Add parallel Print Page Options

Te conocía sólo de oídas,
pero ahora te han visto mis ojos;
por eso, me retracto y me arrepiento,
tumbado en el polvo y la ceniza.

V.— Epílogo (42,7-17)

Cuando el Señor terminó de decir esto a Job, se dirigió a Elifaz de Temán:

— Estoy enfadado contigo y con tus dos compañeros, porque no habéis hablado de mí como hay que hablar, al contrario de como lo ha hecho mi siervo Job.

Read full chapter