1 Reyes 9:2-9
La Palabra (España)
2 se le apareció el Señor por segunda vez, como se le había aparecido en Gabaón, 3 y le dijo:
— He escuchado las súplicas y plegarias que me has dirigido. He consagrado este Templo que has construido como residencia perpetua de mi nombre: aquí estarán siempre mis ojos y mi corazón. 4 Si tú procedes conmigo, como hizo tu padre David, con rectitud e integridad de corazón, cumpliendo lo que te he mandado y guardando mis preceptos y decretos, 5 reafirmaré para siempre tu reinado sobre Israel, tal como prometí a tu padre David: “No te faltarán descendientes en el trono de Israel”. 6 Pero si vosotros y vuestros hijos me abandonáis, si dejáis de observar los mandamientos y preceptos que os he dado y os vais a servir y a adorar a otros dioses, 7 arrancaré a Israel de la tierra que le he dado, rechazaré este Templo que he consagrado a mi nombre, e Israel quedará convertido en refrán y burla de todos los pueblos. 8 Este Templo quedará en ruinas y todo el que pase a su lado silbará extrañado y preguntará: “¿Por qué ha tratado así el Señor a este país y a este Templo?”. 9 Entonces le responderán: “Porque abandonaron al Señor, su Dios, que sacó a sus antepasados de Egipto, y se aferraron a otros dioses para adorarlos y servirlos. Por eso el Señor ha hecho caer sobre ellos todos estos castigos”.
Read full chapterLa Palabra, (versión española) © 2010 Texto y Edición, Sociedad Bíblica de España