Add parallel Print Page Options

¡Podría haberse vendido por más de trescientos denarios, y ese dinero habérselo dado a los pobres!» Y se enojaron mucho contra ella. Pero Jesús dijo: «Déjenla tranquila. ¿Por qué la molestan? Ella ha efectuado en mí una buena obra. A los pobres siempre los tendrán entre ustedes,(A) y cuando quieran podrán hacer por ellos algo bueno. Pero a mí no siempre me tendrán.

Read full chapter