Add parallel Print Page Options

21 las cisternas se estaban quedando vacías. El agua para beber estaba tan racionada que ni un solo día pudieron satisfacer su sed. 22 Los niños estaban sin fuerzas, y de puro agotamiento las mujeres y los jóvenes desfallecían de sed y caían desmayados en las calles de la ciudad y en las puertas.

23 Entonces todo el pueblo, los jóvenes, las mujeres y los niños, se reunieron alrededor de Ozías y de los jefes de la ciudad gritando con todas sus fuerzas, y dijeron delante de todos los ancianos:

Read full chapter