Add parallel Print Page Options

Entonces el Señor comunicó a Balaán las palabras que debía pronunciar, diciéndole:

— Regresa adonde está Balac y comunícale mis palabras.

Regresó Balaán adonde había dejado a Balac y lo encontró de pie junto a su holocausto, acompañado de todos los dignatarios de Moab. Entonces recitó Balaán este poema:

De Aram me ha hecho venir Balac,
el rey de Moab, desde los montes de oriente.
“Ven, maldíceme a Jacob;
ven, lanza imprecaciones contra Israel”.

Read full chapter