Añadir traducción en paralelo Imprimir Opciones de la página

mientras estaban allí, llegó el momento de que diera a luz. Al nacer su hijo primogénito, lo envolvió en retazos de tela y lo acostó en un pesebre dentro de la casa,[a] porque no había ningún lugar para ellos en el cuarto de huéspedes.[b]

Anuncio de los ángeles a los pastores

Cerca de ahí había algunos pastores que pasaban la noche en el campo cuidando su rebaño. Y se les apareció un ángel del Señor. El esplendor de la presencia del Señor los rodeó y se aterrorizaron. 10 Pero el ángel les dijo: «No tengan miedo, traigo buenas noticias que les darán mucha alegría a todos. 11 Hoy en el pueblo del rey David, les ha nacido un Salvador, que es el Mesías, el Señor. 12 Como señal, encontrarán a un bebé envuelto en retazos de tela, acostado en un pesebre».

13 De repente, junto al ángel, apareció una gran multitud de ángeles del cielo, y todos alababan a Dios:

14 «¡Alaben a Dios en los cielos!
    ¡Que haya paz en la tierra para la gente que agrada a Dios!»

Read full chapter

Notas al pie

  1. 2:7 dentro de la casa En aquellos tiempos de noche los animales domésticos se cuidaban dentro de la casa. Ver 2 S 12:3.
  2. 2:7 en el cuarto de huéspedes o en la posada.

Y aconteció que estando ellos allí, se cumplieron los días de su alumbramiento. Y dio a luz a su hijo primogénito, y lo envolvió en pañales, y lo acostó en un pesebre, porque no había lugar para ellos en el mesón.

Los ángeles y los pastores

Había pastores en la misma región, que velaban y guardaban las vigilias de la noche sobre su rebaño. Y he aquí, se les presentó un ángel del Señor, y la gloria del Señor los rodeó de resplandor; y tuvieron gran temor. 10 Pero el ángel les dijo: No temáis; porque he aquí os doy nuevas de gran gozo, que será para todo el pueblo: 11 que os ha nacido hoy, en la ciudad de David, un Salvador, que es CRISTO el Señor. 12 Esto os servirá de señal: Hallaréis al niño envuelto en pañales, acostado en un pesebre. 13 Y repentinamente apareció con el ángel una multitud de las huestes celestiales, que alababan a Dios, y decían:

14 ¡Gloria a Dios en las alturas,

Y en la tierra paz, buena voluntad para con los hombres!

Read full chapter