Add parallel Print Page Options

29 Al ver a Jesús, le gritaron:

―¡Déjanos tranquilos, Hijo de Dios! ¡Todavía no es hora de que nos atormentes!

30 Por aquellos alrededores andaba un hato de cerdos, 31 y los demonios le suplicaron a Jesús:

―Si nos vas a echar fuera, déjanos entrar en aquel hato de cerdos.

Read full chapter