Judas
La Palabra (Hispanoamérica)
Introducción (1-2)
Saludo
1 Judas, servidor de Jesucristo y hermano de Santiago, a los que han sido llamados a vivir bajo el amor de Dios Padre y la custodia de Jesucristo. 2 Que la misericordia, la paz y el amor abunden cada vez más en ustedes.
I.— POLÉMICA CONTRA LOS FALSOS MAESTROS (3-16)
Los falsos maestros
3 Queridos hermanos, ardía yo en deseos de escribirles acerca de un asunto que a todos nos concierne: el de nuestra salvación. Pero ahora debo hacerlo forzado por las circunstancias, pues es preciso alentarlos a combatir en defensa de la fe confiada a los creyentes de una vez por todas. 4 Y es que entre ustedes se han infiltrado solapadamente algunos individuos cuya condenación está anunciada en las Escrituras desde hace mucho tiempo; son gente impía que confunde la gracia de Dios con el libertinaje y que reniega de Jesucristo, nuestro único Dueño y Señor. 5 Aunque ustedes lo conocen todo perfectamente, quiero recordarles que si bien el Señor liberó al pueblo de la opresión egipcia, después aniquiló a los incrédulos. 6 Y a los ángeles que no supieron conservar su condición privilegiada y abandonaron la que era su mansión, los mantiene eternamente encadenados a las tinieblas en espera del gran día del juicio. 7 Y Sodoma y Gomorra, junto con las ciudades limítrofes entregadas como ellas a la lujuria y a la homosexualidad, sufrieron el castigo de un fuego perpetuo, sirviendo así de escarmiento a los demás.
8 Pues, a pesar de todo, esos visionarios se comportan de modo semejante: profanan su cuerpo, rechazan la autoridad del Señor e injurian a los seres gloriosos. 9 Distinto fue el proceder del arcángel Miguel cuando disputaba al diablo el cuerpo de Moisés. Ni siquiera se atrevió a lanzarle una acusación injuriosa; simplemente dijo: “Que el Señor te reprenda”. 10 Estos, por el contrario, ultrajan lo que desconocen; y lo que conocen, a la manera instintiva de las bestias irracionales, no les sirve más que para la ruina. 11 ¡Ay de ellos! Han seguido las huellas de Caín, se entregaron por dinero al extravío de Balaán y sucumbieron en la rebelión de Coré.
12 ¡Ahí los tienen ustedes! Son los que contaminan sus reuniones fraternales banqueteando desvergonzadamente y campando a sus anchas. Son nubes sin agua arrastradas por el viento; árboles en otoño, pero sin fruto, definitivamente secos, arrancados de raíz. 13 Son olas de un mar embravecido, que arroja la espuma de sus propias desvergüenzas; estrellas fugaces, cuyo eterno destino es la tiniebla sin fondo. 14 A ellos se refería Enoc, el séptimo patriarca después de Adán, cuando profetizó: “Miren cómo viene el Señor con sus innumerables ángeles 15 para juzgar a todos y desenmascarar a los malvados por todas las acciones criminales que han cometido, para tapar la boca a los impíos que han hablado contra él con insolencia”. 16 ¡Ahí los tienen! Murmuradores, descontentos, libertinos, insolentes, aduladores y materialistas.
II.— EXHORTACIÓN A LA FIDELIDAD (17-23)
Avisos y exhortaciones
17 Pero ustedes, amados míos, recuerden lo que predijeron los apóstoles de nuestro Señor Jesucristo. 18 “En los últimos tiempos —les advertían— surgirán embaucadores que vivirán impíamente y al capricho de sus pasiones”. 19 ¡Ahí los tienen! Son los sembradores de discordias, los que viven sensualmente y están privados del Espíritu. 20 Ustedes, en cambio, amados míos, hagan de una fe tan santa como la que tienen, el firme cimiento de su vida; oren impulsados por el Espíritu Santo 21 y manténganse en el amor de Dios, esperando que la misericordia de nuestro Señor Jesucristo los lleve a la vida eterna.
22 Tengan compasión de los que vacilan, 23 contando con que a unos los salvarán arrancándolos del fuego; pero a otros sólo podrán compadecerlos, y eso con cautela, evitando incluso el contacto superficial con su torpe conducta.
Conclusión (24-25)
Doxología final
24 Al que puede mantenerlos limpios de pecado y conducirlos alegres y sin mancha hasta su gloriosa presencia, 25 al Dios único que es nuestro Salvador, a él la gloria, la majestad, la soberanía y el poder, por medio de nuestro Señor Jesucristo, desde antes de todos los tiempos, ahora y por los siglos sin fin. Amén.
Judas
Traducción en lenguaje actual
Saludo
1 Yo, Judas, estoy al servicio del Señor Jesucristo y soy hermano de Santiago.[a] Escribo esta carta a todos los que Dios el Padre ama y ha elegido, y que Jesucristo también cuida. 2 Deseo que Dios los trate con mucha compasión y con abundante paz y amor.
Advertencia contra la mentira
3 Amados hermanos en Cristo, hace tiempo que he querido escribirles acerca de la salvación que Dios nos ha dado. Ahora les escribo para pedirles que luchen y defiendan la enseñanza que Dios ha dado para siempre a su pueblo elegido. 4 Estoy preocupado, pues hay algunos que se han colado entre ustedes, y que los han engañado. Ellos dicen que Jesucristo no es nuestro único Señor y dueño, y que por eso no debemos obedecerle. Piensan que, como Dios nos ama tanto, no nos castigará por todo lo malo que hacemos. Con razón, desde hace mucho tiempo se dice en la Biblia que Dios castigará a esa gente.
5 Aunque ustedes ya lo saben, quiero recordarles que Dios, después de sacar de Egipto al pueblo de Israel, destruyó a los que no creyeron en él. 6 Así pasó también con los ángeles que rechazaron y abandonaron el lugar de honor que Dios les había dado. Dios los tiene atados para siempre con cadenas, y están encerrados en lugares oscuros, hasta que llegue el gran día del juicio final.
7 Algo parecido les sucedió a los que vivían en Sodoma y Gomorra, y en las ciudades cercanas. Los que vivían allí pecaron y practicaron todo tipo de relaciones sexuales prohibidas. Por eso Dios los castigó y los arrojó al fuego que nunca se apaga, para que sufran allí. Que esto sirva de advertencia para todos nosotros.
8 Lo mismo les va a pasar a los malvados de quienes les estoy hablando. Porque con sus locas ideas dañan su cuerpo, rechazan la autoridad de Dios e insultan a los ángeles. 9 Ni siquiera Miguel, el jefe de los ángeles, se atrevió a hacer algo así. Cuando Miguel peleaba con el diablo para quitarle el cuerpo de Moisés, no lo insultó, sino que sólo le dijo: «Que el Señor te castigue». 10 Sin embargo, esta gente insulta hasta lo que no conoce. Se comportan como los animales, que conocen las cosas pero no las entienden, y por eso terminan destruyéndose a sí mismos.
11 ¡Pobre gente! Se portan como Caín. Y por el afán de ganar dinero, cometen el mismo error que cometió Balaam. Son tan rebeldes que morirán como murió Coré.[b]
12 Es una vergüenza que esas personas vayan a sus fiestas de amor,[c] pues comen y beben sin ningún respeto. Son líderes que sólo se preocupan de ellos mismos. Son como nubes sin agua, que el viento lleva de un lado a otro. Se parecen a los árboles que no dan fruto, pues han sido arrancados de raíz y están totalmente muertos. 13 Son gente violenta. Todos pueden ver lo malo que hacen, pues sus maldades son como la espuma de las violentas olas del mar. Son como estrellas perdidas, condenadas a viajar siempre en la más terrible oscuridad.
14 Hace ya mucho tiempo Enoc, que fue el séptimo hombre después de Adán, habló de esta gente y dijo: «Miren, Dios viene acompañado de miles y miles de sus ángeles. 15 Viene para castigar a todos los que hicieron el mal, y castigará a todos los pecadores que lo insultaron.»
16 Esta gente se queja de todo, y lo critica todo. Sólo quiere que se cumplan sus deseos egoístas. Habla con orgullo, y cuando habla bien de los demás, lo hace sólo para aprovecharse de ellos.
Algunos consejos
17 Pero ustedes, queridos hermanos, acuérdense de lo que ya les habían dicho los apóstoles de nuestro Señor Jesucristo. 18 Ellos les enseñaron que, en los últimos tiempos, habría gente burlona, que se dejaría controlar por sus malos deseos. 19 Es esta clase de gente la que los obliga a pelearse y a dividirse, pues hace lo que quiere y no tiene el Espíritu de Dios.
20 Pero ustedes, queridos hermanos, sigan confiando siempre en Dios. Esa confianza es muy especial. Cuando oren, dejen que el Espíritu Santo les diga lo que deben decir. 21 Confíen todo el tiempo en el amor de Dios, y esperen el día en que nuestro Señor Jesucristo nos dará la vida eterna, pues él también nos ama mucho.
22 Ayuden con amor a los que no están del todo seguros de su salvación. 23 Rescaten a los que necesitan salvarse del infierno, y tengan compasión de los que necesitan ser compadecidos. Pero tengan mucho cuidado de no hacer el mismo mal que ellos hacen.
Alabanza final a Dios
24 Dios puede cuidarlos para que no hagan el mal, y también tiene poder para que ustedes puedan presentarse ante él sin pecado. Se presentarán ante él llenos de alegría, y limpios y sin mancha, como un vestido nuevo.
25 Por eso, alaben a Dios nuestro Salvador. Por medio de nuestro Señor Jesucristo reconozcan su grandeza, poder y autoridad. Alabemos a Dios por todo esto ahora y siempre. Amén.
Footnotes
- Judas 1:1 Santiago: Probablemente se refiere a quien escribió la Carta de Santiago.
- Judas 1:11 Caín: El hermano de Abel (Génesis 4.3-9). Balaam: Profeta de otra religión, a quien se le pagó para maldecir a Israel (Números 22.1-35). Coré: Este hombre trabajaba en el templo, y también desobedeció a Dios (Números 16.1-35).
- Judas 1:12 Fiestas de amor: Así se llamaban las reuniones en las que toda la iglesia celebraba la Cena del Señor y compartía los alimentos.
Jude
New Revised Standard Version Catholic Edition
Salutation
1 Jude,[a] a servant[b] of Jesus Christ and brother of James,
To those who are called, who are beloved[c] in[d] God the Father and kept safe for[e] Jesus Christ:
2 May mercy, peace, and love be yours in abundance.
Occasion of the Letter
3 Beloved, while eagerly preparing to write to you about the salvation we share, I find it necessary to write and appeal to you to contend for the faith that was once for all entrusted to the saints. 4 For certain intruders have stolen in among you, people who long ago were designated for this condemnation as ungodly, who pervert the grace of our God into licentiousness and deny our only Master and Lord, Jesus Christ.[f]
Judgment on False Teachers
5 Now I desire to remind you, though you are fully informed, that the Lord, who once for all saved[g] a people out of the land of Egypt, afterward destroyed those who did not believe. 6 And the angels who did not keep their own position, but left their proper dwelling, he has kept in eternal chains in deepest darkness for the judgment of the great day. 7 Likewise, Sodom and Gomorrah and the surrounding cities, which, in the same manner as they, indulged in sexual immorality and pursued unnatural lust,[h] serve as an example by undergoing a punishment of eternal fire.
8 Yet in the same way these dreamers also defile the flesh, reject authority, and slander the glorious ones.[i] 9 But when the archangel Michael contended with the devil and disputed about the body of Moses, he did not dare to bring a condemnation of slander[j] against him, but said, “The Lord rebuke you!” 10 But these people slander whatever they do not understand, and they are destroyed by those things that, like irrational animals, they know by instinct. 11 Woe to them! For they go the way of Cain, and abandon themselves to Balaam’s error for the sake of gain, and perish in Korah’s rebellion. 12 These are blemishes[k] on your love-feasts, while they feast with you without fear, feeding themselves.[l] They are waterless clouds carried along by the winds; autumn trees without fruit, twice dead, uprooted; 13 wild waves of the sea, casting up the foam of their own shame; wandering stars, for whom the deepest darkness has been reserved forever.
14 It was also about these that Enoch, in the seventh generation from Adam, prophesied, saying, “See, the Lord is coming[m] with ten thousands of his holy ones, 15 to execute judgment on all, and to convict everyone of all the deeds of ungodliness that they have committed in such an ungodly way, and of all the harsh things that ungodly sinners have spoken against him.” 16 These are grumblers and malcontents; they indulge their own lusts; they are bombastic in speech, flattering people to their own advantage.
Warnings and Exhortations
17 But you, beloved, must remember the predictions of the apostles of our Lord Jesus Christ; 18 for they said to you, “In the last time there will be scoffers, indulging their own ungodly lusts.” 19 It is these worldly people, devoid of the Spirit, who are causing divisions. 20 But you, beloved, build yourselves up on your most holy faith; pray in the Holy Spirit; 21 keep yourselves in the love of God; look forward to the mercy of our Lord Jesus Christ that leads to[n] eternal life. 22 And have mercy on some who are wavering; 23 save others by snatching them out of the fire; and have mercy on still others with fear, hating even the tunic defiled by their bodies.[o]
Benediction
24 Now to him who is able to keep you from falling, and to make you stand without blemish in the presence of his glory with rejoicing, 25 to the only God our Savior, through Jesus Christ our Lord, be glory, majesty, power, and authority, before all time and now and forever. Amen.
Footnotes
- Jude 1:1 Gk Judas
- Jude 1:1 Gk slave
- Jude 1:1 Other ancient authorities read sanctified
- Jude 1:1 Or by
- Jude 1:1 Or by
- Jude 1:4 Or the only Master and our Lord Jesus Christ
- Jude 1:5 Other ancient authorities read though you were once for all fully informed, that Jesus (or Joshua) who saved
- Jude 1:7 Gk went after other flesh
- Jude 1:8 Or angels; Gk glories
- Jude 1:9 Or condemnation for blasphemy
- Jude 1:12 Or reefs
- Jude 1:12 Or without fear. They are shepherds who care only for themselves
- Jude 1:14 Gk came
- Jude 1:21 Gk Christ to
- Jude 1:23 Gk by the flesh. The Greek text of verses 22–23 is uncertain at several points
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