Add parallel Print Page Options

30 Cuando yo llegué tú tenías muy poco, ahora tienes muchísimo más. Cada vez que yo hice algo para ti, el SEÑOR te bendijo. Ahora es tiempo de que yo me preocupe por mí y por mi familia.

31 Labán preguntó:

—¿Qué tengo que darte?

Jacob respondió:

—No tienes que darme nada si haces esto para mí. Yo volveré a alimentar y cuidar a tus ovejas, 32 pero déjame caminar esta noche entre todos tus rebaños. Dame todas las ovejas, machos y hembras, que estén manchadas o rayadas, y todos los corderos negros. Ese será mi salario.

Read full chapter