Add parallel Print Page Options

Arreglarás el camino y dividirás en tres distritos el territorio de tu tierra que el SEÑOR tu Dios te da en heredad, para que huya allí todo homicida.

“Este es el caso del homicida que puede huir allí para salvar su vida: el que mata a su prójimo por accidente, sin haberle tenido aversión previamente; como el que va con su prójimo al bosque a cortar leña, y alzando su mano con el hacha para cortar un tronco, se le suelta el hierro del palo y alcanza a su compañero, de modo que este muere. Aquel podrá huir a una de aquellas ciudades y vivir.

Read full chapter