Add parallel Print Page Options

De luto están los caminos de Sión.
Ya nadie asiste a las fiestas.
Todas sus puertas están derribadas.
Sus sacerdotes lloran.
Amargada está Sión,
y afligidas sus doncellas.

Sus enconados enemigos son ahora grandes magnates.
¡El Señor la afligió por sus muchas rebeliones,
y sus jóvenes marchan ahora al cautiverio,
arreados por el enemigo!

La sin par belleza de Sión se ha esfumado;
sus príncipes andan como ciervos en busca de pastos;
fuerzas no tienen para oponerse a sus perseguidores.

Read full chapter