Add parallel Print Page Options

Las moradas de los destructores prosperan,
y los que provocan a Dios están seguros
en aquello que la mano de Dios
les ha traído.
»En efecto, pregunta, por favor,
a los cuadrúpedos, y te enseñarán;
a las aves del cielo, y te informarán.
O habla a la tierra, y te enseñará;
y los peces del mar te lo contarán.

Read full chapter