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16 David se puso a rogar a Dios por él; ayunaba y pasaba las noches tirado en el suelo. 17 Los ancianos de su corte iban a verlo y le rogaban que se levantara, pero él se resistía, y aun se negaba a comer con ellos.

18 Siete días después, el niño murió. Los oficiales de David tenían miedo de darle la noticia, pues decían: «Si, cuando el niño estaba vivo, le hablábamos al rey y no nos hacía caso, ¿qué locura no hará ahora si le decimos que el niño ha muerto?»

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