Add parallel Print Page Options

20 El que atiende a la palabra, halla el bien;
¡dichoso aquél que confía en el Señor!
21 Al de corazón sabio se le llama prudente;
los labios amables aumentan el saber.
22 Tener cordura es tener la fuente de la vida;
a los necios los castiga su propia necedad.

Read full chapter