Add parallel Print Page Options

25 Tampoco reciban de manos de los extranjeros animales así, ni me los ofrezcan como mi alimento, porque esos animales están defectuosos y corrompidos, y yo no los aceptaré.»

26 El Señor habló con Moisés, y le dijo:

27 «Cuando nazca un becerro, un cordero o una cabra, podrá quedarse con su madre siete días, pero a partir del octavo día lo aceptaré como ofrenda de sacrificio encendido.

Read full chapter