hacer burla,
y los necios aborrecerán el conocimiento(AE)?
23 Volveos a mi reprensión:
he aquí, derramaré mi espíritu sobre vosotros(AF),
os haré conocer mis palabras.
24 Porque he llamado(AG) y habéis rehusado oír(AH),
he extendido mi mano(AI) y nadie ha hecho caso;
25 habéis desatendido todo consejo mío(AJ),
y no habéis deseado mi reprensión(AK);
26 también yo me reiré(AL) de vuestra calamidad(AM),
me burlaré cuando sobrevenga lo que teméis(AN),
27 cuando venga como tormenta lo que teméis,
y vuestra calamidad sobrevenga como torbellino(AO),
cuando vengan sobre vosotros tribulación y angustia.
28 Entonces me invocarán, pero no responderé(AP);
me buscarán con diligencia, pero no me hallarán(AQ);
29 porque odiaron el conocimiento(AR),
y no escogieron el temor[i] del Señor,
30 ni quisieron aceptar mi consejo,
y despreciaron toda mi reprensión(AS);
31 comerán del fruto de su conducta(AT),
y de sus propias artimañas se hartarán(AU).
32 Porque el desvío de los simples los matará,
y la complacencia de los necios los destruirá(AV).
33 Pero el que me escucha vivirá[j] seguro,
y descansará, sin temor al mal(AW).

Footnotes

  1. Proverbios 1:2 O, saber
  2. Proverbios 1:2 O, de entendimiento
  3. Proverbios 1:6 O, cualquier imagen literaria
  4. Proverbios 1:7 O, La reverencia
  5. Proverbios 1:10 O, te seducen
  6. Proverbios 1:14 Lit., en medio de
  7. Proverbios 1:17 Lit., poseedor de ala
  8. Proverbios 1:20 Lit., da
  9. Proverbios 1:29 O, la reverencia
  10. Proverbios 1:33 Lit., habitará

Propósito de los proverbios

Los proverbios de Salomón(A), hijo de David(B), rey de Israel:

Para aprender[a] sabiduría(C) e instrucción,
Para discernir dichos profundos[b](D),
Para recibir instrucción en sabia conducta(E),
Justicia, juicio y equidad(F);
Para dar a los simples prudencia(G),
Y a los jóvenes conocimiento y discreción(H).
El sabio oirá y crecerá en conocimiento(I),
Y el inteligente(J) adquirirá habilidad,
Para entender proverbio y metáfora[c],
Las palabras de los sabios y sus enigmas(K).

El temor del[d] Señor es el principio de la sabiduría(L);
Los necios desprecian la sabiduría y la instrucción.

Peligro de las malas compañías

Oye, hijo mío, la instrucción de tu padre(M)
Y no abandones la enseñanza de tu madre(N);
Porque son guirnalda de gracia para tu cabeza(O),
Y collares para tu cuello(P).
10 Hijo mío, si los pecadores te quieren seducir[e](Q),
No consientas(R).
11 Si dicen: «Ven con nosotros,
Pongámonos al acecho para derramar sangre(S),
Sin causa asechemos al inocente(T),
12 Devorémoslos vivos(U) como el Seol,
Enteros, como los que descienden al abismo(V);
13 Hallaremos toda clase de preciadas riquezas,
Llenaremos nuestras casas de botín;
14 Echa tu suerte con[f] nosotros,
Todos tendremos una bolsa»,
15 Hijo mío, no andes en el camino con ellos(W).
Aparta tu pie de su senda(X),
16 Porque sus pies corren hacia el mal,
Y se apresuran a derramar sangre(Y).
17 Porque es en vano tender la red
Ante los ojos de cualquier ave[g];
18 Pero ellos a su propia sangre asechan,
Tienden lazo a sus propias vidas(Z).
19 Tales son los caminos de todo el que se beneficia por la violencia:
Que quita la vida de sus poseedores(AA).

Habla la sabiduría

20 (AB)La sabiduría clama en la calle,
En las plazas alza[h] su voz;
21 Clama en las esquinas de las calles concurridas;
A la entrada de las puertas de la ciudad pronuncia sus discursos:
22 «¿Hasta cuándo, oh simples(AC), amarán la simpleza,
Y los burladores(AD) se deleitarán en hacer burla,
Y los necios aborrecerán el conocimiento(AE)?
23 Vuélvanse a mi reprensión,
Y derramaré mi espíritu sobre ustedes(AF);
Les haré conocer mis palabras.
24 Porque he llamado(AG) y han rehusado oír(AH),
He extendido mi mano(AI) y nadie ha hecho caso.
25 Han desatendido todo consejo mío(AJ)
Y no han deseado mi reprensión(AK).
26 También yo me reiré(AL) de la calamidad(AM) de ustedes,
Me burlaré cuando sobrevenga lo que temen(AN),
27 Cuando venga como tormenta lo que temen
Y su calamidad sobrevenga como torbellino(AO),
Cuando vengan sobre ustedes tribulación y angustia.
28 Entonces me invocarán, pero no responderé(AP);
Me buscarán con diligencia, pero no me hallarán(AQ),
29 Porque odiaron el conocimiento(AR),
Y no escogieron el temor[i] del Señor,
30 Ni quisieron aceptar mi consejo,
Y despreciaron toda mi reprensión(AS).
31 Comerán del fruto de su conducta(AT),
Y de sus propias artimañas se hartarán(AU).
32 Porque el desvío de los simples los matará,
Y la complacencia de los necios los destruirá(AV).
33 Pero el que me escucha vivirá[j] seguro,
Y descansará, sin temor al mal(AW)».

Footnotes

  1. Proverbios 1:2 O saber.
  2. Proverbios 1:2 O de entendimiento.
  3. Proverbios 1:6 O cualquier imagen literaria.
  4. Proverbios 1:7 O La reverencia al.
  5. Proverbios 1:10 O te seducen.
  6. Proverbios 1:14 Lit. en medio de.
  7. Proverbios 1:17 Lit. poseedor de ala.
  8. Proverbios 1:20 Lit. da.
  9. Proverbios 1:29 O la reverencia.
  10. Proverbios 1:33 Lit. habitará.

Motivo de los proverbios

Los proverbios de Salomón,(A) hijo de David, rey de Israel.

Para entender sabiduría y doctrina,

Para conocer razones prudentes,

Para recibir el consejo de prudencia,

Justicia, juicio y equidad;

Para dar sagacidad a los simples,

Y a los jóvenes inteligencia y cordura.

Oirá el sabio, y aumentará el saber,

Y el entendido adquirirá consejo,

Para entender proverbio y declaración,

Palabras de sabios, y sus dichos profundos.

El principio de la sabiduría es el temor de Jehová;(B)

Los insensatos desprecian la sabiduría y la enseñanza.

Amonestaciones de la Sabiduría

Oye, hijo mío, la instrucción de tu padre,

Y no desprecies la dirección de tu madre;

Porque adorno de gracia serán a tu cabeza,

Y collares a tu cuello.

10 Hijo mío, si los pecadores te quisieren engañar,

No consientas.

11 Si dijeren: Ven con nosotros;

Pongamos asechanzas para derramar sangre,

Acechemos sin motivo al inocente;

12 Los tragaremos vivos como el Seol,

Y enteros, como los que caen en un abismo;

13 Hallaremos riquezas de toda clase,

Llenaremos nuestras casas de despojos;

14 Echa tu suerte entre nosotros;

Tengamos todos una bolsa.

15 Hijo mío, no andes en camino con ellos.

Aparta tu pie de sus veredas,

16 Porque sus pies corren hacia el mal,

Y van presurosos a derramar sangre.

17 Porque en vano se tenderá la red

Ante los ojos de toda ave;

18 Pero ellos a su propia sangre ponen asechanzas,

Y a sus almas tienden lazo.

19 Tales son las sendas de todo el que es dado a la codicia,

La cual quita la vida de sus poseedores.

20 La sabiduría clama en las calles,

Alza su voz en las plazas;

21 Clama en los principales lugares de reunión;

En las entradas de las puertas de la ciudad dice sus razones.(C)

22 ¿Hasta cuándo, oh simples, amaréis la simpleza,

Y los burladores desearán el burlar,

Y los insensatos aborrecerán la ciencia?

23 Volveos a mi reprensión;

He aquí yo derramaré mi espíritu sobre vosotros,

Y os haré saber mis palabras.

24 Por cuanto llamé, y no quisisteis oír,

Extendí mi mano, y no hubo quien atendiese,

25 Sino que desechasteis todo consejo mío

Y mi reprensión no quisisteis,

26 También yo me reiré en vuestra calamidad,

Y me burlaré cuando os viniere lo que teméis;

27 Cuando viniere como una destrucción lo que teméis,

Y vuestra calamidad llegare como un torbellino;

Cuando sobre vosotros viniere tribulación y angustia.

28 Entonces me llamarán, y no responderé;

Me buscarán de mañana, y no me hallarán.

29 Por cuanto aborrecieron la sabiduría,

Y no escogieron el temor de Jehová,

30 Ni quisieron mi consejo,

Y menospreciaron toda reprensión mía,

31 Comerán del fruto de su camino,

Y serán hastiados de sus propios consejos.

32 Porque el desvío de los ignorantes los matará,

Y la prosperidad de los necios los echará a perder;

33 Mas el que me oyere, habitará confiadamente

Y vivirá tranquilo, sin temor del mal.