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Luego vi a un Cordero frente al trono, con las cuatro criaturas y los ancianos a su alrededor. Parecía un Cordero sacrificado. Tenía siete cuernos y siete ojos que son los siete[a] espíritus de Dios enviados por toda la tierra. Entonces el Cordero vino y tomó el rollo de la mano derecha del que estaba sentado en el trono. En ese momento, las cuatro criaturas y los 24 ancianos se arrodillaron ante el Cordero. Cada uno tenía un arpa y vasijas doradas llenas de incienso que son las oraciones del pueblo santo de Dios.

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Footnotes

  1. 5:6 siete Algunos manuscritos antiguos no tienen esta palabra.