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porque eso adornará tu cabeza
    como una corona o como un collar.

10 Hijo mío, si los pecadores quieren engañarte,
    no te dejes convencer.
11 Si te dicen: «Ven con nosotros, escondámonos,
    esperemos que pase algún inocente
    y démonos luego el gusto de matarlo.

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