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11 Vi además que bajo el sol
no es de los ligeros la carrera(A),
ni de los valientes[a] la batalla(B);
y que tampoco de los sabios es el pan,
ni de los entendidos las riquezas(C),
ni de los hábiles el favor,
sino que el tiempo y la suerte les llegan a todos(D).

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Footnotes

  1. Eclesiastés 9:11 O, guerreros

11 Me volví y vi debajo del sol, que ni es de los ligeros la carrera, ni la guerra de los fuertes, ni aun de los sabios el pan, ni de los prudentes las riquezas, ni de los elocuentes el favor; sino que tiempo y ocasión acontecen a todos.

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10 Te sentiste segura en tu maldad y dijiste(A):
«Nadie me ve(B)».
Tu sabiduría y tu conocimiento te han[a] engañado,
y dijiste en tu corazón(C):
«Yo, y nadie más(D)».

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Footnotes

  1. Isaías 47:10 Lit., te ha

10 Porque te confiaste en tu maldad, diciendo: Nadie me ve. Tu sabiduría y tu misma ciencia te engañaron, y dijiste en tu corazón: Yo, y nadie más.

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He aquí, tú eres más sabio que Daniel;
ningún secreto te es oculto(A).
Con tu sabiduría y tu entendimiento
has adquirido riquezas para ti,
y has adquirido oro y plata para tus tesoros(B).
Con tu gran sabiduría, con tu comercio,
has aumentado tus riquezas(C),
y se ha enaltecido tu corazón a causa de tus riquezas(D).
Por lo cual, así dice el Señor Dios:
‘Por cuanto has igualado[a] tu corazón
al corazón de Dios(E),
por tanto, he aquí, traeré sobre ti extranjeros(F),
los más crueles de entre las naciones.
Y ellos desenvainarán sus espadas(G)
contra la hermosura de tu sabiduría
y profanarán tu esplendor.

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Footnotes

  1. Ezequiel 28:6 Lit., puesto

he aquí que tú eres más sabio que Daniel; no hay secreto que te sea oculto. Con tu sabiduría y con tu prudencia has acumulado riquezas, y has adquirido oro y plata en tus tesoros. Con la grandeza de tu sabiduría en tus contrataciones has multiplicado tus riquezas; y a causa de tus riquezas se ha enaltecido tu corazón. Por tanto, así ha dicho Jehová el Señor: Por cuanto pusiste tu corazón como corazón de Dios, por tanto, he aquí yo traigo sobre ti extranjeros, los fuertes de las naciones, que desenvainarán sus espadas contra la hermosura de tu sabiduría, y mancharán tu esplendor.

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