Cantares 7
La Palabra (Hispanoamérica)
Coro
7 Vuelve, vuelve, Sulamita;
vuelve, vuelve, que te veamos.
¿Qué ven en la Sulamita
cuando danza entre dos coros?
Amado
2 ¡Qué hermosos tus pies
en las sandalias, princesa!
Las curvas de tus caderas
son alhajas fabricadas
por manos de artesanos.
3 Tu ombligo es copa redonda
donde no falta el licor.
Tu vientre, montón de trigo
rodeado de azucenas.
4 Tus dos pechos son dos crías
mellizas de gacela.
5 Torre de marfil, tu cuello;
pozos de Jesbón, tus ojos,
junto a la puerta mayor;
tu nariz, torre del Líbano,
centinela de Damasco.
6 Tu cabeza se levanta
igual que el monte Carmelo,
tu cabello es como púrpura
que a un rey enreda en sus trenzas.
7 ¡Qué hermosa y que dulce eres,
amor mío, qué delicia!
8 Tu talle es una palmera
y tus pechos, los racimos.
9 Dije: “Subiré a la palmera
y recogeré sus dátiles”.
Tus pechos serán racimos de uvas
y tu aliento, aroma de manzanas.
10 Tu paladar es como vino bueno
que me baja suavemente,
remojando los labios y los dientes.
Amada
11 Yo pertenezco a mi amor
que siente pasión por mí.
12 Ven, amor mío, vayamos al campo
y pasemos la noche en las aldeas.
13 De madrugada iremos a las viñas
a ver si están en cierne las vides,
si despuntan los retoños,
si florecen los granados.
¡Y allí te daré mi amor!
14 Las mandrágoras esparcen sus aromas
y a la puerta están todos los frutos,
tanto nuevos como añejos,
que he guardado, amor mío, para ti.
La Palabra, (versión hispanoamericana) © 2010 Texto y Edición, Sociedad Bíblica de España