Dichos de Agur

30 Dichos de Agur, hijo de Jaqué. Mensaje.[a]

Palabras de este varón:

«Cansado estoy, oh Dios;
    cansado estoy, oh Dios, y débil.[b]
Soy el más ignorante de todos los hombres;
    no hay en mí discernimiento humano.
No he adquirido sabiduría
    ni tengo conocimiento del Dios Santo.
¿Quién ha subido a los cielos
    y descendido de ellos?
¿Quién puede atrapar el viento en sus manos
    o envolver el mar en su manto?
¿Quién ha establecido los límites de la tierra?
    ¿Quién conoce su nombre o el de su hijo?
Seguramente tú lo sabes.

»Toda palabra de Dios es purificada;
    Dios es escudo a los que en él buscan refugio.
No añadas nada a sus palabras,
    no sea que te reprenda y te exponga como a un mentiroso.

»Solo dos cosas te pido, Dios;
    no me las niegues antes de que muera:
Aleja de mí la falsedad y la mentira;
    no me des pobreza ni riquezas,
    sino solo el pan de cada día.
Porque teniendo mucho, podría desconocerte
    y decir: “¿Y quién es el Señor?”.
Y teniendo poco, podría llegar a robar
    y deshonrar así el nombre de mi Dios.

10 »No ofendas al esclavo delante de su amo,
    pues podría maldecirte y sufrirías las consecuencias.

11 »Hay quienes maldicen a su padre
    y no bendicen a su madre.
12 Hay quienes se creen muy puros,
    pero no se han purificado de su impureza.
13 Hay quienes se creen muy importantes
    y a todos miran con desdén.
14 Hay quienes tienen espadas por dientes
    y cuchillos por mandíbulas;
para devorar a los pobres de la tierra
    y a los menesterosos de este mundo.

15 »La sanguijuela tiene dos hijas
    que solo dicen: “Dame, dame”.

»Tres cosas hay que nunca se sacian

y una cuarta que nunca dice “¡Basta!”:

16 el sepulcro,[c]

el vientre estéril,

la tierra, que nunca se sacia de agua,

y el fuego, que nunca dice “¡Basta!”.

17 »Al que mira con desdén a su padre
    y desprecia a su anciana madre,
que los cuervos del valle le saquen los ojos
    y que se lo coman los buitres.

18 »Tres cosas hay que me causan asombro

y una cuarta que no alcanzo a comprender:

19 el rastro del águila en el cielo,

el rastro de la serpiente en la roca,

el rastro del barco en alta mar

y el rastro del hombre en la mujer joven.

20 »Así procede la adúltera:
    come, se limpia la boca
    y afirma: “Nada malo he cometido”.

21 »Tres cosas hacen temblar la tierra

y una cuarta la hace estremecer:

22 el siervo que llega a ser rey,

el necio al que le sobra comida,

23 la mujer rechazada que llega a casarse

y la criada que suplanta a su señora.

24 »Cuatro cosas hay pequeñas en el mundo,

pero que son más sabias que los sabios:

25 las hormigas, animalitos de escasas fuerzas,

pero que almacenan su comida en el verano;

26 los tejones, animalitos de poca monta,

pero que construyen su casa entre las rocas;

27 las langostas, que no tienen rey,

pero que avanzan en formación perfecta;

28 las lagartijas, que se atrapan con la mano,

pero habitan hasta en los palacios de reyes.

29 »Tres cosas hay que caminan con elegancia

y una cuarta de paso imponente:

30 el león, poderoso entre las bestias, que no retrocede ante nada;

31 el gallo altivo,[d]

el macho cabrío

y el rey al frente de su ejército.[e]

32 »Si como un necio te has engreído
    o si algo maquinas, ponte a pensar[f]
33 que batiendo la leche se obtiene mantequilla,
    que sonándose fuerte sangra la nariz
    y que provocando la ira se acaba peleando».

Dichos del rey Lemuel

31 Los dichos del rey Lemuel. Mensaje mediante el cual[g] su madre lo instruyó:

«¿Qué pasa, hijo mío?
    ¿Qué pasa, hijo de mis entrañas?
    ¿Qué pasa, fruto de mis promesas?[h]
No gastes tu vigor en las mujeres
    ni tu fuerza en las que arruinan a los reyes.

»No conviene que los reyes, Lemuel,
    no conviene que los reyes se den al vino
    ni que los gobernantes se entreguen a la cerveza;
no sea que al beber se olviden de lo que la ley ordena
    y priven de sus derechos a todos los oprimidos.
Dales cerveza a los que están por morir
    y vino a los amargados;
¡que beban y se olviden de su pobreza!
    ¡que no vuelvan a acordarse de sus penas!

»¡Levanta la voz por los que no tienen voz!
    ¡Defiende los derechos de los desposeídos!
¡Levanta la voz y hazles justicia!
    ¡Defiende a los pobres y necesitados!».

Epílogo: Acróstico a la mujer ejemplar[i]

Álef

10 Mujer ejemplar,[j] ¿dónde se hallará?
    ¡Es más valiosa que las piedras preciosas!

Bet

11 Su esposo confía plenamente en ella
    y no le faltarán ganancias.

Guímel

12 Ella le es fuente de bien, no de mal,
    todos los días de su vida.

Dálet

13 Anda en busca de lana y de lino,
    y gustosa trabaja con sus manos.

He

14 Es como los barcos mercantes,
    que traen de muy lejos su alimento.

Vav

15 Se levanta de madrugada,
    da de comer a su familia
    y asigna tareas a sus criadas.

Zayin

16 Calcula el valor de un campo y lo compra;
    con sus ganancias[k] planta un viñedo.

Jet

17 Decidida se ciñe la cintura,[l]
    pues sus brazos están fuertes para el trabajo.

Tet

18 Se complace en la prosperidad de sus negocios;
    no se apaga su lámpara en la noche.

Yod

19 Con sus manos sostiene el telar
    y con sus dedos maneja el hilo.

Caf

20 Tiende la mano al pobre
    y con ella sostiene al necesitado.

Lámed

21 Si nieva, no tiene que preocuparse de su familia,
    pues todos están bien abrigados.

Mem

22 Prepara las mantas para su cama;
    se viste de lana color púrpura y tela de lino fino.

Nun

23 Su esposo es respetado en las puertas de la ciudad;
    ocupa un puesto entre las autoridades del lugar.

Sámej

24 Confecciona ropa de lino y la vende;
    provee cinturones a los comerciantes.

Ayin

25 Se reviste de fuerza y dignidad
    y afronta segura el porvenir.

Pe

26 Cuando habla, lo hace con sabiduría;
    cuando instruye, lo hace con amor.

Tsade

27 Está atenta a la marcha de su hogar
    y el pan que come no es fruto del ocio.

Qof

28 Sus hijos se levantan y la felicitan;
    también su esposo la alaba:

Resh

29 «Muchas mujeres han realizado proezas,
    pero tú las superas a todas».

Shin

30 Engañoso es el encanto y pasajera la belleza;
    la mujer que teme al Señor es digna de alabanza.

Tav

31 ¡Sean reconocidos[m] sus logros
    y en las puertas de la ciudad sean alabadas sus obras!

Footnotes

  1. 30:1 hijo de Jaqué. Mensaje. Alt. hijo de Jaqué de Masa.
  2. 30:1 Cansado … y débil. Alt. A Itiel, a Itiel y a Ucal.
  3. 30:16 sepulcro. Lit. Seol.
  4. 30:31 el gallo altivo. Lit. el apretado de hombros.
  5. 30:31 el rey … ejército. Alt. el rey contra quien su pueblo no se subleva.
  6. 30:32 ponte a pensar. Lit. mano a la boca.
  7. 31:1 Lemuel. … cual. Alt. Lemuel de Masa, mediante los cuales.
  8. 31:2 fruto de mis promesas? Alt. respuesta a mis oraciones.
  9. 31:10-31 Los vv. 10-31 son un acróstico, en que cada verso comienza con una de las letras del alfabeto hebreo.
  10. 31:10 ejemplar. Alt. fuerte.
  11. 31:16 sus ganancias. Lit. el fruto de sus manos.
  12. 31:17 se ciñe la cintura. Lit. se ciñe con fuerza sus lomos.
  13. 31:31 Sean reconocidos. Alt. Denle.

Palabras de Agur

30 Palabras de Agur, hijo de Jaqué: el oráculo[a].

Declaración del hombre a Itiel, a Itiel y a Ucal.

Ciertamente soy el más torpe(A) de los hombres,
y no tengo inteligencia humana.
Y no he aprendido sabiduría,
ni tengo conocimiento del Santo(B).
¿Quién subió al cielo y descendió(C)?
¿Quién recogió los vientos(D) en sus puños?
¿Quién envolvió las aguas en su[b] manto(E)?
¿Quién estableció todos los confines de la tierra(F)?
¿Cuál es su nombre(G) o el nombre de su hijo?
Ciertamente tú lo sabes.

Probada es toda palabra de Dios(H);
Él es escudo para los que en Él se refugian(I).
No añadas a sus palabras(J),
no sea que Él te reprenda y seas hallado mentiroso.

Dos cosas te he pedido,
no me las niegues antes que muera:
Aleja de mí la mentira y las palabras engañosas,
no me des pobreza ni riqueza;
dame a comer mi porción de pan(K),
no sea que me sacie(L) y te niegue, y diga:
¿Quién es el Señor(M)?,
o que sea menesteroso y robe(N),
y profane el nombre de mi Dios(O).

10 No difames al esclavo ante su amo,
no sea que te acuse[c](P) y seas hallado culpable.

11 Hay gente[d] que maldice a su padre,
y no bendice a su madre(Q);
12 gente que se tiene por pura[e](R),
pero no está limpia de su inmundicia;
13 gente de ojos altivos(S),
cuyos[f] párpados se alzan en arrogancia;
14 gente cuyos dientes son espadas(T),
y sus muelas(U) cuchillos,
para devorar a los pobres de la tierra(V),
y a los menesterosos de entre los hombres.

15 La sanguijuela tiene dos hijas, que dicen: ¡Dame! ¡Dame!
Hay tres cosas que no se saciarán,
y una cuarta que no dirá: ¡Basta!
16 El Seol[g](W), la matriz estéril(X),
la tierra que jamás se sacia de agua,
y el fuego que nunca dice: ¡Basta!
17 Al ojo que se mofa del padre(Y),
y escarnece[h] a la madre(Z),
lo sacarán los cuervos del valle,
y lo comerán los aguiluchos(AA).

18 Hay tres cosas que son incomprensibles para mí,
y una cuarta que no entiendo:
19 el camino del águila en el cielo(AB),
el camino de la serpiente sobre la roca,
el camino del barco en medio del mar,
y el camino del hombre en la doncella.
20 Así es el camino de la mujer adúltera(AC):
come, se limpia la boca,
y dice: No he hecho nada malo.

21 Por tres cosas tiembla la tierra,
y por una cuarta no se puede sostener:
22 por el esclavo cuando llega a ser rey(AD),
por el necio cuando se sacia de pan,
23 por la mujer odiada cuando se casa,
y por la sierva cuando suplanta a su señora.

24 Cuatro cosas son pequeñas en la tierra,
pero son sumamente sabias:
25 las hormigas(AE), pueblo sin fuerza,
que preparan su alimento en el verano;
26 los tejones(AF), pueblo sin poder,
que hacen su casa en la peña;
27 las langostas, que no tienen rey,
pero todas salen en escuadrones(AG);
28 y el lagarto, que se puede agarrar con las manos,
pero está en los palacios de los reyes.

29 Hay tres cosas majestuosas en su marcha,
y una cuarta de elegante caminar:
30 el león, poderoso entre las fieras(AH),
que no retrocede ante ninguna(AI);
31 el gallo, que se pasea erguido[i], asimismo el macho cabrío,
y el rey cuando tiene el ejército con él.

32 Si has sido necio en ensalzarte,
o si has tramado el mal, pon la mano sobre tu boca(AJ);
33 porque batiendo la leche se saca[j] mantequilla,
y apretando la nariz sale sangre,
y forzando[k] la ira se produce[l] contienda(AK).

Palabras del rey Lemuel

31 Palabras del rey Lemuel, oráculo[m] que le enseñó su madre.

¿Qué, hijo mío?
¿Qué, hijo de mis entrañas[n](AL)?
¿Qué, hijo de mis votos(AM)?
No des tu vigor a las mujeres(AN),
ni tus caminos a lo que destruye a los reyes(AO).
No es para los reyes, oh Lemuel,
no es para los reyes(AP) beber vino(AQ),
ni para los gobernantes desear bebida fuerte;
no sea que beban y olviden lo que se ha decretado,
y perviertan los derechos[o] de todos los afligidos[p](AR).
Dad bebida fuerte al que está pereciendo(AS),
y vino a los amargados de alma(AT).
Que beba y se olvide de su pobreza,
y no recuerde más su aflicción.
(AU)Abre tu boca por los mudos,
por los derechos[q] de todos los desdichados[r].
Abre tu boca, juzga con justicia(AV),
y defiende los derechos del[s] afligido y del necesitado(AW).

Elogio de la mujer hacendosa

10 Mujer hacendosa[t](AX), ¿quién la hallará?
Su valor supera en mucho al de las joyas(AY).
11 En ella confía el corazón de su marido,
y no carecerá de ganancias.
12 Ella le trae bien y no mal
todos los días de su vida.
13 Busca lana y lino,
y con agrado[u] trabaja con sus manos[v].
14 Es como las naves de mercader(AZ),
trae su alimento de lejos.
15 También se levanta cuando aún es de noche(BA),
y da alimento a los de su casa(BB),
y tarea[w] a sus doncellas.
16 Evalúa un campo y lo compra;
con sus ganancias[x] planta una viña.
17 Ella se ciñe[y](BC) de fuerza,
y fortalece sus brazos.
18 Nota que su ganancia es buena,
no se apaga de noche su lámpara.
19 Extiende sus manos a la rueca,
y sus manos[z] toman el huso.
20 Extiende su mano[aa] al pobre,
y alarga sus manos al necesitado(BD).
21 No tiene temor de la nieve por los de su casa,
porque todos los de su casa llevan ropa escarlata[ab](BE).
22 Se hace mantos(BF) para sí;
su ropa es de lino fino(BG) y de púrpura(BH).
23 Su marido es conocido en las puertas(BI),
cuando se sienta con los ancianos de la tierra.
24 Hace telas de lino(BJ) y las vende,
y provee[ac] cinturones a los mercaderes[ad].
25 Fuerza y dignidad son su vestidura(BK),
y sonríe al futuro[ae].
26 Abre su boca con sabiduría(BL),
y hay enseñanza[af] de bondad en su lengua.
27 Ella vigila la marcha de su casa,
y no come el pan de la ociosidad(BM).
28 Sus hijos se levantan y la llaman bienaventurada,
también su marido, y la alaba diciendo:
29 Muchas mujeres[ag] han obrado con nobleza,
pero tú las superas a todas.
30 Engañosa es la gracia y vana la belleza,
pero la mujer que teme[ah] al Señor(BN), esa será alabada.
31 Dadle el fruto de sus manos,
y que sus obras la alaben en las puertas.

Footnotes

  1. Proverbios 30:1 O, la carga
  2. Proverbios 30:4 Lit., el
  3. Proverbios 30:10 Lit., maldiga
  4. Proverbios 30:11 Lit., generación, y así en los vers. 12, 13 y 14
  5. Proverbios 30:12 Lit., pura en sus propios ojos
  6. Proverbios 30:13 Lit., y sus
  7. Proverbios 30:16 I.e., región de los muertos
  8. Proverbios 30:17 Lit., desdeña obedecer
  9. Proverbios 30:31 Lit., el ceñido de lomos
  10. Proverbios 30:33 O, sale
  11. Proverbios 30:33 Lit., apretando
  12. Proverbios 30:33 O, sale
  13. Proverbios 31:1 O, la carga
  14. Proverbios 31:2 O, mi vientre
  15. Proverbios 31:5 Lit., el juicio
  16. Proverbios 31:5 Lit., hijos de aflicción
  17. Proverbios 31:8 Lit., el juicio
  18. Proverbios 31:8 Lit., los hijos del fenecimiento
  19. Proverbios 31:9 Lit., juzga al
  20. Proverbios 31:10 O, fuerte
  21. Proverbios 31:13 O, voluntad
  22. Proverbios 31:13 Lit., palmas
  23. Proverbios 31:15 O, porción asignada
  24. Proverbios 31:16 Lit., el fruto de sus palmas
  25. Proverbios 31:17 Lit., ciñe sus lomos
  26. Proverbios 31:19 Lit., palmas
  27. Proverbios 31:20 Lit., palma
  28. Proverbios 31:21 Algunas versiones dicen: ropas dobles
  29. Proverbios 31:24 Lit., da
  30. Proverbios 31:24 Lit., al cananeo
  31. Proverbios 31:25 Lit., día postrero
  32. Proverbios 31:26 O, ley
  33. Proverbios 31:29 Lit., hijas
  34. Proverbios 31:30 O, reverencia

Las palabras de Agur

30 Palabras de Agur, hijo de Jaqué; la profecía que dijo el varón a Itiel, a Itiel y a Ucal.

Ciertamente más rudo soy yo que ninguno,

Ni tengo entendimiento de hombre.

Yo ni aprendí sabiduría,

Ni conozco la ciencia del Santo.

¿Quién subió al cielo, y descendió?

¿Quién encerró los vientos en sus puños?

¿Quién ató las aguas en un paño?

¿Quién afirmó todos los términos de la tierra?

¿Cuál es su nombre, y el nombre de su hijo, si sabes?

Toda palabra de Dios es limpia;

Él es escudo a los que en él esperan.

No añadas a sus palabras, para que no te reprenda,

Y seas hallado mentiroso.

Dos cosas te he demandado;

No me las niegues antes que muera:

Vanidad y palabra mentirosa aparta de mí;

No me des pobreza ni riquezas;

Manténme del pan necesario;

No sea que me sacie, y te niegue, y diga: ¿Quién es Jehová?

O que siendo pobre, hurte,

Y blasfeme el nombre de mi Dios.

10 No acuses al siervo ante su señor,

No sea que te maldiga, y lleves el castigo.

11 Hay generación que maldice a su padre

Y a su madre no bendice.

12 Hay generación limpia en su propia opinión,

Si bien no se ha limpiado de su inmundicia.

13 Hay generación cuyos ojos son altivos

Y cuyos párpados están levantados en alto.

14 Hay generación cuyos dientes son espadas, y sus muelas cuchillos,

Para devorar a los pobres de la tierra, y a los menesterosos de entre los hombres.

15 La sanguijuela tiene dos hijas que dicen: ¡Dame! ¡dame!

Tres cosas hay que nunca se sacian;

Aun la cuarta nunca dice: ¡Basta!

16 El Seol, la matriz estéril,

La tierra que no se sacia de aguas,

Y el fuego que jamás dice: ¡Basta!

17 El ojo que escarnece a su padre

Y menosprecia la enseñanza de la madre,

Los cuervos de la cañada lo saquen,

Y lo devoren los hijos del águila.

18 Tres cosas me son ocultas;

Aun tampoco sé la cuarta:

19 El rastro del águila en el aire;

El rastro de la culebra sobre la peña;

El rastro de la nave en medio del mar;

Y el rastro del hombre en la doncella.

20 El proceder de la mujer adúltera es así:

Come, y limpia su boca

Y dice: No he hecho maldad.

21 Por tres cosas se alborota la tierra,

Y la cuarta ella no puede sufrir:

22 Por el siervo cuando reina;

Por el necio cuando se sacia de pan;

23 Por la mujer odiada cuando se casa;

Y por la sierva cuando hereda a su señora.

24 Cuatro cosas son de las más pequeñas de la tierra,

Y las mismas son más sabias que los sabios:

25 Las hormigas, pueblo no fuerte,

Y en el verano preparan su comida;

26 Los conejos, pueblo nada esforzado,

Y ponen su casa en la piedra;

27 Las langostas, que no tienen rey,

Y salen todas por cuadrillas;

28 La araña que atrapas con la mano,

Y está en palacios de rey.

29 Tres cosas hay de hermoso andar,

Y la cuarta pasea muy bien:

30 El león, fuerte entre todos los animales,

Que no vuelve atrás por nada;

31 El ceñido de lomos; asimismo el macho cabrío;

Y el rey, a quien nadie resiste.

32 Si neciamente has procurado enaltecerte,

O si has pensado hacer mal,

Pon el dedo sobre tu boca.

33 Ciertamente el que bate la leche sacará mantequilla,

Y el que recio se suena las narices sacará sangre;

Y el que provoca la ira causará contienda.

Exhortación a un rey

31 Palabras del rey Lemuel; la profecía con que le enseñó su madre.

¿Qué, hijo mío? ¿y qué, hijo de mi vientre?

¿Y qué, hijo de mis deseos?

No des a las mujeres tu fuerza,

Ni tus caminos a lo que destruye a los reyes.

No es de los reyes, oh Lemuel, no es de los reyes beber vino,

Ni de los príncipes la sidra;

No sea que bebiendo olviden la ley,

Y perviertan el derecho de todos los afligidos.

Dad la sidra al desfallecido,

Y el vino a los de amargado ánimo.

Beban, y olvídense de su necesidad,

Y de su miseria no se acuerden más.

Abre tu boca por el mudo

En el juicio de todos los desvalidos.

Abre tu boca, juzga con justicia,

Y defiende la causa del pobre y del menesteroso.

Elogio de la mujer virtuosa

10 Mujer virtuosa, ¿quién la hallará?

Porque su estima sobrepasa largamente a la de las piedras preciosas.

11 El corazón de su marido está en ella confiado,

Y no carecerá de ganancias.

12 Le da ella bien y no mal

Todos los días de su vida.

13 Busca lana y lino,

Y con voluntad trabaja con sus manos.

14 Es como nave de mercader;

Trae su pan de lejos.

15 Se levanta aun de noche

Y da comida a su familia

Y ración a sus criadas.

16 Considera la heredad, y la compra,

Y planta viña del fruto de sus manos.

17 Ciñe de fuerza sus lomos,

Y esfuerza sus brazos.

18 Ve que van bien sus negocios;

Su lámpara no se apaga de noche.

19 Aplica su mano al huso,

Y sus manos a la rueca.

20 Alarga su mano al pobre,

Y extiende sus manos al menesteroso.

21 No tiene temor de la nieve por su familia,

Porque toda su familia está vestida de ropas dobles.

22 Ella se hace tapices;

De lino fino y púrpura es su vestido.

23 Su marido es conocido en las puertas,

Cuando se sienta con los ancianos de la tierra.

24 Hace telas, y vende,

Y da cintas al mercader.

25 Fuerza y honor son su vestidura;

Y se ríe de lo por venir.

26 Abre su boca con sabiduría,

Y la ley de clemencia está en su lengua.

27 Considera los caminos de su casa,

Y no come el pan de balde.

28 Se levantan sus hijos y la llaman bienaventurada;

Y su marido también la alaba:

29 Muchas mujeres hicieron el bien;

Mas tú sobrepasas a todas.

30 Engañosa es la gracia, y vana la hermosura;

La mujer que teme a Jehová, esa será alabada.

31 Dadle del fruto de sus manos,

Y alábenla en las puertas sus hechos.