Add parallel Print Page Options

10 Pero lo que hacía era malo ante los ojos del SEÑOR, y también a él le quitó la vida. 11 Entonces habló Judá a Tamar su nuera, diciendo:

—Permanece viuda en la casa de tu padre hasta que crezca mi hijo Sela.

Porque pensaba: “No sea que muera él también como sus hermanos”.

Y Tamar se fue y permaneció en la casa de su padre.

12 Pasados muchos años, murió Bat-súa, la mujer de Judá. Cuando Judá se había consolado, subió a Timnat, a los esquiladores de sus ovejas, él y su amigo Jira el adulamita.

Read full chapter