Add parallel Print Page Options

Judá y Simeón capturan a Adoni-bezec

Aconteció después de la muerte de Josué, que los hijos de Israel consultaron a Jehová, diciendo: ¿Quién de nosotros subirá primero a pelear contra los cananeos? Y Jehová respondió: Judá subirá; he aquí que yo he entregado la tierra en sus manos. Y Judá dijo a Simeón su hermano: Sube conmigo al territorio que se me ha adjudicado, y peleemos contra el cananeo, y yo también iré contigo al tuyo. Y Simeón fue con él. Y subió Judá, y Jehová entregó en sus manos al cananeo y al ferezeo; e hirieron de ellos en Bezec a diez mil hombres. Y hallaron a Adoni-bezec en Bezec, y pelearon contra él; y derrotaron al cananeo y al ferezeo. Mas Adoni-bezec huyó; y le siguieron y le prendieron, y le cortaron los pulgares de las manos y de los pies. Entonces dijo Adoni-bezec: Setenta reyes, cortados los pulgares de sus manos y de sus pies, recogían las migajas debajo de mi mesa; como yo hice, así me ha pagado Dios. Y le llevaron a Jerusalén, donde murió.

Judá conquista Jerusalén y Hebrón

Y combatieron los hijos de Judá a Jerusalén y la tomaron, y pasaron a sus habitantes a filo de espada y pusieron fuego a la ciudad. Después los hijos de Judá descendieron para pelear contra el cananeo que habitaba en las montañas, en el Neguev, y en los llanos. 10 Y marchó Judá contra el cananeo que habitaba en Hebrón, la cual se llamaba antes Quiriat-arba; e hirieron a Sesai, a Ahimán y a Talmai.

Otoniel conquista Debir y recibe a Acsa

(Jos. 15.15-19)

11 De allí fue a los que habitaban en Debir, que antes se llamaba Quiriat-sefer. 12 Y dijo Caleb: El que atacare a Quiriat-sefer y la tomare, yo le daré a mi hija Acsa por mujer. 13 Y la tomó Otoniel hijo de Cenaz, hermano menor de Caleb; y él le dio a su hija Acsa por mujer. 14 Y cuando ella se iba con él, la persuadió que pidiese a su padre un campo. Y ella se bajó del asno, y Caleb le dijo: ¿Qué tienes? 15 Ella entonces le respondió: Concédeme un don; puesto que me has dado tierra del Neguev, dame también fuentes de aguas. Entonces Caleb le dio las fuentes de arriba y las fuentes de abajo.

Extensión de las conquistas de Judá y de Benjamín

16 Y los hijos del ceneo, suegro de Moisés, subieron de la ciudad de las palmeras con los hijos de Judá al desierto de Judá, que está en el Neguev cerca de Arad; y fueron y habitaron con el pueblo. 17 Y fue Judá con su hermano Simeón, y derrotaron al cananeo que habitaba en Sefat, y la asolaron; y pusieron por nombre a la ciudad, Horma. 18 Tomó también Judá a Gaza con su territorio, Ascalón con su territorio y Ecrón con su territorio. 19 Y Jehová estaba con Judá, quien arrojó a los de las montañas; mas no pudo arrojar a los que habitaban en los llanos, los cuales tenían carros herrados. 20 Y dieron Hebrón a Caleb, como Moisés había dicho; y él arrojó de allí a los tres hijos de Anac.(A) 21 Mas al jebuseo que habitaba en Jerusalén no lo arrojaron los hijos de Benjamín, y el jebuseo habitó con los hijos de Benjamín en Jerusalén hasta hoy.(B)

José conquista Bet-el

22 También la casa de José subió contra Bet-el; y Jehová estaba con ellos. 23 Y la casa de José puso espías en Bet-el, ciudad que antes se llamaba Luz. 24 Y los que espiaban vieron a un hombre que salía de la ciudad, y le dijeron: Muéstranos ahora la entrada de la ciudad, y haremos contigo misericordia. 25 Y él les mostró la entrada a la ciudad, y la hirieron a filo de espada; pero dejaron ir a aquel hombre con toda su familia. 26 Y se fue el hombre a la tierra de los heteos, y edificó una ciudad a la cual llamó Luz; y este es su nombre hasta hoy.

Extensión de las conquistas de Manasés y de Efraín

27 Tampoco Manasés arrojó a los de Bet-seán, ni a los de sus aldeas, ni a los de Taanac y sus aldeas, ni a los de Dor y sus aldeas, ni a los habitantes de Ibleam y sus aldeas, ni a los que habitan en Meguido y en sus aldeas; y el cananeo persistía en habitar en aquella tierra. 28 Pero cuando Israel se sintió fuerte hizo al cananeo tributario, mas no lo arrojó.(C)

29 Tampoco Efraín arrojó al cananeo que habitaba en Gezer, sino que habitó el cananeo en medio de ellos en Gezer.(D)

Extensión de las conquistas de las demás tribus

30 Tampoco Zabulón arrojó a los que habitaban en Quitrón, ni a los que habitaban en Naalal, sino que el cananeo habitó en medio de él, y le fue tributario.

31 Tampoco Aser arrojó a los que habitaban en Aco, ni a los que habitaban en Sidón, en Ahlab, en Aczib, en Helba, en Afec y en Rehob. 32 Y moró Aser entre los cananeos que habitaban en la tierra; pues no los arrojó.

33 Tampoco Neftalí arrojó a los que habitaban en Bet-semes, ni a los que habitaban en Bet-anat, sino que moró entre los cananeos que habitaban en la tierra; mas le fueron tributarios los moradores de Bet-semes y los moradores de Bet-anat.

34 Los amorreos acosaron a los hijos de Dan hasta el monte, y no los dejaron descender a los llanos. 35 Y el amorreo persistió en habitar en el monte de Heres, en Ajalón y en Saalbim; pero cuando la casa de José cobró fuerzas, lo hizo tributario. 36 Y el límite del amorreo fue desde la subida de Acrabim, desde Sela hacia arriba.

Judá y Simeón conquistan la tierra

Después de la muerte de Josué, los israelitas le preguntaron al Señor:

—¿Cuál de las tribus debe ser la primera en atacar a los cananeos?

El Señor contestó:

—Judá, porque yo le he dado la victoria sobre la tierra.

Entonces los hombres de Judá les dijeron a sus parientes de la tribu de Simeón: «Vengan con nosotros a luchar contra los cananeos que viven en el territorio que se nos asignó. Después nosotros los ayudaremos a ustedes a conquistar su territorio». Así que los hombres de Simeón fueron con los de Judá.

Cuando los hombres de Judá atacaron, el Señor les dio la victoria sobre los cananeos y los ferezeos, y mataron a diez mil guerreros enemigos en la ciudad de Bezec. Mientras estaban en Bezec, se toparon con el rey Adoni-bezec y lucharon contra él, y derrotaron a los cananeos y a los ferezeos. Adoni-bezec escapó, pero los israelitas pronto lo capturaron y le cortaron los pulgares de las manos y los dedos gordos de los pies.

Adoni-bezec dijo: «Una vez yo tuve setenta reyes sin los pulgares de las manos y los dedos gordos de los pies, comiendo migajas debajo de mi mesa. Ahora Dios me devolvió lo que les hice». Y se lo llevaron a Jerusalén, donde murió.

Los hombres de Judá atacaron a Jerusalén y la tomaron; mataron a todos sus habitantes y prendieron fuego a la ciudad. Luego descendieron para combatir contra los cananeos que vivían en la zona montañosa, en el Neguev y en las colinas occidentales.[a] 10 Judá marchó contra los cananeos en Hebrón (antiguamente llamada Quiriat-arba) y derrotó a las fuerzas de Sesai, Ahimán y Talmai.

11 De allí salieron a luchar contra los habitantes de la ciudad de Debir (antiguamente llamada Quiriat-sefer). 12 Caleb dijo: «Daré a mi hija Acsa en matrimonio al que ataque y tome Quiriat-sefer». 13 Otoniel, hijo de Cenaz, un hermano menor de Caleb, fue quien conquistó la ciudad; así que Acsa pasó a ser esposa de Otoniel.

14 Cuando Acsa se casó con Otoniel, ella insistió en que él le pidiera[b] un campo a Caleb, su padre. Mientras ella se bajaba de su burro, Caleb le preguntó:

—¿Qué te pasa?

15 Ella contestó:

—Concédeme otro obsequio. Ya me regalaste tierras en el Neguev; ahora te ruego que también me des manantiales.

Entonces Caleb le entregó tanto los manantiales de la parte alta como los de la parte baja.

16 Cuando los miembros de la tribu de Judá salieron de Jericó—la ciudad de las palmeras—, los ceneos (que eran descendientes del suegro de Moisés) los acompañaron al desierto de Judá y se establecieron entre la gente del lugar, cerca de la ciudad de Arad, en el Neguev.

17 Luego Judá se unió con Simeón para luchar contra los cananeos que vivían en Sefat, y destruyeron la ciudad por completo.[c] Por eso la ciudad fue llamada Horma.[d] 18 Además Judá tomó las ciudades de Gaza, Ascalón y Ecrón, junto con los territorios vecinos.

Israel no conquista toda la tierra

19 El Señor estaba con los de Judá, y ellos tomaron posesión de la zona montañosa; pero no lograron expulsar a los habitantes de las llanuras, quienes tenían carros de guerra hechos de hierro. 20 Caleb recibió la ciudad de Hebrón, tal como Moisés le había prometido, y expulsó a todos sus habitantes, que eran descendientes de los tres hijos de Anac.

21 Sin embargo, la tribu de Benjamín no logró expulsar a los jebuseos, quienes vivían en Jerusalén. Por eso, hasta el día de hoy, los jebuseos viven en Jerusalén junto con el pueblo de Benjamín.

22 Los descendientes de José atacaron la ciudad de Betel, y el Señor estuvo con ellos. 23 Enviaron espías a Betel (antes conocida como Luz), 24 quienes abordaron a un hombre que salía del poblado y le dijeron: «Muéstranos cómo entrar en la ciudad, y tendremos compasión de ti». 25 Entonces él les mostró una vía de acceso, y ellos mataron a todos en la ciudad, menos a ese hombre y a su familia. 26 Más tarde, el hombre se trasladó a la tierra de los hititas, donde estableció una ciudad a la que llamó Luz. Este nombre lo conserva hasta el día de hoy.

27 La tribu de Manasés no logró expulsar a la gente que vivía en Bet-sán,[e] Taanac, Dor, Ibleam, Meguido y en todos los asentamientos vecinos, porque los cananeos estaban decididos a quedarse en esa región. 28 Con el tiempo, cuando los israelitas se fortalecieron, obligaron a los cananeos a trabajar como esclavos, pero nunca los expulsaron de la tierra por completo.

29 La tribu de Efraín no logró expulsar a los cananeos que vivían en Gezer, así que los cananeos siguieron viviendo allí, en medio de los de Efraín.

30 La tribu de Zabulón no logró expulsar a los habitantes de Quitrón y de Naalal, así que los cananeos siguieron viviendo en medio de los de Zabulón, pero los cananeos fueron obligados a trabajar como esclavos para ellos.

31 La tribu de Aser no logró expulsar a los habitantes de Aco, Sidón, Ahlab, Aczib, Helba, Afec ni Rehob. 32 Así que los de Aser se establecieron entre los cananeos, quienes controlaban la tierra, debido a que no lograron expulsarlos.

33 Asimismo, la tribu de Neftalí no logró expulsar a los habitantes de Bet-semes ni a los de Bet-anat. Así que Neftalí se estableció entre los cananeos, quienes controlaban la tierra. Sin embargo, los habitantes de Bet-semes y los de Bet-anat fueron obligados a trabajar como esclavos para la gente de Neftalí.

34 En cuanto a la tribu de Dan, los amorreos los obligaron a retirarse a la zona montañosa y no los dejaban descender a las llanuras. 35 Los amorreos estaban decididos a quedarse en el monte Heres, en Ajalón y en Saalbim; pero cuando los descendientes de José aumentaron en fuerza, obligaron a los amorreos a trabajar como esclavos. 36 La frontera de los amorreos iba desde el paso de los Escorpiones[f] hasta Sela y desde allí se extendía hacia arriba.

Footnotes

  1. 1:9 En hebreo en la Sefela.
  2. 1:14 La versión griega y la Vulgata Latina dicen él insistió en que ella le pidiera.
  3. 1:17a El término hebreo empleado aquí se refiere a la consagración total de cosas o personas al Señor, ya sea destruyéndolas o entregándolas como ofrenda.
  4. 1:17b Horma significa «destrucción».
  5. 1:27 En hebreo Bet-seán, una variante de Bet-sán.
  6. 1:36 En hebreo Acrabim.

Derrota de Adoni-bezec

Después [a] de la muerte de Josué, los hijos de Israel consultaron al Señor(A), diciendo: ¿Quién de nosotros subirá primero contra los cananeos(B) para pelear contra ellos? Y el Señor respondió: Judá subirá; he aquí, yo he entregado el país en sus manos(C). Entonces Judá dijo a su hermano Simeón: Sube conmigo al territorio que me ha tocado[b], para que peleemos contra los cananeos; yo también iré contigo al territorio que te ha tocado[c]. Y Simeón fue con él. Subió Judá, y el Señor entregó en sus manos a los cananeos y a los ferezeos, y derrotaron[d](D) a diez mil hombres en Bezec. Hallaron a Adoni-bezec en Bezec y pelearon contra él, y derrotaron[e] a los cananeos y a los ferezeos. Huyó Adoni-bezec, pero lo persiguieron, lo prendieron y le cortaron los pulgares de las manos y de los pies. Y Adoni-bezec dijo: Setenta reyes, con los pulgares de sus manos y de sus pies cortados, recogían migajas debajo de mi mesa; como yo he hecho(E), así me ha pagado Dios. Lo llevaron a Jerusalén, y allí murió.

Conquista de Jerusalén

Y pelearon los hijos de Judá contra Jerusalén(F) y la tomaron, la pasaron a filo de espada y prendieron fuego a la ciudad. Después descendieron los hijos de Judá a pelear contra los cananeos que vivían en la región montañosa, en el Neguev[f] y en las tierras bajas[g]. 10 (G)Y Judá marchó contra los cananeos que habitaban en Hebrón (el nombre de Hebrón antes era Quiriat-arba); e hirieron a Sesai, a Ahimán y a Talmai.

Conquista de otras ciudades

11 De allí fue contra los habitantes de Debir (el nombre de Debir antes era Quiriat-séfer(H)). 12 Y Caleb dijo: Al que ataque[h] a Quiriat-séfer y la tome, yo le daré a mi hija Acsa por mujer. 13 Y Otoniel, hijo de Cenaz, hermano menor de Caleb(I), la tomó, y él le dio a su hija Acsa por mujer. 14 Y sucedió que cuando ella vino a él, este la[i] persuadió a que pidiera un campo a su padre. Ella entonces se bajó del asno, y Caleb le dijo: ¿Qué quieres?[j](J) 15 Y ella le dijo: Dame una bendición, ya que me has dado la tierra del Neguev, dame también fuentes de agua. Y Caleb le dio las fuentes de arriba y las fuentes de abajo.

16 Y los descendientes[k] del ceneo, suegro de Moisés(K), subieron de la ciudad de las palmeras(L) con los hijos de Judá, al desierto de Judá que está al sur de Arad(M); y fueron y habitaron con el pueblo. 17 Entonces Judá fue con Simeón su hermano, y derrotaron[l] a los cananeos que vivían en Sefat, y la destruyeron por completo[m]. Por eso pusieron por nombre a la ciudad, Horma[n](N). 18 Y Judá tomó a Gaza(O) con su territorio, a Ascalón con su territorio y a Ecrón con su territorio. 19 El Señor estaba con Judá, que tomó posesión de la región montañosa, pero no pudo expulsar[o] a los habitantes del valle porque estos tenían carros de hierro(P). 20 Entonces dieron Hebrón a Caleb, como Moisés había prometido[p](Q); y él expulsó[q] de allí a los tres hijos de Anac(R). 21 Pero los hijos de Benjamín no expulsaron[r] a los jebuseos que vivían en Jerusalén(S); así que los jebuseos han vivido con los hijos de Benjamín en Jerusalén hasta el día de hoy(T).

José conquista a Betel

22 De igual manera la casa de José subió contra Betel; y el Señor estaba con ellos. 23 Y la casa de José envió espías[s] a Betel (el nombre de la ciudad antes era Luz(U)). 24 Y vieron los espías a un hombre que salía de la ciudad y le dijeron: Te rogamos que nos muestres la entrada de la ciudad y te trataremos con misericordia(V). 25 Él les mostró la entrada de la ciudad; e hirieron la ciudad a filo de espada, mas dejaron ir al hombre y a toda su familia(W). 26 Y el hombre fue a la tierra de los hititas y edificó una ciudad a la que llamó Luz; y este es su nombre hasta hoy.

Lugares no conquistados

27 (X)Pero Manasés no tomó posesión de Bet-seán y sus aldeas, ni de Taanac y sus aldeas, ni de los habitantes de Dor y sus aldeas, ni de los habitantes de Ibleam y sus aldeas, ni de los habitantes de Meguido y sus aldeas; y los cananeos persistían en habitar en aquella tierra(Y). 28 Y sucedió que cuando Israel se hizo fuerte, sometieron a los cananeos a trabajos forzados, pero no los expulsaron totalmente.

29 Tampoco Efraín expulsó a los cananeos que habitaban en Gezer; y los cananeos habitaron en medio de ellos en Gezer(Z).

30 Zabulón no expulsó a los habitantes de Quitrón, ni a los habitantes de Naalal; de manera que los cananeos habitaron en medio de ellos y fueron sometidos a trabajos forzados.

31 Aser no expulsó a los habitantes de Aco, ni a los habitantes de Sidón, ni de Ahlab, ni de Aczib, ni de Helba, ni de Afec, ni de Rehob. 32 Así que los de Aser habitaron entre los cananeos, los habitantes de aquella[t] tierra, porque no los expulsaron.

33 Neftalí no expulsó a los habitantes de Bet-semes, ni a los habitantes de Bet-anat, sino que habitó entre los cananeos, los habitantes de aquella[u] tierra; y los habitantes de Bet-semes y de Bet-anat fueron sometidos a trabajos forzados.

34 Entonces los amorreos forzaron[v] a los hijos de Dan hacia la región montañosa, y no los dejaron descender al valle. 35 Y los amorreos persistieron en habitar en el monte de Heres, en Ajalón y en Saalbim; pero cuando el poder[w] de la casa de José se fortaleció[x], fueron sometidos a trabajos forzados. 36 La frontera de los amorreos iba desde la subida de Acrabim(AA), desde Sela hacia arriba.

Footnotes

  1. Jueces 1:1 Lit., Y sucedió después
  2. Jueces 1:3 Lit., a mi suerte
  3. Jueces 1:3 Lit., a tu suerte
  4. Jueces 1:4 Lit., los hirieron
  5. Jueces 1:5 Lit., e hirieron
  6. Jueces 1:9 I.e., región del sur
  7. Jueces 1:9 Heb., Sefela
  8. Jueces 1:12 Lit., hiera
  9. Jueces 1:14 Así en algunas versiones antiguas; en el T.M., ella lo
  10. Jueces 1:14 Lit., ¿Qué para ti?
  11. Jueces 1:16 Lit., hijos
  12. Jueces 1:17 Lit., e hirieron
  13. Jueces 1:17 O, dedicaron al anatema
  14. Jueces 1:17 I.e., destrucción
  15. Jueces 1:19 Lit., desposeer
  16. Jueces 1:20 Lit., hablado
  17. Jueces 1:20 Lit., desposeyó, y así en el resto del cap.
  18. Jueces 1:21 Lit., desposeyeron, y así en el resto del cap.
  19. Jueces 1:23 Lit., espió
  20. Jueces 1:32 Lit., la
  21. Jueces 1:33 Lit., la
  22. Jueces 1:34 Lit., presionaron
  23. Jueces 1:35 Lit., la mano
  24. Jueces 1:35 O, fue pesada

Israel continúa su lucha contra los cananeos(A)

Después de la muerte de Josué, los israelitas preguntaron al Señor:

—¿Quién de nosotros será el primero en subir y pelear contra los cananeos?

El Señor respondió:

—Judá será el primero en subir, puesto que ya he entregado el país en sus manos.

Entonces los de la tribu de Judá dijeron a sus hermanos de la tribu de Simeón: «Suban con nosotros al territorio que nos ha tocado y pelearemos contra los cananeos; después nosotros iremos con ustedes al territorio que les tocó». Y los de la tribu de Simeón los acompañaron.

Cuando Judá atacó, el Señor entregó en sus manos a los cananeos y a los ferezeos. En Bézec derrotaron a diez mil hombres. Allí se toparon con Adoní Bézec y pelearon contra él, y derrotaron a los cananeos y a los ferezeos. Adoní Bézec logró escapar, pero lo persiguieron hasta que lo capturaron, y le cortaron los pulgares de las manos y los dedos gordos de los pies.

Entonces Adoní Bézec exclamó: «¡Setenta reyes, cortados los pulgares de las manos y los dedos gordos de los pies, recogían migajas debajo de mi mesa! ¡Ahora Dios me ha hecho lo mismo que yo hice con ellos!». Luego lo llevaron a Jerusalén y allí murió.

Los de la tribu de Judá también atacaron a Jerusalén; la capturaron, hirieron a sus habitantes a filo de espada y luego incendiaron la ciudad.

Después la tribu de Judá fue a pelear contra los cananeos que vivían en la región montañosa, en el Néguev y en la llanura. 10 Avanzaron contra los cananeos que vivían en Hebrón, ciudad que antes se llamaba Quiriat Arbá, y derrotaron a Sesay, Ajimán y Talmay.

11 De allí avanzaron para atacar a los habitantes de Debir, ciudad que antes se llamaba Quiriat Séfer.

12 Y Caleb dijo: «A quien derrote a Quiriat Séfer y la conquiste, yo le daré por esposa a mi hija Acsa». 13 Entonces Otoniel, hijo de Quenaz y hermano menor de Caleb, la conquistó; así que Caleb le dio por esposa a su hija Acsa.

14 Cuando ella llegó, convenció a Otoniel[a] de que pidiera un terreno a su padre. Al bajar Acsa del asno, Caleb preguntó:

—¿Qué te pasa?

15 —Concédeme un gran favor —respondió ella—. Ya que me has dado tierras en el Néguev, dame también manantiales.

Fue así como Caleb dio a su hija manantiales en las zonas altas y en las bajas.

16 Los descendientes de Hobab[b] el quenita, suegro de Moisés, acompañaron a la tribu de Judá desde la Ciudad de las Palmeras[c] hasta el desierto de Judá, que está en el Néguev, cerca de Arad. Allí habitaron con la gente del lugar.

17 Después fueron los de la tribu de Judá con sus hermanos de la tribu de Simeón y derrotaron a los cananeos que vivían en Sefat, ciudad que destruyeron por completo. Desde entonces Sefat fue llamada Jormá.[d] 18 Los hombres de Judá también conquistaron las ciudades de Gaza, Ascalón y Ecrón, cada una de ellas con su propio territorio.

19 El Señor estaba con los hombres de Judá. Estos tomaron posesión de la región montañosa, pero no pudieron expulsar a los que vivían en las llanuras, porque esa gente contaba con carros de hierro. 20 Tal como lo había prometido Moisés, Caleb recibió Hebrón y expulsó de esa ciudad a los tres hijos de Anac. 21 En cambio, los de la tribu de Benjamín no lograron expulsar a los jebuseos, que vivían en Jerusalén. Por eso hasta el día de hoy los jebuseos viven con los benjamitas en Jerusalén.

22 Los de la tribu de José, por su parte, subieron contra Betel, pues el Señor estaba con ellos. 23 Enviaron espías a Betel, ciudad que antes se llamaba Luz. 24 Estos espías, al ver que un hombre salía de la ciudad, le dijeron: «Muéstranos cómo entrar en la ciudad y seremos bondadosos contigo». 25 Aquel hombre les mostró cómo entrar en la ciudad y ellos la conquistaron a filo de espada; pero al hombre y a toda su familia les perdonaron la vida. 26 Y ese hombre se fue a la tierra de los hititas, donde fundó una ciudad a la que llamó Luz, nombre que conserva hasta el día de hoy.

27 Pero los de la tribu de Manasés no pudieron expulsar a los de Betseán y de Tanac con sus respectivas aldeas, ni tampoco a los habitantes de Dor, Ibleam y Meguido con sus respectivas aldeas, porque los cananeos estaban decididos a permanecer en esa tierra. 28 Solo cuando Israel se hizo fuerte pudo someter a los cananeos a trabajos forzados, aunque nunca pudo expulsarlos del todo. 29 Los de la tribu de Efraín tampoco pudieron expulsar a los cananeos que vivían en Guézer, de modo que los cananeos siguieron viviendo entre ellos. 30 Los de la tribu de Zabulón, por su parte, tampoco pudieron expulsar a los cananeos que vivían en Quitrón y Nalol, y estos siguieron viviendo entre ellos, aunque fueron sometidos a trabajos forzados. 31 Tampoco los de la tribu de Aser expulsaron a los habitantes de Aco, Sidón, Ajlab, Aczib, Jelba, Afec y Rejob. 32 Por eso, como no los expulsaron, el pueblo de la tribu de Aser vivió entre los cananeos que habitaban en aquella región. 33 Tampoco los de la tribu de Neftalí expulsaron a los habitantes de Bet Semes y Bet Anat, sino que vivieron entre los cananeos que habitaban en aquella región. Sin embargo, sometieron a trabajos forzados a los que vivían en Bet Semes y Bet Anat. 34 Los amorreos obligaron a los de la tribu de Dan a vivir en la región montañosa y no les permitieron bajar a la llanura. 35 Los amorreos también estaban decididos a permanecer en el monte Jeres, en Ayalón y en Salbín. Pero cuando se acrecentó el poder de la tribu de José, los amorreos también fueron sometidos a trabajos forzados. 36 La frontera de los amorreos iba desde la cuesta de los Escorpiones hasta Selá e incluso más arriba.

Footnotes

  1. 1:14 Otoniel la convenció (LXX y Vulgata); lo convenció (TM).
  2. 1:16 Hobab. Véase 4:11.
  3. 1:16 la Ciudad de las Palmeras. Es decir, Jericó.
  4. 1:17 En hebreo, Jormá significa destrucción.