Add parallel Print Page Options

»Diles también que éstas son las ofrendas que deberán quemar en mi honor: diariamente y sin falta, dos corderos de un año que no tengan ningún defecto. Uno será sacrificado por la mañana y el otro al atardecer. La ofrenda de cereales será de dos kilos de la mejor harina amasada con un litro de aceite de oliva.

Read full chapter