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Fortaleced las manos débiles
y afianzad las rodillas vacilantes(A).

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Fortaleced las manos cansadas, afirmad las rodillas endebles.(A)

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Decid a los de corazón tímido(A):
Esforzaos, no temáis.
He aquí, vuestro Dios viene con venganza(B);
la retribución[a](C) vendrá de Dios mismo,
mas Él os salvará(D).

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Footnotes

  1. Isaías 35:4 Lit., recompensa

Decid a los de corazón apocado: Esforzaos, no temáis; he aquí que vuestro Dios viene con retribución, con pago; Dios mismo vendrá, y os salvará.

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