Add parallel Print Page Options

Además, han olvidado la exhortación que como a hijos se les dirige:

«Hijo Mío, no tengas en poco la disciplina del Señor,
Ni te desanimes(A) al ser reprendido por Él(B).
Porque el Señor al que ama, disciplina(C),
Y azota a todo el que recibe por hijo(D)».

Es para su corrección[a] que sufren. Dios los trata como a hijos(E); porque ¿qué hijo hay a quien su padre no discipline? Pero si están sin disciplina, de la cual todos han sido hechos participantes, entonces son hijos ilegítimos y no hijos verdaderos(F). Además, tuvimos padres terrenales[b] para disciplinarnos, y los respetábamos(G), ¿con cuánta más razón no estaremos sujetos al Padre de nuestros[c] espíritus(H), y viviremos(I)?

Read full chapter

Footnotes

  1. 12:7 O disciplina.
  2. 12:9 Lit. de nuestra carne.
  3. 12:9 O los.