Add parallel Print Page Options

Sin embargo, Amnón tenía un amigo muy astuto llamado Jonadab, el cual era sobrino de David, pues era hijo de Simea, hermano de David. Un día, Jonadab le preguntó a Amnón:

«Oye, cada día te veo más delgado. ¡Y tú eres el hijo del rey! ¿No me vas a decir qué te pasa?»

Entonces Amnón le dijo:

«Es que estoy enamorado de Tamar, la hermana de mi hermano Absalón.»

Entonces Jonadab le aconsejó:

«Métete a la cama, y finge que estas enfermo. Y cuando tu padre venga a visitarte, dile: “¡Por favor, que venga mi hermana Tamar! Que me prepare algo y me dé de comer. Si ella lo prepara, yo comeré.”»

Read full chapter