El bautismo de Jesús^(A)

¹³ Entonces Jesús vino de Galilea al Jordán, donde estaba Juan, para ser bautizado por él. ¹⁴ Pero Juan se le oponía, diciendo:

—Yo necesito ser bautizado por ti, ¿y tú acudes a mí?

¹⁵ Jesús le respondió:

—Permítelo ahora, porque así conviene que cumplamos toda justicia.

Entonces se lo permitió.

²⁴ Entonces Jesús dijo a sus discípulos:

—Si alguien quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz y sígame,

²¹ El bautismo que corresponde a esto ahora nos salva (no quitando las inmundicias del cuerpo, sino como la aspiración de una buena conciencia hacia Dios) mediante la resurrección de Jesucristo,

¹⁹ Por tanto, id y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, ²⁰ y enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado. Y yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo.»

Amén.

⁴¹ Así que, los que recibieron su palabra fueron bautizados, y se añadieron aquel día como tres mil personas.

³⁸ Mandó parar el carro; y descendieron ambos al agua, Felipe y el eunuco, y lo bautizó. ³⁹ Cuando subieron del agua, el Espíritu del Señor arrebató a Felipe y el eunuco no lo vio más; y siguió gozoso su camino.

²³ También Juan bautizaba en Enón, junto a Salim, porque había allí muchas aguas. Y la gente llegaba y se bautizaba,