Add parallel Print Page Options

Y clamando a gran voz, dijo:

—¿Qué tienes conmigo, Jesús, Hijo del Dios Altísimo? ¡Te conjuro por Dios que no me atormentes!

(Porque le decía: «Sal de este hombre, espíritu impuro.»)

Jesús le preguntó:

—¿Cómo te llamas?

Y respondió diciendo:

—Legión me llamo, porque somos muchos.

Read full chapter