Add parallel Print Page Options

Así me mostró: He aquí que el Señor estaba de pie sobre un muro hecho a plomo, y en su mano tenía una plomada de albañil. Entonces me preguntó el SEÑOR:

—¿Qué ves, Amós?

Yo respondí:

—Una plomada de albañil.

Y el SEÑOR dijo:

—He aquí yo pongo una plomada de albañil en medio de mi pueblo Israel. ¡No lo soportaré más! Los altares de Isaac serán destruidos y los santuarios de Israel quedarán desolados. Y me levantaré con espada contra la casa de Jeroboam.

Read full chapter