¹⁰ Quebrantada está la ciudad por la vanidad; toda casa se ha cerrado, para que no entre nadie.

¹² La ciudad quedó desolada, y con ruina fue derribada la puerta.

⁵ Porque derribó a los que moraban en lugar sublime; humilló a la ciudad exaltada, la humilló hasta la tierra, la derribó hasta el polvo.

¹⁰ Porque la ciudad fortificada será desolada, la ciudad habitada será abandonada y dejada como un desierto; allí pastará el becerro, allí tendrá su majada, y acabará sus ramas.

⁴ Entonces serás humillada, hablarás desde la tierra, y tu habla saldrá del polvo; y será tu voz de la tierra como la de un fantasma, y tu habla susurrará desde el polvo.