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vestidos de púrpura, gobernadores y oficiales, todos ellos jóvenes apuestos, jinetes montados a caballo(A). Ella cometió sus prostituciones con ellos, con lo más selecto de los asirios; y con todos los que se había apasionado, con todos sus ídolos se contaminó(B). Y no abandonó sus prostituciones de cuando estaba en Egipto; pues en su juventud muchos se habían acostado, y acariciaron sus senos virginales(C) y derramaron sobre ella su pasión.

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