Add parallel Print Page Options

Tus propias palabras te condenan, no las mías;
¡son tus labios los que hablan contra ti!

»¿Acaso naciste antes que Adán?
¿Fuiste formado antes que las montañas?
¿Participas en el concilio de Dios?
¿Eres acaso el único sabio?

Read full chapter