Quiero que sepan qué gran lucha sostengo por el bien de ustedes y de los que están en Laodicea, y de tantos que no me conocen personalmente. Quiero que lo sepan para que cobren ánimo, permanezcan unidos por amor, y tengan toda la riqueza que proviene de la convicción y del entendimiento. Así conocerán el misterio de Dios, es decir, a Cristo, en quien están escondidos todos los tesoros de la sabiduría y del conocimiento. Digo esto para que nadie los engañe con argumentos que parecen convincentes. Aunque estoy físicamente ausente, los acompaño en espíritu, y me alegro al ver su buen orden y la firmeza de su fe en Cristo.

Libertad en Cristo

Por eso, de la manera que recibieron a Cristo Jesús como Señor, vivan ahora en él, arraigados y edificados en él, confirmados en la fe como se les enseñó y llenos de gratitud.

Cuídense de que nadie los cautive con la vana y engañosa filosofía que sigue tradiciones humanas, la que está de acuerdo con los principios[a] de este mundo y no conforme a Cristo.

Porque toda la plenitud de la divinidad habita en forma corporal en Cristo; 10 y en él, que es la cabeza de todo poder y autoridad, ustedes han recibido esa plenitud. 11 Además, en él fueron circuncidados, no por mano humana, sino con la circuncisión que consiste en despojarse del cuerpo pecaminoso. Esta circuncisión la efectuó Cristo. 12 Ustedes la recibieron al ser sepultados con él en el bautismo. En él también fueron resucitados mediante la fe en el poder de Dios, quien lo resucitó de entre los muertos.

13 Antes de recibir esa circuncisión, ustedes estaban muertos en sus transgresiones. Sin embargo, Dios nos[b] dio vida en unión con Cristo, al perdonarnos todos los pecados 14 y anular la deuda[c] que teníamos pendiente por los requisitos de la Ley. Él anuló esa deuda que nos era adversa, clavándola en la cruz. 15 Desarmó a los poderes y a las autoridades y, por medio de Cristo,[d] los humilló en público al exhibirlos en su desfile triunfal.

16 Así que nadie los juzgue a ustedes por lo que comen, beben o con respecto a días de fiesta religiosa, de luna nueva o de sábado. 17 Todo esto es una sombra de las cosas que están por venir; la realidad se halla en Cristo. 18 No dejen que les prive de esta realidad ninguno de esos que presumen fingiendo humildad y adoración de ángeles. Los tales hacen alarde de lo que han visto y, envanecidos por su razonamiento humano, 19 no se mantienen firmemente unidos a la Cabeza. Por la acción de esta, todo el cuerpo, sostenido y ajustado mediante las articulaciones y los ligamentos, va creciendo como Dios quiere.

20 Si con Cristo ustedes ya han muerto a los principios de este mundo, ¿por qué, como si todavía pertenecieran al mundo, se someten a preceptos tales como 21 «no tomes en tus manos, no pruebes, no toques»? 22 Estos preceptos, basados en reglas y enseñanzas humanas, se refieren a cosas que van a desaparecer con el uso. 23 Tienen sin duda apariencia de sabiduría, con su afectada devoción, falsa humildad y severo trato del cuerpo, pero de nada sirven frente a los apetitos de la carne.[e]

Footnotes

  1. 2:8 los principios. Alt. los poderes espirituales, o las normas; también en v. 20.
  2. 2:13 nos. Var. les.
  3. 2:14 la deuda. Lit. el pagaré.
  4. 2:15 por medio de Cristo. Alt. mediante la cruz.
  5. 2:23 En contextos como estos la palabra griega para carne (sarx) se refiere a la naturaleza pecaminosa de los seres humanos, a menudo presentada en oposición al Espíritu.

Yo quiero que sepan que estoy luchando mucho, tanto por ustedes, los de la iglesia en el pueblo de Laodicea, como por los que no me conocen personalmente. Y lucho para animarlos a todos, y para que se mantengan unidos en el amor de Cristo, y así lleguen a tener la plena seguridad de comprender todo el plan que Dios y Cristo habían mantenido en secreto. Todas las riquezas de la sabiduría y del conocimiento se encuentran presentes en Cristo. Les digo esto para que nadie los engañe con frases bonitas, pero falsas. Porque, aunque no estoy con ustedes, siempre los recuerdo y me alegro de saber que son ordenados, y que siguen confiando plenamente en Jesucristo.

La vida nueva que Cristo da

Ustedes han aceptado a Jesucristo como su dueño y Señor. Por eso, deben vivir como a él le agrada. Tal como se les enseñó, confíen cada vez más en él, y vivan obedeciendo sus enseñanzas para ser cada vez mejores, y den siempre gracias a Dios.

Tengan cuidado. No presten atención a los que quieren engañarlos con ideas y razonamientos que parecen contener sabiduría, pero que sólo son enseñanzas humanas. Esa gente obedece a los espíritus poderosos de este mundo, y no a Cristo.

Cristo es completamente igual a Dios, 10 y reina sobre todos los espíritus que tienen poder y autoridad. A ustedes no les falta nada, pues están unidos a Cristo.

11 Los judíos se circuncidan en señal de que son parte del pueblo de Dios. Pero a ustedes Dios los hizo parte de su pueblo al unirlos a Cristo, y así les quitó el deseo de seguir pecando. Ésa fue la circuncisión que Dios mismo les hizo. 12 Cuando ustedes fueron bautizados, fueron sepultados con Cristo. Y resucitaron con él, porque confiaron en el poder de Dios. 13 Antes, ustedes estaban muertos, pues eran pecadores y no formaban parte del pueblo de Dios. Pero ahora Dios les ha dado vida junto con Cristo, y les ha perdonado todos sus pecados. 14 La ley escrita estaba en contra de nosotros, pero Dios le puso fin por medio de la muerte de Cristo en la cruz. 15 Dios les quitó el poder a los espíritus que tienen autoridad, y por medio de Cristo los humilló delante de todos, al pasearlos como prisioneros en su desfile victorioso.

16 No dejen que nadie los critique por lo que comen o beben, o porque no celebran ciertas fiestas ni respetan los días de luna nueva o de descanso. 17 Todo eso no era más que la sombra engañosa de lo que estaba por venir. Lo real y verdadero es Cristo. 18 Así que no dejen que nadie los condene, y menos esa gente que adora a los ángeles y que aparenta ser humilde. Dicen que ven visiones, pero mienten. Sus pensamientos los llenan de orgullo, pero sólo piensan cosas malas. 19 Esa gente no está unida a Cristo, que es quien gobierna a la iglesia y quien le da más y más fuerzas. Cristo le da a la iglesia todo lo que necesita, y une a todos sus miembros de acuerdo con el plan de Dios.

Vivir como Dios quiere

20 Ustedes están unidos a Cristo por medio de su muerte en la cruz, y ya no están sometidos a los espíritus que gobiernan este mundo. Entonces, ¿por qué se comportan como si todavía estuvieran bajo su dominio? ¿Por qué obedecen a quienes les dicen 21 «no toquen esto», «no coman eso», «no prueben aquello»? 22 Esas reglas no son más que enseñanzas humanas, que con el tiempo van perdiendo su valor. 23 No se puede negar que son útiles, porque enseñan acerca de la conducta religiosa, la humildad y el dominio del cuerpo. Pero lo cierto es que no ayudan a combatir los malos deseos de nuestra naturaleza humana.

Wajbˈila tuˈn kybˈintiˈy, qa tok tilil wuˈn kujxix wen, tuˈn kyel wena toj kynimbˈila, ex ikyxjo kyeˈ aj tnam Laodicey, ex kykyaqilxjo a naˈmx wiwliˈy kyuˈn. Nchin aqˈniˈn tuˈn tnimsit kykˈuˈj toj kynimbˈil, ex tuˈn kymujbˈinte kyibˈ, noq tuˈnjo kyqˈaqˈbˈil kykˈuˈj kyxolx; ex noq tuˈn tel kynikyˈxix wen tiˈj tkyaqil t‑xilin Tyol Dios, ex tuˈn tqe kykˈuˈj tiˈjjo a ewintaq ojtxe tuˈn Dios, a Crist ewintaq. Quˈn noq tuˈn Jesús, o tzˈele pjet tkyaqiljo tqˈinimil t‑xilin nabˈl ex jniˈ ojtzqibˈl.

Tkyaqiljo luˈn nxi nqˈmaˈn kyeˈy, tuˈn mina chi kubˈ sbˈuˈn tuˈn juntl xnaqˈtzbˈil, a tbˈanilxnaj tqˈumle, me nya twutzx. Exla qa ntiˈqiˈn kyxola, me nimxix nchin ximiˈn kyiˈja, nyakuj tzeˈnku intiˈn kyxola. Ex nchin tzalaja tuˈn nxi nbˈiˈn qa at nukˈbˈil kyxola, ex qa waˈlqexixa toj kynimbˈila tiˈj Crist.

Jun akˈaj chwinqil tuˈn Jesucrist

Ikytziˈn tzeˈnku xi xkye akˈaj kychwinqila tukˈa qAjaw Jesucrist te tnejil noq tuˈn kynimbˈila; ikytzin tuˈn kybˈetejiˈy jaˈlin tukˈa, toj tkyaqil. Jun nimil ikyjo, ikyx tzeˈnku jun tze, a nimxix ma txaˈye tlokˈ toj txˈotxˈ, tuˈn tchˈiy wen, ex tuˈntzin mi yekje. Ex ikytzin jun nimiljo qa ma qexix tkˈuˈj tiˈjjo nimbˈil twutzxix, a tzaj xnaqˈtzin te, nlay jaw kaˈmin tkˈuˈj tojjo tnimbˈil, ex kukx nqˈoˈn chjonte te qMan Dios.

Tuˈnpetziˈn, kyqˈonktziˈn tilil tuˈn mina chi kubˈ sbˈuˈniˈy kyuˈnxjal, a nya twutzxix kyyol, ex nimxix t‑xilin kynabˈl tuˈn kysbˈun. Quˈn atziˈn kyxnaqˈtzbˈil, ntiˈ tumil, quˈn nya tzajnin tiˈj Crist; qalaˈ tiˈjjo kyxnaqˈtzbˈil ojtxe xjal, ex tiˈjjo jun ojtxe kawbˈil, a ntiˈ tumil.

Me ate Jesucrist, ax Diosjo, quˈn tiˈjxjo Crist, a ichin skˈoˈnxix tuˈn Dios, yekˈineˈ tkyaqiljo t‑xilin qMan. 10 Ex ayetzin kyeˈ tzˈaqleqexixa tuˈn kymujbˈil kyibˈa tukˈa Jesucrist, ex tuˈn najle Crist toj kyanmiˈn. Ex ax Jesús at nimxixtl toklin tibˈaj tkyaqil nmaq nejinel ex jniˈ kawbˈil. 11 Ex noq tuˈn kymujbˈil kyibˈa tukˈa Crist, ma chi oka nyakuj at kyechila. Me nyateljo tzeˈnku kyij ttzˈibˈin Moisés, tuˈn tok qitittaq tiˈj kytzˈumil xjal ojtxe, ex tuˈn tel paˈyit chˈin kytzˈumil kyiˈj, ex tuˈn ikyjo, tuˈn kykyijxjal toj wen tukˈa Dios; quˈn at juntl wiql paˈbˈl te qe jaˈlin: Noq tuˈn ma tzˈel qpaˈn qibˈ tiˈj ojtxe qten, ajo tkyaqil il, ex tiˈjjo jniˈ nya wen tokxtaq toj qanmin, aku bˈant tuˈn qkyij toj wen tukˈa Dios. Atziˈn tkabˈ paˈbˈl lo, axixsinte akˈaj techiljo toj qanmin, a tzajnin tiˈj Crist. 12 Tuˈnpetziˈn, tej qkuˈx toj aˈ te jawsbˈil aˈ, nyakuj o qo kyim tojjo ojtxe qten, ex nyakuj o qo kux muqet junx tukˈa Crist, tej tkuˈx toj txˈotxˈ. Ex tej qjatz toj aˈ, jun techil qa ma qo jaw itzˈje tukˈa jun akˈaj qchwinqil, ikyxjo tzeˈnku jaw itzˈje te Jesús juntl majl kyxol kyimnin. Ex a teˈ akˈaj qchwinqil ma tzaj qkˈmoˈn noq tuˈn qnimbˈil tiˈj tipin Dios, a jatz anqˈin Jesús tuˈn.

13 Tej naˈmtaq tel kypaˈn kyibˈa tiˈjjo ojtxe kyteˈn, kyimninqetaqa twutz Dios, ex otaq chi naja toj kyila. Me atziˈn jaˈlin, ma tzaj tqˈoˈn qMan Dios akˈaj kychwinqila junx tukˈa Jesucrist; ex noq tuˈn Jesús, o najsit tkyaqil kyila. 14 Noq tuˈn tpaj qil, at jun qkˈas twutz Dios, a nqanintaq qiˈj tuˈn qkyim, ikyxjo tzeˈnku ntqˈmaˈn ojtxe tkawbˈil Dios. Ex ojtxe, iltaq tiˈj tuˈn tkyim jun aj il twutz cruz tjaqˈ jun tuˈjil til, a pejkˈinktaq tibˈaj twiˈ. Me atzin te Jesús, ntiˈ til, me xi tqˈoˈn tibˈ te qxel tuˈn tchjet tkyaqil qil, nyakuj ma tzˈok pejkˈit tuˈjil qil junx tukˈa, tej tkyim twutz cruz tuˈn qpaj.

15 Tej tkyim Jesús twutz cruz, ex tej tjaw anqˈin juntl majl kyxol kyimnin, kubˈ tyekˈin kywutz kykyaqilxjal, qa at nimxixtl tipin tibˈaj tkyaqil nmaq nejinel ex tibˈaj tajaw kyimin, ex tibˈaj tkyaqil kawbˈil toj tchˈiysbˈin Dios, ex kubˈ tchikyˈbˈinxix wen qa o kanbˈin tibˈaj tkyaqiljo luˈn.

Il tiˈj tuˈn tkubˈ qnimin Tyol Dios, a twutzxix

16 Tuˈnpetziˈn, mi txi kyqˈoˈn ambˈil kyexjal tuˈn kyyolbˈin kyiˈja noq tuˈn tpaj ojtxe kawbˈil, tzeˈnku tiˈ tuˈn t‑xi kywaˈn, ex tiˈ tuˈn kyxi kykˈwaˈn; ex tuˈn tpajjo nintz qˈij nchi ikyˈsit, mo kyiˈjjo xim tiˈj neˈẍ yaye, mo tuˈn tpajjo tuˈn tbˈant jun tiˈla kyuˈn toj qˈij te ajlabˈl. 17 Quˈn kykyaqiljo luˈn n‑ajbˈintaq ojtxe noq te jun techil tiˈjjo akˈaj tumil, a iltaq tiˈj tuˈn tul, tuˈn kykyijxjal toj wen tukˈa Dios. Quˈn tkyaqiljo luˈn, a tzajnin toj ojtxe kawbˈil, ikytziˈn tzeˈnku jun t‑xlekemil, a jun paqx n‑ikyˈ. Me atziˈn jaˈlin, ate Crist, a twutzxix, o tzul te jun majx, ex tkyaqiljo txqantl, nlay chi mojin qukˈa toj qnimbˈil. 18 Quˈn tkyaqiljo luˈn noqx jun kyximxjal, ex ntiˈ tumil. Aye xjal luˈn noq n‑ok kyqˈoˈn kyibˈ te wenxix, me oˈkx nchi xnaqˈtzin tiˈjjo a kyaj, ex kyiˈjjo kywutzikyˈ, ex qa il tiˈj tuˈn qkˈulin kywutz angel. Me ayeˈ xjal lo, noq nkynimsin kyibˈ kywutzxjal, me ntiˈ tumil tuˈn qxi lipe kyiˈj. Quˈn qa ma kyij qtzaqpiˈnqe Tbˈanil Tqanil tiˈj Jesús, okla qo najil, ex ntiˈla jun oyaj te qe toj kyaˈj.

19 Aye xnaqˈtzil lo, ntiˈ kymujbˈil kyibˈ tukˈa Jesucrist, a wibˈaj tibˈaj tkyaqil Ttanim Dios, a axjo t‑xmilil Crist. Atziˈn Crist tok te wiˈbˈaj, atzin nchˈiysin teˈ t‑xmilil, a Ttanim Dios: Nqo tzaj tkˈaˈchin, ex nqo ok tmujbˈin toj tumil tuˈntzin qchˈiy, tzeˈnkuxjo tajbˈil qMan Dios.

20 Ayetzin kyeˈ, o chi kyim kyeˈ tukˈa Crist, tej ttzaj tqˈoˈn akˈaj kychwinqila. Tuˈn ikyjo, o chi tzaqpaja tjaqˈ jniˈ nmaq kawbˈil ex tkyaqil xnaqˈtzbˈil kyuˈnxjal, a nya tzˈaqleqe. Qatzin qa ikyjo, ¿Titzin quˈntz tzunx nchi anqˈiˈn nyakuj jun nya nimil, ex nkubˈ kyniminjiˈy a kyxnaqˈtzbˈilxjal, a nya toj tumil nqˈumle, 21 aj ttzaj kyqˈmaˈn kyjaluˈn: Mi tzaj kytzyuˈnjiˈy luˈn, ex mi txi kywaˈnjiˈy luˈn, ex mi tzˈok kymekoˈnjiˈy luˈn? chi chiˈ. 22 Quˈn tkyaqiljo xnaqˈtzbˈil luˈn, ok kbˈajil liwey, quˈn noq xnaqˈtzbˈilku ex noq kyximxjal.

23 Tkyaqiljo xnaqˈtzbˈil lo nyakuj at tumil, quˈn tuˈn nkubˈ kymutxsin kyibˈ tuˈn, ex nkubˈ kykyˈixbˈin kyxmilil tuˈn, ex kujxixjo lo tuˈn tjapin. Me tkyaqiljo luˈn ntiˈ tumil tuˈn ttxˈixpit qanmin tuˈn, tiˈj tkyaqiljo nya wen, a ntqanin ojtxe qten.