Add parallel Print Page Options

20 Por eso, así dice el Señor Dios: Yo mismo juzgaré entre ovejas gordas y ovejas flacas. 21 Puesto que habéis embestido con el costado y el lomo, y habéis acorneado a todas las ovejas débiles hasta dispersarlas y expulsarlas, 22 voy a poner a salvo a mi rebaño, para que no vuelva a ser presa de nadie, y voy a juzgar entre ovejas y ovejas. 23 Pondré a su servicio un pastor que las apaciente: a mi siervo David. Él se encargará de apacentarlas y de ser su pastor. 24 Yo, el Señor, seré su Dios; y David será su príncipe. Yo, el Señor, he hablado.

Read full chapter