Add parallel Print Page Options

Holofernes ordenó a los soldados de su guardia personal que la dejaran salir.

Así permaneció Judit en el campamento durante tres días. Por la noche salía al valle de Betulia y se bañaba en el manantial que había junto al puesto de avanzada. Al regresar pedía al Señor, Dios de Israel, que le facilitara la manera de sacar de apuros a su pueblo. Depués de haberse purificado, volvía a la tienda y se quedaba en ella hasta que le traían su comida, hacia el atardecer.

Read full chapter