Add parallel Print Page Options

La visión de Pedro

Al día siguiente, mientras ellos iban por el camino y se acercaban a la ciudad, Pedro(A) subió a la azotea(B) a orar como al mediodía(C). 10 Tuvo hambre y deseaba comer; pero mientras le preparaban algo de comer, le sobrevino un éxtasis(D). 11 Vio* el cielo abierto(E) y un objeto[a] semejante a un gran lienzo que descendía, bajado a la tierra por las cuatro puntas. 12 Había en él toda clase de cuadrúpedos y reptiles de la tierra, y aves del cielo.

13 Y oyó una voz[b]: «Levántate, Pedro, mata[c] y come». 14 Pero Pedro dijo: «De ninguna manera, Señor(F), porque yo jamás he comido nada impuro[d] o inmundo(G)». 15 De nuevo, por segunda vez, llegó a él una voz: «Lo que Dios ha limpiado(H), no lo llames tú impuro[e]». 16 Esto sucedió tres veces, e inmediatamente el lienzo[f] fue recogido al cielo.

Los mensajeros de Cornelio

17 Mientras Pedro estaba perplejo pensando en lo que significaría la visión(I) que había visto, en ese momento los hombres que habían sido enviados por Cornelio(J), después de haber preguntado por la casa de Simón, se aparecieron a la puerta. 18 Y llamando, preguntaron si allí se hospedaba Simón, el que también se llamaba Pedro.

19 Mientras Pedro meditaba sobre la visión(K), el Espíritu le dijo(L): «Mira, tres hombres te buscan. 20 Levántate, pues, desciende y no dudes(M) en acompañarlos, porque Yo los he enviado».

21 Pedro descendió a donde estaban los hombres, y les dijo: «Yo soy el que buscan; ¿cuál es la causa por la que han venido?». 22 Y ellos dijeron: «A Cornelio el centurión[g], un hombre justo y temeroso de Dios, y que es muy estimado por toda la nación de los judíos(N), le fue ordenado(O) por un santo ángel(P) que hiciera venir a usted a su casa para oír sus palabras(Q)». 23 Entonces Pedro los invitó a entrar y los hospedó.

Al día siguiente se levantó y fue con ellos, y algunos de los hermanos(R) de Jope(S) lo acompañaron(T).

Pedro en casa de Cornelio

24 Al otro día entró en Cesarea(U). Cornelio los estaba esperando y había reunido a sus parientes y amigos íntimos. 25 Cuando Pedro iba a entrar, Cornelio salió a recibirlo, y postrándose a sus pies, lo adoró(V). 26 Pero Pedro lo levantó, diciendo: «Ponte de pie; yo también soy hombre(W)».

27 Conversando con él, entró y halló* mucha gente reunida(X). 28 Entonces Pedro les dijo: «Ustedes saben que no es lícito para un judío asociarse con un extranjero o visitarlo(Y), pero Dios me ha mostrado que a ningún hombre debo llamar impuro[h] o inmundo(Z). 29 Por eso, cuando mandaron a buscarme, vine sin poner ninguna objeción. Pregunto, pues, ¿por qué causa me han llamado?».

30 Y Cornelio respondió: «Hace cuatro días(AA), a esta misma hora, estaba yo orando en mi casa a la hora novena[i](AB); y un hombre(AC) con vestiduras resplandecientes, se puso delante de mí, 31 y dijo*: “Cornelio, tu oración ha sido oída, y tus obras de caridad[j] han sido recordadas delante de Dios. 32 Envía unos hombres a Jope, y haz llamar a Simón, que también se llama Pedro; él está hospedado en casa de Simón el curtidor, junto al mar[k](AD)”.

Read full chapter

Footnotes

  1. Hechos 10:11 O receptáculo.
  2. Hechos 10:13 Lit. vino una voz a él.
  3. Hechos 10:13 O sacrifica.
  4. Hechos 10:14 O no santo; lit. común.
  5. Hechos 10:15 O no santo; lit. común.
  6. Hechos 10:16 O receptáculo.
  7. Hechos 10:22 I.e. un capitán romano.
  8. Hechos 10:28 O no santo; lit. común.
  9. Hechos 10:30 I.e. 3 p.m.
  10. Hechos 10:31 O limosnas.
  11. Hechos 10:32 Algunos mss. agregan: y cuando llegue, él te hablará.

Al día siguiente, mientras ellos iban por el camino y se acercaban a la ciudad, Pedro subió a la azotea para orar, cerca de la hora sexta. 10 Y tuvo gran hambre, y quiso comer; pero mientras le preparaban algo, le sobrevino un éxtasis; 11 y vio el cielo abierto, y que descendía algo semejante a un gran lienzo, que atado de las cuatro puntas era bajado a la tierra; 12 en el cual había de todos los cuadrúpedos terrestres y reptiles y aves del cielo. 13 Y le vino una voz: Levántate, Pedro, mata y come. 14 Entonces Pedro dijo: Señor, no; porque ninguna cosa común o inmunda he comido jamás. 15 Volvió la voz a él la segunda vez: Lo que Dios limpió, no lo llames tú común. 16 Esto se hizo tres veces; y aquel lienzo volvió a ser recogido en el cielo.

17 Y mientras Pedro estaba perplejo dentro de sí sobre lo que significaría la visión que había visto, he aquí los hombres que habían sido enviados por Cornelio, los cuales, preguntando por la casa de Simón, llegaron a la puerta. 18 Y llamando, preguntaron si moraba allí un Simón que tenía por sobrenombre Pedro. 19 Y mientras Pedro pensaba en la visión, le dijo el Espíritu: He aquí, tres hombres te buscan. 20 Levántate, pues, y desciende y no dudes de ir con ellos, porque yo los he enviado. 21 Entonces Pedro, descendiendo a donde estaban los hombres que fueron enviados por Cornelio, les dijo: He aquí, yo soy el que buscáis; ¿cuál es la causa por la que habéis venido? 22 Ellos dijeron: Cornelio el centurión, varón justo y temeroso de Dios, y que tiene buen testimonio en toda la nación de los judíos, ha recibido instrucciones de un santo ángel, de hacerte venir a su casa para oír tus palabras. 23 Entonces, haciéndoles entrar, los hospedó. Y al día siguiente, levantándose, se fue con ellos; y le acompañaron algunos de los hermanos de Jope.

24 Al otro día entraron en Cesarea. Y Cornelio los estaba esperando, habiendo convocado a sus parientes y amigos más íntimos. 25 Cuando Pedro entró, salió Cornelio a recibirle, y postrándose a sus pies, adoró. 26 Mas Pedro le levantó, diciendo: Levántate, pues yo mismo también soy hombre. 27 Y hablando con él, entró, y halló a muchos que se habían reunido. 28 Y les dijo: Vosotros sabéis cuán abominable es para un varón judío juntarse o acercarse a un extranjero; pero a mí me ha mostrado Dios que a ningún hombre llame común o inmundo; 29 por lo cual, al ser llamado, vine sin replicar. Así que pregunto: ¿Por qué causa me habéis hecho venir?

30 Entonces Cornelio dijo: Hace cuatro días que a esta hora yo estaba en ayunas; y a la hora novena, mientras oraba en mi casa, vi que se puso delante de mí un varón con vestido resplandeciente, 31 y dijo: Cornelio, tu oración ha sido oída, y tus limosnas han sido recordadas delante de Dios. 32 Envía, pues, a Jope, y haz venir a Simón el que tiene por sobrenombre Pedro, el cual mora en casa de Simón, un curtidor, junto al mar; y cuando llegue, él te hablará.

Read full chapter

«Estaba yo en la ciudad de Jope orando(A), y vi en éxtasis una visión(B): un objeto[a] semejante a un gran lienzo que descendía, bajado del cielo por las cuatro puntas, y vino hasta mí. Cuando fijé mis ojos en él y lo observaba, vi[b] cuadrúpedos terrestres, fieras, reptiles y aves del cielo. También oí una voz que me decía: “Levántate Pedro, mata[c] y come”. Pero yo dije: “De ninguna manera, Señor, porque nada impuro[d] o inmundo ha entrado jamás en mi boca”. Pero una voz del cielo respondió por segunda vez: “Lo que Dios ha limpiado, no lo llames tú impuro[e](C)”. 10 Esto sucedió tres veces, y todo volvió a ser llevado arriba al cielo.

11 »En aquel momento se aparecieron tres hombres delante de la casa donde estábamos, los cuales habían sido enviados a mí desde Cesarea(D). 12 Y el Espíritu Santo me dijo que fuera con ellos(E) sin dudar[f](F). Estos seis hermanos fueron también conmigo(G) y entramos en la casa de aquel hombre. 13 Y él nos contó cómo había visto al ángel de pie en su casa, el cual le dijo[g]: “Envía unos hombres a Jope y haz traer a Simón, que también se llama Pedro, 14 quien te dirá palabras(H) por las cuales serás salvo, tú y toda tu casa(I)”.

Read full chapter

Footnotes

  1. Hechos 11:5 O receptáculo.
  2. Hechos 11:6 Lit. y vi.
  3. Hechos 11:7 O sacrifica.
  4. Hechos 11:8 O no santo; lit. común.
  5. Hechos 11:9 O no santo; lit. común.
  6. Hechos 11:12 O sin hacer ninguna distinción.
  7. Hechos 11:13 Lit. y diciendo.

Estaba yo en la ciudad de Jope orando, y vi en éxtasis una visión; algo semejante a un gran lienzo que descendía, que por las cuatro puntas era bajado del cielo y venía hasta mí. Cuando fijé en él los ojos, consideré y vi cuadrúpedos terrestres, y fieras, y reptiles, y aves del cielo. Y oí una voz que me decía: Levántate, Pedro, mata y come. Y dije: Señor, no; porque ninguna cosa común o inmunda entró jamás en mi boca. Entonces la voz me respondió del cielo por segunda vez: Lo que Dios limpió, no lo llames tú común. 10 Y esto se hizo tres veces, y volvió todo a ser llevado arriba al cielo. 11 Y he aquí, luego llegaron tres hombres a la casa donde yo estaba, enviados a mí desde Cesarea. 12 Y el Espíritu me dijo que fuese con ellos sin dudar. Fueron también conmigo estos seis hermanos, y entramos en casa de un varón, 13 quien nos contó cómo había visto en su casa un ángel, que se puso en pie y le dijo: Envía hombres a Jope, y haz venir a Simón, el que tiene por sobrenombre Pedro; 14 él te hablará palabras por las cuales serás salvo tú, y toda tu casa.

Read full chapter