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La sabiduría y la insensatez

La sabiduría ha edificado su casa(A),
Ha labrado sus siete columnas;
Ha preparado su alimento[a](B), ha mezclado su vino(C),
Ha puesto también su mesa(D);
Ha enviado a sus doncellas(E), y clama
Desde los lugares más altos de la ciudad(F):
«El que sea simple(G) que entre aquí».
Al falto de entendimiento[b] le dice(H):
«Ven, come de mi pan,
Y bebe del vino que he mezclado(I).
-»Abandona la necedad[c] y vivirás(J);
Anda por el camino del entendimiento(K)».
¶El que instruye al insolente, atrae sobre sí deshonra,
Y el que reprende al impío recibe insultos[d](L).
No reprendas al insolente, para que no te aborrezca(M);
Reprende al sabio, y te amará(N).
Da instrucción al sabio, y será aún más sabio,
Enseña al justo, y aumentará su saber(O).
10 El principio de la sabiduría es el temor[e] del Señor,
Y el conocimiento del Santo es inteligencia(P).
11 Pues por mí se multiplicarán tus días,
Y años de vida te serán añadidos(Q).
12 Si eres sabio, eres sabio para provecho tuyo(R),
Y si escarneces, tú solo lo sufrirás(S).
13 ¶La mujer insensata es alborotadora(T),
Es simple y no sabe nada(U).
14 Se sienta a la puerta de su casa,
En un asiento, en los lugares altos de la ciudad(V),
15 Llamando a los que pasan,
A los que van derechos por sus sendas:
16 «El que sea simple, que entre aquí».
Y al falto de entendimiento[f], le dice(W):
17 «Dulces son las aguas hurtadas,
Y el pan comido en secreto es sabroso(X)».
18 Pero él no sabe que allí están los muertos[g],
Que sus invitados están en las profundidades del Seol(Y).

Footnotes

  1. 9:2 Lit. ha matado sus víctimas.
  2. 9:4 Lit. corazón.
  3. 9:6 O a los simples.
  4. 9:7 Lit. una mancha.
  5. 9:10 O la reverencia.
  6. 9:16 Lit. corazón.
  7. 9:18 Lit. las sombras.
'משלי 9 ' not found for the version: Habrit Hakhadasha/Haderekh.

Contraste entre la sabiduría y la necedad

La sabiduría construyó su casa,
la adornó con siete columnas;
mató animales para el banquete,
preparó un vino especial,
puso la mesa
y envió a sus criadas a gritar
desde lo alto de la ciudad:
«¡Vengan acá, jóvenes inexpertos!»
Mandó a decir a los imprudentes:
«Vengan a comer de mi pan
y a beber del vino que he preparado.
Dejen de ser imprudentes, y vivirán;
condúzcanse como gente inteligente.»

Corrige al insolente y malvado,
y sólo lograrás que te insulte y ofenda.

Reprende al insolente y te ganarás su odio;
corrige al sabio y te ganarás su aprecio.

Dale al sabio y se hará más sabio;
enseña al hombre bueno y aumentará su saber.

10 La sabiduría comienza por honrar al Señor;
conocer al Santísimo es tener inteligencia.

11 Gracias a la sabiduría, vivirás mucho tiempo
y aumentarán los años de tu vida.
12 Si eres sabio, tuyo será el provecho;
si eres insolente, tuya será la responsabilidad.

13 La necedad es como una mujer chismosa,
tonta e ignorante.
14 Se sienta en una silla, a las puertas de su casa,
en la parte más alta de la ciudad,
15 y llama a los caminantes
que van por buen camino:
16 «¡Vengan acá, jóvenes inexpertos!»
Manda a decir a los imprudentes:
17 «El agua robada es más sabrosa;
el pan comido a escondidas sabe mejor.»
18 Pero ellos no saben que sus invitados
son ahora sombras en el reino de la muerte.