Add parallel Print Page Options

De repente, en un mismo día,
te vendrán ambas desgracias:
quedarás viuda y sin hijos, a pesar de tus muchas brujerías
y de tus incontables magias.
10 Tú te sentías segura en tu maldad,
y pensaste: “Nadie me ve.”
Tu sabiduría y tus conocimientos te engañaron.
Pensaste en tu interior:
“Yo y nadie más que yo.”
11 Pero va a venir la desgracia sobre ti,
y no podrás impedirlo con tu magia;
caerá sobre ti un desastre
que no podrás evitar;
una calamidad que no esperabas
vendrá de repente sobre ti.

Read full chapter