Add parallel Print Page Options

60 A Rebeca la bendijeron así:

«Hermana nuestra, que seas la madre de miles y miles, y que tus descendientes conquisten las ciudades de sus enemigos.»

61 Rebeca se levantó entonces, junto con sus doncellas, y montando en los camellos siguieron al criado, el cual tomó a Rebeca y se fue.

62 Isaac, que vivía en el Néguev, regresaba del pozo llamado «El que vive y me ve».

Read full chapter